Autor: arenas
domingo, 20 de mayo de 2007
Sección: Noticias
Información publicada por: arenas
Mostrado 44.197 veces.
Tesoro submarino
Tesoro submarino
Cultura sospecha que la empresa Odyssey podría haber expoliado el patrimonio español
La compañía estadounidense anunció ayer el hallazgo de un tesoro submarino sin precisar su lugar de procedencia
EFE - Madrid - 19/05/2007
El Ministerio de Cultura ha alertado a la Guardia Civil ante un posible delito de expolio del patrimonio español por parte de la empresa estadounidense Odyssey, que ayer anunció el hallazgo un buque hundido con un valioso botín, cuya nacionalidad y lugar de procedencia se negó a facilitar. El tesoro está formado por unas 17 toneladas de monedas de plata y oro, valoradas en 370 millones de euros.
Según han comunicado fuentes de Cultura, la compañía de exploración marina Odyssey dispone de la autorización necesaria para investigar si alguno de los pecios hundidos frente a las costas de Gibraltar (Mar de Alborán) es el HMS Sussex -que naufragó en 1694-, aunque no para realizar extracciones arqueológicas subacuáticas.
En este sentido, Cultura ha calificado de "sospechoso" que la empresa Odyssey no diera a conocer la nacionalidad del buque en el que se encontró el valioso botín ni su localización exacta, que según informó ayer la empresa se sitúa en aguas internacionales y en un punto indeterminado del océano Atlántico.
Como garante del patrimonio español, el Ministerio de Cultura ha alertado a la Guardia Civil para que investigue este asunto, vigile las costas de Gibraltar y averigüe si el hallazgo, formado por unas 17 toneladas de monedas de plata y oro -valoradas en 370 millones de euros-, se encuentra en aguas españolas o pertenece a un buque de bandera española, en cuyo caso se habría cometido un delito de expolio. Según informó ayer la empresa Odyssey, el medio millón de monedas extraídas hasta el momento, cuya procedencia y características también se negaron a revelar, han sido trasladas a territorio estadounidense.
Fuentes de la Guardia Civil han explicado que de estos casos se ocupa el Grupo de Patrimonio Histórico, con el apoyo de los Grupos Subacuáticos y del Servicio Marítimo, y han recordado que ya hubo antecedentes de inspecciones por las actividades de esta compañía de exploración marina, con el objetivo de comprobar que cumplía con la normativa internacional.
El Ministerio de Cultura anunció el pasado marzo que vigilaría a Odyssey en las operaciones de identificación del buque HMS Sussex, un navío de bandera inglesa que naufragó en la zona del mar de Alborán en 1694 con un mercancía formada por nueve toneladas de oro y valorada en 4,5 millones de dólares, y cuyo descubrimiento y posible rescate provocó una controversia que se saldó con un acuerdo entre los Gobiernos de España y Reino Unido.
Noticia de elpais.com
-
No hay imágenes relacionadas.
Comentarios
Pulsa este icono si opinas que la información está fuera de lugar, no tiene rigor o es de nulo interés.
Tu único clic no la borarrá, pero contribuirá a que la sabiduría del grupo pueda funcionar correctamente.
Si te registras como usuario, podrás añadir comentarios a este artículo.
¡como sea español es para darles de leches a los que supuestamente protegen nuestro patrimonio!
Y sea de quien sea no se yo si lo desembarcaría en USA.
(mejor en Las Caimán, ¿no?).
Por ahora, las noticias parecen contradictorias. Cultura parece que se moja cuando sospecha que el pecio se encuentra en aguas españolas, máxime cuando el avión salió de Gibraltar. Acabo de consultar el Google News, y en El Diario (Nueva York), aparece este titular:
Expertos creen que tesoro hallado es de barco inglés naufragado en Cornualles
"Lo que ha hecho pensar a los expertos británicos y estadounidenses que el tesoro corresponde al del Merchant Royal es que la compañía solicitó a finales del año pasado a un tribunal de EEUU los derechos exclusivos para rescatar los restos de un buque mercante del siglo XVII naufragado a unas 40 millas (unos 74 kilómetros) del extremo más suroccidental de Inglaterra".
La compañía, por su parte, sostiene que el pecio se encuentra en aguas internacionales, fuera de la jurisdicción de cualquier país.
Si esto no fuese cierto, y se expolió un pecio dentro de aguas territoriales españolas, ahora es de suponer que ya no hay nada que hacer porque el tesoro se encuentra en Estados Unidos. No obstante, este hecho podría dar pie a reforzar los controles por parte de las autoridades españolas, tanto en lo que a facilidades se refiere a la hora de consultar fondos documentales susceptibles de contener información para localizar pecios por parte de estas compañías, como a la hora de conceder la "autorización necesaria para investigar si alguno de los pecios hundidos" es este u otro, aunque no se les conceda permiso para realizar extracciones.
Creo que nada impide a las autoridades españolas conceder permisos prospección subacuática, condicionados a la presencia de miembros del Grupo de Patrimonio de la Guardia Civil, de miembros de alguna universidad española, o incluso de funcionarios del propio Ministerio o de una Consejería. En definitiva, prevenir.
A los yankis estos no habría que darles ni agua, en cuanto tienen la mínima oportunidad y si no te andas con ojo te roban todo lo que quieran, caso de multitud de monumentos y de elementos artísticos españoles que se hallan allí. Como los británicos y sus expoliaciones de los monumentos griegos y egipcios, lo dicho una verguenza, espero que no toquen más porque lo contaminan todos.
Gracias y Saludos dsd Cái
Rexhispaniae
El Código Deontológico de Museos, aprobado por el ICOM dice en su art. 2.2:
"Un museo no debe adquirir ningún objeto o espécimen por compra, donación, préstamo, legado o intercambio sin que esté seguro de la existencia de un título de propiedad válido. Una prueba de propiedad o la posesión legal de un objeto en un país determinado no constituyen forzosamente un título de propiedad válido".
Y en el 2.3:
"Se deben realizar todos los esfuerzos necesarios para asegurarse de que un objeto ofrecido en compra, donación, préstamo, legado o intercambio no ha sido adquirido o exportado ilegalmente de su país de origen o de un país en tránsito en el que hubiera podido serposeído legalmente, incluído el país en que se encuentra el museo. A este respecto, se debe obrar con la debida diligencia para reconstituir el historial completo del objeto desde su descubrimiento o creación".
En el 2.4:
"Un museo no debe adquirir objetos cuando haya motivos razonables para creer que su obtención se ha conseguido a costa de la destrucción o deterioro prohibidos, no científicos o intencionados de monumentos, sitios arqueológicos o
geológicos, especies o hábitats naturales. Tampoco se deben efectuar adquisiciones cuando no se ha advertido del descubrimiento de los objetos al propietario, al ocupante del terreno o a las autoridades legales o gubernamentales correspondientes".
Fuente: ICOM España
Espero que los museos de Estados Unidos lo tengan en cuenta a la hora de adquirir objetos procedentes del pecio... aunque supongo que las moneditas se venderán pieza a pieza, que es el modo de conseguir lo que se busca por los cazatesoros: $
Y me olvidaba:
"6.3. Restitución de bienes culturales.
Si un país o una comunidad de los que proceden objetos o especímenes piden su restitución y se puede probar no sólo que éstos han sido exportados, o transferidos de otra manera, en contra de los principios de los convenios internacionales y nacionales, sino que además forman parte del patrimonio cultural o natural del país o la comunidad peticionarios, el museo interesado debe tomar rápidamente las medidas
pertinentes para cooperar en su devolución, si tiene la posibilidad legal de hacerlo".
Fuente: Código Deontológico para Museos
Alguien duda que mientras nuestras autoridades se alertan, sospechan y advierten, la totalidad de ese patrimonio como muchos otros antes estará ya buen recaudo en EEUU protegido por sus liberales y ultranacionalistas leyes.
Y lo verdaderamente lamentable, ¿no es la ineptitud de los servicios de control españoles en vez del expolio de la empresiat de marrás?
¿cuantos funcionarios de la GC y d epatrimonio estarán huntados con ese oror?
¿De que nso escandalizamos si nuestra administración no se toma la mas mínima molestia por recuperar, proteger y estudiar nuestro patrimono? Lo raro es que aun queden cosas que expoliar...
prespas, creo que eso de "untar", me parece mucho decir. Cosas más raras se han visto, pero en mi opinión, los tiros apuntan hacia unos caras. Consultando el Google News, resulta que la Junta de Andalucía, debía haber enviado un arqueólogo hace mes y medio, y dice que no lo hizo por "lentitud administrativa", que quien tenía que haber estado ojo avizor era la sección de Patrimonio de la Guardia Civil... Unos por otros y la casa...
Parece que las cosas se clarifican. De acuerdo con La Gaceta de los Negocios la extracción, a tenor de lo que les dicen los expertos que consultaron y las imágenes de satélite a las que tuvieron acceso, fue en unas coordenadas que pertenecen a aguas españolas, y además no en el Atlántico, sino en el mar de Alborán. Por otra parte, denuncian la connivencia entre las autoridades gibraltareñas y los propietarios de Odissey. En fin, puse un enlace que me parece de interés.
El mismo periódico, recoge hace una hora las declaraciones de la ministra Carmen Calvo en donde señala que si se confirma que hubo expolio del patrimonio subacuático en aguas españolas, el gobierno hará uso de la legislación internacional para recuperar las piezas Odyssey afirma que España no le ha pedido información sobre el hallazgo
Ojalá lo recuperen, pero largo me lo fiais. Me conformaría con que este hecho sirviese para incrementar los mecanismos de vigilancia sobre las compañías cazatesoros y para no dar tantas facilidades para la consulta de aquellos fondos documentales susceptibles de proporcionar información sobre pecios.
Las informaciones no es que sean contradictorias, es que leyendo algunos medios, parece que los amigos británicos no parecen interesados en investigar si el pecio estaba a escasas millas de las costas inglesas, sino se ponen de parte de Odyssey:
La Embajada Británica sostiene que la empresa "Odyssey Marine Exploration" ha llevado a cabo la operación "Cisne negro" "fuera de aguas territoriales o de la jurisdición legal de cualquier país".
Asimismo, la embajada explica que "Odyssey Marine Exploration", "está trabajando con la mayor celeridad posible para averiguar la identidad del barco hundido"
Fuente: LA EMBAJADA BRITÁNICA ASEGURA QUE EL TESORO ENCONTRADO POR LA EMPRESA ODYSSEY NO PERTENECE AL BUQUE INGLÉS HMS SUSSEX
Las informaciones de prensa apuntan a que no se trata del HMS Sussex, sino de un barco español porque han aparecido monedas de Carlos III. Lo que no me acabo de explicar es el motivo que lleva a afirmar a la embajada inglesa en Madrid que el pecio se encuentra "fuera de aguas territoriales o de la jurisdición legal de cualquier país".
Con la venia, remito esta interesante noticia vía Terraeantiqvae:
Para: terraeantiqvae@yahoogroups.com
Assunto: [terraeantiqvae] Vídeo de la cadena NBC sobre el tesoro “recuperado” por Odyssey
Quizá este vídeo emitido por la televisión norteamericana pueda aportar pistas a los expertos sobre la naturaleza del mismo.
Real-life pirates' booty
May 21: NBC's Michael Okwu reports on the treasure hunters who found 17 tons of gold and silver coins from a colonial ship.
http://www.msnbc.msn.com/id/18785078/
Spain says sunken treasure might be plunder
Authorities conduct investigation; discoverers say they followed the rules
MSNBC staff and news service reports
Updated: 9:01 p.m. ET May 21, 2007
MADRID, Spain - Spanish authorities are investigating whether one of the world's biggest-ever finds of sunken treasure was plundered from its waters or from a shipwrecked Spanish galleon, the government said Monday.
The investigation comes in the wake of last week's disclosure from Odyssey Marine Exploration, a Florida-based treasure-hunting venture, that divers had recovered gold and silver coins worth an estimated $500 million from a shipwreck at an undisclosed location in the Atlantic Ocean.
Spain's Culture Ministry called the discovery "suspicious" and said the booty could have come from a wrecked Spanish galleon or the remains of HMS Sussex off the coast of Gibraltar, which Spain and Britain have allowed Odyssey to survey.
"Both taking (treasure) from Spanish waters or a Spanish vessel that sunk outside Spanish waters would be illegal," a spokeswoman for the ministry said. "The Culture Ministry reported the suspicion of possible criminal plundering and we alerted the civil guard (police) who are investigating."
Research suggests that the 80-cannon Sussex sank during a storm in 1694, while it was on a secret mission to northern Italy.The British ship was supposed to deliver a massive cargo of coins to the Duke of Savoy in return for fighting France.. The duke eventually changed sides, which historians speculate was because he failed to receive the British payment and instead gave in to French bribes.
In a statement, Odyssey denied that the latest report had anything to do with the Sussex... The company insisted that the find was made in international waters in conformity with the relevant laws, and said it would brief the Spanish government on its activities to counter the "wild allegations" made about the discovery.
Gibraltar's government also said the haul itself was not related to the Sussex.. However, Ministry of Defense personnel in Gibraltar said that an Odyssey ship berthed in Gibraltar's naval dock last week, and that a specially chartered American Airlines plane landed in the British colony last Wednesday before loading cargo and flying to Tampa, Fla., where Odyssey is headquartered.
British newspapers have speculated that Odyssey's mystery treasure ship, code-named the Black Swan, was the Merchant Royal which sank just off the southern tip of England in 1641. Odyssey declined to comment on that speculation.
The area where the wreck was found has always been packed with shipping routes and could have been used by Spanish galleons taking gold and silver to the Spanish Netherlands, or even by the Spanish Armada as it sailed to attack England in 1588. Odyssey said the wreck bears the "characteristics of one shipwreck in particular, but some of the evidence gathered to date is inconsistent with our research."
News of the discovery, which yielded gold and more than 17 tons of silver coins, shot Odyssey's shares more than 60 percent higher on Friday. They were up another 6 percent at one point on Monday.
Jim Shirley, an attorney specializing in maritime issues for the law firm Holland & Knight, said Odyssey's find was still subject to legal challenge.
"It's not unusual when there is a large discovery like this for there to be legal wrangling," Shirley told MSNBC.com. "No matter how far it goes back, there often is a claim about ownership."
However, the fact that coins were brought back to the United States means a challenge to the ownership of that property would have to be heard in a U.S. court, he said.
Odyssey’s side of the story
Here is the statement made by Odyssey Marine Exploration on Monday, cast in the form of a Q&A:
1. It has been widely reported that this shipwreck could be worth up to $500 million. What is the Company's position on this?
- "The Company has not estimated the total potential value of the shipwreck, other than to estimate on a preliminary basis a wide range of potential retail prices based on the coins that have been conserved to date.
"What we know is that we have recovered over 500,000 silver coins weighing over 17 tons, along with some gold coins and other artifacts. After conservation of the first 6,000 coins, we requested that a numismatist and one of the world's most experienced coin marketers, Nick Bruyer, inspect the coins and provide an opinion of the retail pricing that we could expect from the collection.
"Based on Mr. Bruyer's opinion, Odyssey reported that we expected the retail pricing of the silver coins to range from several hundred to four thousand dollars per coin. This wide range of prices would depend on the condition, origin and date of the individual coins. We understand that in a separate interview with a reporter, Mr. Bruyer provided his opinion that the mean retail price of the coins could be approximately $1,000 based on the small sample of coins that he inspected. This was reported as a potential $500 million retail value for the coins, which explains where that figure originated.
"Odyssey's position is that until all the coins are conserved, documented and graded, it is impossible to know what the entire collection would bring at retail. Based on the coins that have been conserved to date and that he has been able to inspect, we are comfortable with Mr. Bruyer's opinion that coins from the "Black Swan" will bring from several hundred to four thousand dollars per coin retail. These are estimates that could change significantly when the rest of the coins are conserved and do not include the cost of marketing and sales, so actual revenue to Odyssey would be much lower than retail sales prices. ...."
2. There have been reports that the "Black Swan" is a number of different shipwrecks, including HMS Sussex and the Merchant Royal. Are any of these reports correct?
- "We can confirm that the 'Black Swan' is not HMS Sussex, and that the 'Black Swan' was not found in waters anywhere near the shipwreck believed to be HMS Sussex. Beyond that, we cannot confirm the identity of the shipwreck because we are not certain ourselves. The site is in an area in which a number of Colonial-era shipwrecks were believed to be lost. The 'Black Swan' bears characteristics of one shipwreck in particular, but some of the evidence gathered to date is inconsistent with our research, so we want to be sure of the identity before we announce it."
3. It has been reported that the Spanish government is engaging in a "probe" of Odyssey because it is "suspicious" that we have not publicized more information about the shipwreck. Is this true?
- "We have no knowledge of any such inquiry, and would expect that we would have been the first ones contacted if there was one. In our experience with the Spanish government, with whom we have had a very cordial relationship for many years, we would have been informed directly or through the U.S. or U.K. embassy of any outstanding issues relating to Odyssey's operations.
"During the past few days, we have also seen many fanciful media reports from Spain with absolutely no substance in reality. Unfortunately, some of these wild allegations would logically cause concern to the Spanish government. We anticipate presenting the Spanish government with an official account of our activities in order to assure them that many of these media reports relative to the 'Black Swan' are pure fiction.
"We have stated clearly that the recovery was conducted in conformity with Salvage Law and the Law of the Sea Convention, beyond the territorial waters or legal jurisdiction of any country. We do not believe that the recovery is subject to sovereign immunity by any nation pursuant to the Law of the Sea Convention.
"The coins were brought into the United States with a valid export license granted by the country from which they were exported, and imported legally pursuant to U.S. law.
"There was no point at which any aspect of the 'Black Swan' operation was within the jurisdiction of Spanish authorities, and we will be pleased to provide proof of that fact to the Spanish government if requested officially."
4. What about the claim that the Spanish Government has now asked the "Guardia Civil" marine patrol to monitor Odyssey's activities?
- "The Spanish Guardia Civil has always monitored Odyssey's ships in Spanish territorial waters. When operating in or near Spanish territorial waters, we report our operational plans and movements to the Guardia Civil marine patrol before we send our ships to sea. They are able to monitor all our activities visibly with their patrol boats and through radar, so it is illogical to suggest that we have conducted any illicit operations in Spanish territorial waters."
5. What happens, if you finally determine the identity of the "Black Swan" and establish that the U.K., Spain,any other country or even individuals may have rights to the shipwreck?
- "If we are able to confirm that some other entity has a legitimate legal claim to this shipwreck when — and if — the identity is confirmed, we intend to provide legal notice to any and all potential claimants. Even if another entity is able to prove that it has an ownership interest in the shipwreck and/or cargo and that they had not legally abandoned the shipwreck, Odyssey would apply for a salvage award from the Admiralty Court. In cases such as this, salvors are typically awarded up to 90 percent of the recovery.
"We do believe that most shipwrecks that we recover, including the 'Black Swan,' will likely result in claims by other parties. Many will be spurious claims, but we anticipate that there might be some legitimate ones as well. In the case of the 'Black Swan,' it is the opinion of our legal counsel that even if a claim is deemed to be legitimate by the courts, Odyssey should still receive title to a significant majority of the recovered goods."
6. Why is Odyssey being so "secretive" about the "Black Swan"?
- "Based on past experience with other shipwrecks, we have found that putting out information about the identity of shipwrecks into the public before we are certain of the identity results in wild speculation about values, ownership rights and scores of other issues. We also believe that it would be an added risk factor to disclose the location of the site because we have publicly stated that we have left a large number of artifacts on the site, and the security risk is obvious."
7. Why haven't you determined the identity of the shipwreck yet? When will you announce the identity?
- "Determining the identity of a shipwreck is complicated. For example, it would be possible to find a French-built ship, with English cannons, Dutch pottery, Chinese porcelain, Turkish pipes, and Venetian trading beads that had been captured by pirates before it sank. Proving the shipwreck's identity in that case might prove very difficult, if not impossible depending on the research available.
"In the best interest of all concerned, we will follow our often-stated policy of announcing what we know about the identity of a shipwreck, only after it's confirmed by research."
8. There have been reports of a partnership between Odyssey Marine Exploration and the Disney organization. Are these true?
- "We can confirm that Odyssey and the Disney organization have recently entered into a relationship on a number of projects, and that the two companies are in discussions relative to some new partnership opportunities.
"We have immense respect for Disney and believe that a combination of Odyssey's authentic deep-ocean adventures coupled with Disney's storytelling, filmmaking, television and marketing capabilities will reap benefits for both companies, while providing the public with an unprecedented opportunity to enjoy the thrill of deep-ocean exploration."
------------
This report includes information from Reuters, MSNBC.com and Odyssey Marine Exploration. The original version of this story made an unclear reference to jurisdictional issues surrounding an earlier salvage case, the $400 million Atocha treasure find.
Source: © 2007 MSNBC Interactive
Link: http://www.msnbc.msn.com/id/18785078/
Pues parece que la información que proporcionan los de Odyssey se contradice con la de la Guardia Civil. Ellos señalan que el buque estuvo siempre vigilado por la Guardia Civil. Ésta que le perdió la pista desde 2003. Odyssey y la Embajada Británica afirman que el pecio está en aguas internacionales, mientras La Gaceta de los Negocios, tras haber revisado la memoria de unos radares, afirma de un modo contundente que la extracción se produjo en aguas españolas, incluso proporcionan unas coordenadas en las que permaneció el buque que se hizo con el tesoro durante casi veinte días.
A ver qué sale de este culebrón, pero el olor que viene de Odyssey, de Gibraltar o de la Embajada Británica no me parece de los mejores.
REGIMEN DEL DERECHO MARITIMO SOBRE LOS PECIOS CON VALOR ARQUEOLOGICO E HISTORICO
José Luis Cendón Castro
http://www.derechomaritimo.info/pecios.htm
Es indudable que estos nuevos piratas han reencontrado un tesoro que o es propiedad de España o es el fruto de un robo a España.
No comprendo que la Guardia Civil estuviera controlando por satelite a esta gente, y en cambio cuando izaban a bordo la mercancia nadie haya ido a comprobar que sacaban.
Pero en todo este tema, lo que mas me sorprende es, con la cantidad de historiadores que hay hurgado en la Casa de Contratación, que no exista ningún historiador informando a la opinión publica de que barcos puede tratarse.
A ver si el Sr Hugh Tomas, gran amigo de Aznar & Co. en lugar de recorrer los museos españoles para su libro El Imperio Español ( Rivers of Gold) estaba documentadose para los del Odyssey, porque la verdad su libro es una autentica mierda.
Despues de leer esta noticia me surge una gran duda, ¿en que quedó el Proyecto Poseidon?, ¿en una bonita iniciativa?, ¿en simple propaganda?, ¿en una bonita idea con videos y recreaciones de un mundo ideal pero imposible para nuestro patrimonio? uno de sus fines principales ¿no era el de evitar los expolios en nuestro patrimonio?, o eso es lo que ellos mismos dicen
http://www.proyectoposeidon.com/web/folletoenhtml.htm
PERDÓN POR EL "HUNTAR"
prespas, se me había pasado desapercibido, así que no lo decía por eso y espero que no te haya molestado.
Esta tarde me enteré que éramos pocos, y han parido las dos abuelas.
Tenemos un caso similar en la ría de Vigo. La Voz de Galicia informa hoy que la fiscalía de Patrimonio de Vigo ha iniciado una investigación para averiguar si otra compañía cazatesoros, en este caso británica, pretende hacer lo mismo que Odyssey en la ría de Vigo.
Oficialmente, el John Lethbridge, propiedad de Subsea Resources, posee licencia de la Administración para emprender el proyecto Celia, que consiste en recuperar un cargamento de 445 toneladas de cobre y 115 de zinc de un carguero que naufragó en 1979 entre la península de O Morrazo y las Cíes.
Sin embargo, el informe que la Guardia Civil ha entregado al fiscal revela que este buque, supuestamente, ha variado numerosas veces su ruta autorizada para internarse en aguas al sur de las Cíes. ¿Con qué fin? La Fiscalía sospecha que ha hallado el tesoro del Santo Cristo de Maracaibo. Hay varios indicios que apuntan a ello. En primer lugar, el dosier policial que tiene en sus manos el ministerio público relata el seguimiento que los agentes han realizado al John Lethbridge en los últimos meses. El buque cazatesoros ha sido detectado parado en unas coordenadas situadas entre las islas Cíes y el cabo Silleiro, en una franja que mide varias millas náuticas y alejado otras tantas de su lugar autorizado de prospección.
Os dejo un enlace con la noticia completa:
El fiscal investiga el posible expolio de un galeón hundido en las Cíes
El asunto sigue proporcionando noticias. Por lo que respecta a la ría de Vigo, al parecer se llegó a tiempo. Os dejo una noticia de La Voz de Galicia, incluida ya por patinho en el X-présate en donde también se informa de que hay sospechas acerca de otro expolio, esta vez realizado por la Armada x-DDD en la zona de Fisterra.
El barco cazatesoros que opera en las Cíes será vigilado por satélite
E asunto toma visos de tomadura de pelo, con la complicidad del Gobierno de Gibraltar (alianza de piratas y corsarios):
Revista Terrae Antiqvae. Editor José Luis Santos Fernández
http://www.terraeantiqvae.com
Partidos políticos, particulares y ecologistas han batallado durante años en Cádiz para impedir las acciones de Odyssey Marine ante la indiferencia de la Administración.
Han tardado casi diez años, pero los cazatesoros se han salido con la suya. Llegaron a la zona del Estrecho en 1998, rastrillaron y analizaron sus fondos con absoluta impunidad con sus sónares de barrido lateral y el pasado mes de marzo llevaron a cabo el expolio. La compañía Odyssey Explorer Marine, según todos los indicios, extrajo de un barco sin nombre hundido a 10 kilómetros de la costa española un botín en monedas de oro y plata valorado en 317 millones de euros. Y todo, ante la indiferencia y el silencio de la Administración española.
Carmen Calvo anunció el domingo mano dura contra los expoliadores. Patrulleras de la Guardia Civil fueron enviadas a la zona. Aunque el buque 'Odyssey Explorer' ya había acudido al resguardo de Gibraltar, aún se movía en aguas libres su buque de apoyo, el 'Ocean Alert'. Ayer, esta embarcación burló la vigilancia y corrió también a refugiarse a Gibraltar. Los dos buques se encuentran ahora amarrados en la misma dársena donde la Armada británica escolta a sus submarinos nucleares (como el 'Tyreless').
«Acabo de verlos. Están defendidos por una línea de boyas, con alarmas para que nadie pueda acercarse a ellos», explica desde Algeciras Antonio Muñoz, un activo militante de Ecologistas en Acción. «Llevamos años echando a esta gente fuera de nuestras aguas, pero esta vez lo han conseguido. Esto ya no tiene arreglo. Es como lo del 'Prestige', cuando empezaron a llevarlo de un sitio a otro», se lamenta Muñoz.
Oídos sordos
La suya ha sido una de las pocas voces que se ha levantado contra la apisonadora de los cazatesoros americanos. Han sido pocas, la verdad. Manuel Melero, diputado del Partido Andalucista, presentó en el juzgado durante estos años tres denuncias contra el capitán del navío y contra sus armadores. Ecologistas en Acción acudió también a los juzgados con el ánimo de paralizar los trabajos de los expoliadores. Sin éxito. El pasado año, la propia Guardia Civil asaltó el barco a la busca de pruebas para incriminar a los cazatesoros e identificó a su tripulación. Entre tanto, la Administración hacía oídos sordos a las denuncias públicas.
Carmen Calvo, que ahora anuncia severidad con los infractores, conocía de primera mano el caso. Antes de llegar al Ministerio de Cultura ocupó esa misma consejería en Andalucía. Desde su cargo, reclamó plenas competencias en arqueología submarina y se enfrentó por ello al Gobierno Aznar. «Han sido siete años de desidia», se lamenta el abogado y escritor bilbaíno Pipe Sarmiento. Año tras año, este navegante ha acudido a bordo de su velero a documentar las actividades de los cazatesoros en aguas españolas. «Es inexplicable que las autoridades no hayan intervenido», dice.
Cargado en Gibraltar
Por si quedaban dudas sobre el origen de la carga, la compañía aseguró ayer que obtuvo una «licencia válida de exportación» del «país» desde el cual partió el botín con rumbo a EE UU, sin añadir más detalles. Sin embargo, fuentes de la Embajada británica citadas por Europa Press precisaron ayer que Odyssey Marine habría cometido «un error» al referirse a un país, ya que los trámites para el traslado del tesoro los realizaron ante las autoridades de un «territorio de ultramar». Es decir, el Peñón de Gibraltar. Por tanto, el Reino Unido está al corriente de que, contra lo que anunciaron en su día los expoliadores, el botín en monedas de oro no fue obtenido de un yacimiento situado en el Atlántico (en concreto, se refirieron a las costas de Cornualles) sino de un navío hundido frente a las costas españolas.
Según las posiciones captadas por el servicio de satélite AISlive, el buque expoliador habría operado a tan sólo 6 millas de la Línea de la Concepción y a 14 de Estepona. El mar territorial de España alcanza las 12 millas y la zona contigua, sobre la que los estados tienen plenos derechos jurisdiccionales, 12 más.
En realidad, sólo Odyssey Marine posee en el ámbito civil tecnología capaz de rescatar un pecio sumergido a unos 500 metros de profundidad. Emplea un robot submarino de 16 toneladas de peso, bautizado como 'Hércules' y operado por control remoto, capaz de capturar, con unas ventosas, las monedas sumergidas, una por una. Se trata de un robot desarrollado por la Armada de EE UU y que fue empleado por primera vez en tareas no militares por Robert Ballard (antiguo militar), descubridor y explorador del 'Titanic'.
Sin nombre ni bandera
La Embajada Británica en Madrid cree que el hallazgo arqueológico realizado por la empresa estadounidense Odyssey , bajo el nombre de Cisne Negro, «no tiene ninguna relación con el buque HMS Sussex», un barco inglés hundido en 1694 frente a las costas de Gibraltar, aunque admite que la empresa norteamericana no ha sido capaz de confirmar todavía ni el nombre del buque hundido en el que halló el supuesto tesoro ni la bandera de ese navío.
En un comunicado difundido ayer, la Embajada sale al paso de las dudas que ha suscitado entre las autoridades españolas y británicas el anuncio del importante tesoro arqueológico submarino localizado por Odyssey , en un punto no revelado del Atlántico, compuesto por 17 toneladas de monedas de plata y oro, valoradas en 370 millones de euros.
La Embajada recuerda que la empresa Odyssey Marine Exploration, con sede en Tampa (Florida), ya ha confirmado que su actividad con este rescate se ha producido «fuera de aguas territoriales de la jurisdicción legal de cualquier país». La citada firma dejó ayer claro en un comunicado que la extracción del pecio se hizo conforme a las leyes establecidas sobre recuperación de yacimientos arqueológicos submarinos, y subrayó asimismo que el traslado a Estados Unidos del medio millón de monedas de oro y plata se efectuó de forma legal.
La Embajada señala también que Odyssey ha confirmado a las autoridades británicas que «está trabajando con la mayor celeridad posible para averiguar la identidad del barco hundido».
«Nos tocaría una parte», dice ahora la ministra
La política es el arte de adaptarse a las circunstancias. Carmen Calvo, ministra de Cultura, dio ayer buena prueba de ese principio al asegurar que los responsables de Odyssey Marine «no han dicho que el barco no era español. Y eso hay que averiguarlo porque, si fuera de bandera española, aunque esté en aguas internacionales, nos tocaría una parte de lo que se encuentre». Calvo explicó que el pecio rescatado «no es el HMS Sussex» y «no se halló en aguas próximas a donde se cree que está el HMS Sussex». Ahora, dijo, le toca al Gobierno «corroborar que es verdad, con la Guardia Civil».
Por lo que apunta Calvo, y de demostrarse que el pecio era de bandera española, el Gobierno podría litigar con los saqueadores para obtener una compensación. Podría tratarse de una parte de las 500.000 monedas recuperadas (hay indicios de que se trata de doblones de a ocho con la efigie del monarca español Carlos III -1716 a 1788-) y de vestigios de interés arqueológico.
Precisamente el Reino de España obtuvo del Tribunal Supremo estadounidense el reconocimiento de que los barcos de bandera hundidos constituyen territorio nacional y siguen perteneciendo al país que los construyó. Fue por las fragatas 'La Galga de Andalucía' y 'Juno', hundidas en 1750 y 1802 en aguas de Virginia. Localizadas por el cazatesoros Ben Benson, el rescatador quiso aplicar el viejo principio marino 'finders keepers' («quien lo encuentra se lo queda»). España, por medio del embajador en Washington Javier Ruperez, reclamó ante los tribunales, que le dieron la razón en una sentencia histórica. El abogado de aquel proceso millonario fue James Gold. ¿Saben que puesto ocupa hoy? Es el presidente de Odyssey Marine Exploration Inc. El mundo es muy pequeño.
Fuente: JULIÁN MÉNDEZ, Bilbao / El Correo Digital.com. j.mendez@diario-elcorreo.com 23 de mayo de 2007
Otra (también divulgada por Revista Terrae Antiqvae. Editor José Luis Santos Fernández
http://www.terraeantiqvae.com )
:
El Peñón aprobó la salida del botín sin alertar a las autoridades españolas.
Santiago Mata. Madrid.
Con la callada por respuesta, el Gobierno gibraltareño asumió ayer la responsabilidad por la exportación a Estados Unidos del tesoro extraído, con toda probabilidad de aguas españolas, por la empresa Odyssey Marine Exploration (OME), aparentemente compuesto por medio millón de monedas de plata y algunos miles de monedas de oro, que despegaron del aeropuerto de Gibraltar el jueves 16 de mayo en un avión de pasajeros: el Boeing 757 de North American matrícula N756NA.
Hasta ayer, Odyssey había afirmado en su página web (shipwreck.net) que por razones de seguridad no mencionaría el lugar desde donde el tesoro se había introducido en EEUU. Después de que ayer publicáramos una fotografía del N756NA antes de despegar de Gibraltar, Odyssey optó por afirmar en su web que "las monedas se introdujeron en EEUU con una licencia de exportación válida garantizada por el país desde donde fueron exportadas, e importadas legalmente conforme a las leyes de EEUU".
La Embajada británica en Madrid precisó que Gibraltar no es un país, sino un Territorio de Ultramar del Reino Unido, pero aseguró que dentro de las competencias de la colonia está la de exportar por vía aérea tal cantidad de metales preciosos. Mediante un comunicado emitido ayer por la mañana, dio por válidas las explicaciones de Odyssey acerca de que el pecio hallado no es el Sussex (para cuya localización, pero no extracción, tenía permiso Odyssey), que la extracción se realizó en aguas internacionales y que "la empresa OME ha confirmado a las autoridades británicas que está trabajando con la mayor celeridad posible para averiguar la identidad del barco hundido".
Lenta reacción
Las autoridades gibraltareñas, por su parte, no emitieron ningún comunicado oficial sobre las afirmaciones de Odyssey. Contactado por LA GACETA, John Rodríguez, jefe de aduanas del aeropuerto de Gibraltar, mostró cierta preplejidad al saber que OME se refería a un certificado de exportación que él debió autorizar, pero finalmente tampoco hizo declaraciones.
Dado que antes de la partida del avión, según publicaba el Gibraltar Chronicle, los responsables de Odyssey anunciaron que abrirían en Gibraltar un Museo Arqueológico, el director del Museo de Gibraltar, Dr. Clive Finlayson, consideró oportuno advertir que "no tiene nada que ver con este asunto".
Piden explicaciones
Por su parte, la ministra de Cultura, Carmen Calvo, volvió a pedir a la compañía que aclare que el pecio del que se recuperaron las monedas no pertenecía a pabellón español. "No han dicho que el barco no era español, y eso hay que averiguarlo porque, si fuera de bandera española, aunque esté en aguas internacionales, nos tocaría una parte de lo que se encuentre", afirmó la ministra de visita en Sevilla.
Desde el Ministerio creen que la compañía está difundiendo informaciones “muy contradictorias”, y piden que deje de lanzar “cortinas de humo” a través de su página web, que utilizan para difundir sus comunicados, y afirmen abiertamente que el pecio no es el de un navío con bandera española.
Desde su web, Odyssey se comprometió a aportar pruebas al Gobierno español de que no estaba actuando dentro de su jurisdicción “si se lo solicitaban oficialmente”.
El abogado malagueño Antonio Checa, descubridor del pecio del submarino republicano C3, hundido en la guerra civil, y experto en descubrimientos marinos, afirmó que es "imposible" que el barco localizado por OME se encontrara en aguas internacionales. Según declaró el abogado a Servimedia, en el caso de que la extracción se realizara en aguas territoriales de España, el Ministerio de Cultura "tiene plena competencia para paralizar ese expolio", porque desde el punto de vista penal "es un delito".
Las negligencias de España en el caso
Las numerosas informaciones adelantadas por LA GACETA desde el pasado viernes, apuntan muy claramente a un expolio en aguas españolas. Sin embargo, la otra parte de la historia es quién, o quiénes han permitido que ésto suceda. En este enmarañado relato de cazatesoros aparece el Ministerio de Asuntos Exteriores, que fue quien aprobó la búsqueda del barco inglés Sussex; la pasividad de la Junta de Andalucía, que ha retrasado más de un mes, y sin explicaciones convincentes, la designación de los arqueólogos para supervisar los trabajos de Odyssey; y ahora la desidia del Ministerio de Cultura, que ni siquiera ha contactado a la compañía con sede en Tampa (EE UU) para preguntarles de dónde han sacado su botín.
Compras sospechosas de acciones en marzo
Francisco Perarnau. La historia del descubrimiento del gran tesoro en aguas territoriales españolas también tiene su parte oscura en bolsa. Además de los aumentos irregulares de los precios y volúmenes de la acción en las sesiones previas al anuncio oficial del hallazgo, los principales accionistas de la compañía realizaron fuertes compras de títulos en el pasado marzo. En ese mes, el Gobierno español, británico y la Junta de Andalucía alcanzaron un acuerdo por el que se permitía a Odyssey Marine Exploration continuar con las exploraciones en busca del Sussex. Pero algunos expertos sospechan que en esa fecha Odyssey ya tenía perfectamente localizado su gran tesoro. De una u otra forma, los grandes accionistas sí apostaron fuertemente por el descubrimiento. De hecho, el principal de todos ellos, el fondo GLG Partners, dobló su participación del 10% a casi el 20%. Otras compras muy significativas fueron las realizadas por Merrill Lynch, que cuadriplicó su presencia al pasar de 98.460 acciones a 414.859. Vanguard elevó la suya en 180.213 acciones, hasta las 674.127 (ver cuadro adjunto). La acción empezó marzo a 2,77 euros y terminó a 3,64. Ayer a media sesión, la acción cotizaba a 7,11 dólares, con una caída del 12%.
Pipe Sarmiento, escritor y abogado náutico: “Lo de Odyssey no es un hallazgo fortuito, sino un atraco”
Santiago Mata. Madrid. Pipe Sarmiento, nacido en Bilbao en 1952, es licenciado en Derecho y Economía, patrón de yate desde 1981, buceador tres estrellas desde 1980, abogado especialista en temas náuticos... Sin dejar de ejercer el periodismo, ha escrito siete libros sobre este campo. El último de ellos, Tesoros Sumergidos. Cuando explotó el "asunto Odyssey", estaba en Valencia dando unas conferencias en la Copa del América.
¿Por qué siguió al Odyssey?
Por pura casualidad, viviendo tantos años en Sotogrande, donde tenía su base el primer barco de Odyssey, el Minibex.
¿Qué encontró de raro?
Por primera vez me sorprendió en 2000, que me mintieran diciendo que estaban tendiendo un cable submarino, cuando había visto que era un barco de prospección, con un robot en la popa.
¿En qué se distingue un pirata de un arqueólogo?
En que el arqueólogo recupera algo para preservar el patrimonio de una nación, y el pirata busca el lucro.
¿Le causó problemas investigar a Odyssey?
No hasta 2006, que es cuando mis investigaciones fueron más allá y más rápido que las de las fuerzas de seguridad españolas, que nunca han querido que los periodistas se adelantaran a sus escasas investigaciones.
¿Ha tenido miedo?
No. Tuve cierta angustia al estar en alta mar al lado del Odyssey en mi velero con mi mujer, y ver las amenazas e intimidaciones que nos hacían desde un barco de 75 metros de eslora, con unos tipos que parecían marines. Se cuenta que a veces en estos barcos embarcan miembros de la CIA para detectar submarinos soviéticos...
¿Pero éstos sólo buscaban tesoros?
Creo que sí. Desde 1998 buscaban el Sussex. Pero en vez de encontrarlo, toparon con alguno de los 100 ó 200 barcos "de época colonial" hundidos en el Mar de Alborán.
¿Greg Stemm es un aficionado?
En cierto sentido, pero al darse cuenta de la complejidad del asunto, buscó un buen asesor jurídico: cuando en 2006 les echaron, contrataron a James Gold, que había sido abogado de España en el caso del Juno y la Galga, dos fragatas españolas hundidas en Virginia.
¿Cuál fue el papel de Gold?
Ha sabido presionar muy bien al Ministerio de Exteriores. Parecía que ceder el Sussex podría ser una forma de pagar los servicios de Gold.
¿No es todo entonces pura negligencia española?
Los expertos conjeturan que esto podría ser la forma de devolver un favor. Pero Gold ha seguido presionando, lo que en mi opinión demuestra que no había un pacto y que Odyssey actúa por su cuenta.
¿Por qué decidieron dar este arriesgado golpe?
Mi teoría es que como eran incapaces de cumplir los requisitos de la Junta de demostrar que era el Sussex, en la duda se llevaron un tesoro aprovechando la desidia. Ahora nos devuelven la carga de la prueba: es España la que tiene que demostrar que el tesoro es suyo.
¿Basta el satélite para probar que lo sacaron de aquí?
Sí, si se manda una orden de un juez europeo, Aislive, el satélite de Lloyds, podrá certificar todas las posiciones, completando las pruebas que ya ha publicado LA GACETA.
¿Las monedas no prueban nada?
Difícilmente.
¿Quién se las quedará?
Creo que España tiene mucho que decir, tengo mucha confianza en la justicia norteamericana, que es muy imparcial, como se vio cuando reconocieron el derecho de España al Juno y la Galga, a pesar de que el hallador era un norteamericano. Esto no es un hallazgo fortuito, sino un atraco, y no se aplican las leyes del mar, sino el código penal.
Los arqueólogos ingleses, también en pie de guerra
Jorge Valero. "Los arqueólogos europeos estamos preocupados porque esta manera de proceder sienta las bases para que, en el futuro, no se respeten los protocolos que protegen los resto arqueológicos", explica Javier Noriega, del grupo Nerea Estudios de Arqueología.
Ya desde Gran Bretaña se dio la voz de alarma en 2002, cuando el presidente del Consejo Británico de Arqueología, George Lambrick, denunció la alianza que su Gobierno había establecido con Odyssey Marine Exploration, con el fin de repartirse un eventual botín, a cambio de que la empresa corriera con el riesgo de la operación.
En aquella ocasión, con motivo de este acuerdo para el reparto de la carga del navío inglés Sussex, Lambrick denunció que su Gobierno "debería de encontrar una manera mejor de proteger el patrimonio que tomando parte en cacerías de tesoro". Y ya entonces dudaba de que los restos que había encontrado la compañía fueran los del Sussex.
Para Noriega, en el caso del Odyssey se están pisoteando todos los acuerdos que protegen el patrimonio arqueológico. "No es cierto que exista un vacío legal en lo referente a la protección de los tesoros que descansan en el mar", explica el arqueólogo, quien añade que son informaciones interesadas que difunden los cazatesoros para legitimar sus actividades.
Fuente: La Gaceta de los Negocios.com, 23 de mayo de 2007
(2) La Guardia Civil quiere registrar los barcos de Odyssey en el Estrecho. Londres se desmarca del hallazgo y Cultura desafía a la empresa a mostrar el tesoro para ver si contiene oro español
La Guardia Civil controla en estos momentos los movimientos de dos barcos de la Odyssey Marine Exploration, por la sospecha de que esta empresa de cazatesoros haya cometido un expolio de nuestro patrimonio sumergido. Uno de los barcos, el Odyssey Explorer, se encuentra en el puerto de Gibraltar, mientras que el otro, Ocean Alert, estaba fondeado en aguas marroquíes. La cicatería con la que la empresa norteamericana facilita la información solicitada por España no hace más que aumentar las sospechas y dudas sobre sus prácticas.
La Brigada de Patrimonio y el Servicio Marítimo de la Guardia Civil sabe que se las está viendo con una maraña de intereses en los que participa un buen número de actores, desde la empresa en cuestión, que cotiza en bolsa, los Gobiernos británico y español, además del estadounidense y las leyes internacionales.
Se sabe que Gran Bretaña presionó para que el Ministerio de Exteriores dejase llevar a cabo trabajos de localización del HMS Sussex, barco de pabellón inglés, en aguas del Estrecho. Pero Odyssey debería haber tramitado ese permiso con la Junta de Andalucía para darle validez, algo que no ha hecho.
Delito de expolio
Por ello, la Guardia Civil afirma que los permisos con los que Odyssey ha blandido para sus actividades son falsos y si, amparándose en ellos, hubiese extraído el tesoro de las aguas territoriales españolas, o incluso de las aguas en litigio, ello podría constituir un delito de expolio. Ayer, la Embajada británica en Madrid hizo público un comunicado en el que subraya que este hallazgo “no tiene ninguna relación con el HMS Sussex”.
Subraya que el pecio estaba en aguas internacionales, extremo al que otros expertos no dan crédito, porque eso significaría profundidades que requieren un equipo mucho más sofisticado
Nada es lo que parece en este mundo de los cazatesoros, que para algunos tiene mucho de piratería. De hecho, el capitán de uno de los barcos de Odyssey en el Estrecho tuvo abiertas diligencias por desobediencia hace tiempo en la Benemérita. Miembros del instituto armado no descartan que, dada la autonomía de los robots submarinos, Odyssey podría estar haciendo trampas submarinas, actuando en nuestras aguas territoriales, aunque manejando sus equipos desde un buque o una base en aguas marroquíes o gibraltareñas.
No existe justificación en inciertos “motivos de seguridad” para que Odyssey no muestre el contenido de su tesoro a los expertos, que fácilmente sabrían con un simple análisis si hay oro español o no en los contenedores enviados a Estados Unidos “de forma legal”, según los cazatesoros. Ayer la ministra de Cultura, Carmen Calvo, desafió a la empresa a mostrar las monedas recuperadas o compartir la información de localización del pecio, algo que le ha sido solicitado desde la Embajada española en Washington el viernes pasado.
El secretismo es tal en Odyssey que ni siquiera se descarta que la operación no sea de la envergadura que la empresa ha asegurado y se trate de una operación de imagen para hacer subir las acciones de la compañía en bolsa.
La Guardia Civil instruye ya como denuncia el requerimiento del Ministerio de Cultura, que le fue presentado anteayer, puesto que necesita la intervención de un juez para poder registrar los navíos de la Odyssey. Mientras tanto, ofrece información exhaustiva sobre los lugares en los que los buques han trabajado, mantiene contacto visual con las embarcaciones que se movieron en aguas españolas reivindicadas por Gibraltar. Cuando alguna patrulla de la Benemérita se ha aproximado a estos buques estos se refugian en aguas marroquíes.
Fuente: J. CALERO / P. MUÑOZ, Madrid. Las Provincias.es. 23 de mayo de 2007
También divulgada por Revista Terrae Antiqvae. Editor José Luis Santos Fernández
http://www.terraeantiqvae.com
Odyssey aspira al 90 por ciento del tesoro
La compañía norteamericana prevé litigios con España y Gran Bretaña, aunque insiste en que le favorece la jurisprudencia internacional La empresa negocia paralelamente un contrato para aliarse con Disney
La compañía Odyssey Marine Exploration -con sede en Tampa, Florida, y que el viernes pasado anunció un misterioso pero multimillonario tesoro de monedas hundidas en algún lugar del Atlántico -aunque ya existen más que sospechas de que se trata del Estrecho de Gibraltar- anticipa que su descubrimiento puede generar reclamos judiciales por parte de Gran Bretaña o España sobre el fabuloso pecio del que ya se han extraído medio millón de monedas de plata, centenares de oro así como otros artefactos. Pero, según sus limitadas explicaciones a través de su página en Internet, la empresa norteamericana insiste en que la jurisprudencia internacional suele otorgar la parte del león a los descubridores de este tipo de pecios «fuera de las aguas territoriales o la jurisdicción legal de cualquier país».
De acuerdo con la empresa norteamericana: «Si somos capaces de confirmar que otra entidad tiene un legítimo reclamo legal sobre este pecio cuando -y si es posible- se verifique su identidad, tenemos la intención de facilitar un aviso a todas las potenciales partes reclamantes. Si otra entidad es capaz de demostrar que tiene un interés de propiedad en el pecio y/o su carga, que no ha sido abandonado legalmente, Odyssey solicitará una compensación por recuperación. En casos similares, los recuperadores de estos pecios han recibido hasta el 90 por ciento de lo extraído».
A por más
Asimismo, los responsables de Odyssey insisten también en que no pueden divulgar la identidad del barco con esta carga multimillonaria, porque ellos mismos todavía la desconocen. Según sus explicaciones, el pecio «presenta coincidencias con un barco en particular, pero alguna de las evidencias reunidas hasta la fecha son inconsistentes con nuestra investigación». Con todo, la propia compañía ha reconocido que planea una nueva gran expedición para volver a explotar los restos del pecio identificado con la etiqueta de trabajo 'Cisne Negro'. Y que podría aprovechar su retorno al lugar del yacimiento submarino para anunciar la identidad del elusivo pecio del que han obtenido el millonario tesoro de monedas.
Sobre el seguimiento que la Guardia Civil viene realizando de los dos barcos de Odyssey en la zona del Estrecho de Gibraltar, la empresa norteamericana ha negado cicatería o maniobras de esquinazo. Incluso han llegado a afirmar que «cuando operamos en, o cerca de, aguas territoriales españolas, informamos de nuestros planes y movimientos a la patrulla marina de la Guardia Civil antes de enviar nuestros barcos. Ellos son capaces de monitorizar todas nuestras actividades visiblemente con sus patrulleras o a través de radar, por eso es ilógico sugerir que hemos realizado operaciones ilegales», recalca la empresa.
Aprovechando su fama inesperada, Odyssey, una empresa que cotiza en Wall Street pero que durante los últimos años ha venido acumulado cuantiosas pérdidas, ha empezado a negociar un acuerdo de alianza con la multinacional Disney.
Fuente: PEDRO RODRÍGUEZ/WASHINGTON. Sur Digital, 24 de mayo de 2007
Continúa (también divulgada por Revista Terrae Antiqvae. Editor José Luis Santos Fernández
http://www.terraeantiqvae.com)
Disney y Odyssey explotan el botín del Estrecho
Las dos compañías habrían acordado la coincidencia del hallazgo con el estreno mundial de «Piratas del Caribe». La empresa cazatesoros es uno de los 13 socios promocionales de la tercera entrega de la película, junto con Volvo, Coca-Cola y Visa.
La realidad supera a veces a la ficción, pero cuando hay beneficios comerciales de por medio, la realidad y la ficción pueden ser una y la misma cosa. Así ha ocurrido con la tercera entrega de la película «Piratas del Caribe», que se estrena hoy a en todo el mundo, y con el fabuloso tesoro de 17 toneladas de oro y plata, sospechosamente extraído por la empresa «cazatesoros» en el Estrecho de Gibraltar, sin que se descarte que fuera en aguas españolas. El hallazgo del más fabuloso tesoro sumergido de la historia tenía todos los ingredientes de un guión de Hollywood. Ahora se confirma que se trataba, en realidad, de un guión de Hollywood. Así, se ha conocido que Disney y Odyssey podían haber acordado que coincidiera el anuncio sobre el extraordinario botín de oro y plata con el estreno de la tercera parte de «Piratas del Caribe».
Según «The Internacional Herald Tribune», la productora creadora del personaje del pirata Jack Sparrow llegó hace un año a un acuerdo con Greg Stemm, presidente de Odyssey, para colaborar en proyectos de producción y mercadotecnia de películas y documentales. Es más que significativo que el propio Stemm acudiera a la sede de Disney en Los Ángeles a una reunión de negocios sólo tres días después de hacer el anuncio sobre el tesoro.
La portavoz de Disney, Cherise MacVicar, no ha parado en mientes a la hora de elogiar los frutos de la colaboración con Odyssey: «Nos ha proporcionado una autenticidad adicional para la promoción de nuestras películas», aseguró MacVicar a la agencia Associated Press. El «Hollywood Reporter», además, publicaba el martes que Odissey es una de los 13 socios promocionales de esta nueva entrega. Verde y con asas: el sorprendente anuncio realizado el viernes por Odyssey, sobre el tesoro hallado en aguas del Estrecho, habría sido una dosis de realidad adicional para promocionar un filme que ya había despertado todas las expectativas mundiales.
Hay fundadas evidencias de que Odyssey ha esperado una determinada fecha para dar a conocer su descubrimiento, como el hecho de que los cientos de miles de monedas halladas se encuentren completamente limpias de concreciones marinas, proceso que ha podido llevar varios meses. Esto significa que el tesoro no salió del mar hace una semana y que la noticia de su hallazgo podía ajustarse en el calendario a los compromisos adquiridos con Disney para la promoción de su película. Es evidente que la noticia de la aparición del tesoro ha provocado un efecto amplificador del estreno de las nuevas aventuras del capitán Jack Sparrow. En estos días ha sido imposible hablar de la película sin traer a colación el misterioso hallazgo de las 17 toneladas de oro y plata sacadas por Stemm de un lugar y de un barco que se niega a identificar.
Lo único que se conoce es que, el jueves pasado, Stemm cargó su botín con destino a Florida en el aeropuerto de Gibraltar en un avión fletado por Odyssey y procedente del aeropuerto JKF de Nueva York. Stemm llevaba buscando en aguas españolas, desde 1999, un cargamento de monedas valorado en más de 200 millones de dólares, como el que ahora dice haber encontrado. Se sospecha que en estos ocho años, haya podido localizar y excavar los restos de cerca de quinientos barcos ante la miope vigilancia de la Junta de Andalucía, con Carmen Calvo como consejera de Cultura, y del Gobierno de Zapatero, con Calvo como ministra del ramo.
Fuente: María Pulido / La Razón.es, 24 de mayo de 2007
Otra más:
(3) El Gobierno pide a EEUU y Reino Unido que informen del avión en el que Odyssey trasladó el botín
La ministra de Cultura, Carmen Calvo, anunció hoy que el Gobierno español ha pedido 'esta misma tarde' a Estados Unidos e Inglaterra información sobre el vuelo Gibraltar-Tampa (Florida, Estados Unidos) en el que la empresa Odyssey trasladó el botín hallado en un buque hundido.
En un rueda de prensa en Bilbao, la ministra explicó que tras tener conocimiento de que Odyssey había hallado un tesoro valorado en 370 millones de euros, el Ministerio le reclamó información sobre la ubicación exacta del buque y su identidad, bandera y contenido.
Ante el silencio de la compañía americana, el Gobierno español ha pedido a las Embajadas del Reino Unido y de Estados Unidos en Madrid 'información exacta de los vuelos que han despegado desde Gibraltar y han llegado a Tampa, en Florida', ya que 'según la información que ha dado Odyssey, fue un Boeing 757, el que ha llevado todo el cargamento'.
En concreto, el Ministerio ha solicitado a los Gobiernos británico y estadounidense información sobre cuándo se realizó el vuelo 'exactamente' y sobre los permisos aduaneros, ya que en ellos se refleja 'qué es lo que se está trasladando' en el avión.
Odyssey informó la pasada semana del hallazgo de un importante tesoro arqueológico submarino en un punto no revelado del Atlántico, compuesto por unas diecisiete toneladas de monedas de plata y oro, valoradas en 370 millones de euros.
La información 'poco clara, escasa y sospechosa' que Odyssey proporcionó sobre el hallazgo llevó al Ministerio de Cultura a reclamar datos más precisos, ante la posibilidad de que se hubiera cometido un delito de expolio.
La ministra explicó que si esta empresa hubiera extraído 'de aguas españolas cualquier patrimonio subacuático de carácter arqueológico e histórico, sería ilegal porque no hay ni una sola autorización de las autoridades españolas'.
Calvo afirmó que el Gobierno seguirá 'dando pasos' para aclarar si se ha cometido un delito y aseveró que en caso de que el botín hallado sea bien de un barco de bandera española hundido en aguas internacionales o bien de un buque localizado en aguas españolas, el Ejecutivo trabajará para 'preservar los derechos que los españoles tienen sobre su patrimonio histórico'.
La empresa Odyssey, especializada en la exploración marina, inició a mediados de los años 90 la búsqueda del buque inglés HM Sussex, hundido frente a Gibraltar en 1694, y según precisó la ministra, sólo estaban autorizados a tratar de localizar el navío y no 'para bajar al subsuelo marino español'.
Calvo adelantó que en adelante el Gobierno español no autorizará a esta empresa a continuar con esta búsqueda aunque se confirme que no ha cometido expolio, debido su 'oscurantismo' en este caso.
Los dos barcos con los que Odyssey trabaja en aguas del Estrecho para tratar de localizar el HM Sussex se hallan ahora atracados en el puerto de Gibraltar, aunque la Guardia Civil tiene orden de inspeccionarlos en caso de que se adentren en aguas españolas.
Además, ante las sospechas de un posible delito de expolio el Instituto Armado 'está sacando ahora mismo la secuencia de los movimientos que han hecho los buques a lo largo de los últimos veinte días' para determinar la zona donde han trabajado.
Calvo aseguró que los buques de Odyssey 'han estado vigilados todo el tiempo y desde hace mucho tiempo', pero matizó que el tipo de tecnología que utilizan para la recuperación de tesoros acuáticos -un sistema de aspiración que no requiere elevar el pecio- hace 'muy difícil saber dónde han trabajado' y si han extraído algún botín porque 'a simple vista no se ve nada'.
Fuente: Terra Actualidad – EFE, 24 de mayo de 2007
Penúltima por el momento (también de Terra Antiquae)
(4) ODYSSEY. UN EXPERTO EN PECIOS CREE QUE LAS ADMINISTRACIONES "MIRAN A OTRO LADO" ANTE EL "EXPOLIO" SUBACUÁTICO EN ESPAÑA
SERVIMEDIA
MADRID, 23-MAY-2007
El presidente de la Asociación de Rescate de Galeones Españoles, Juan Manuel Gracia Menocal, denunció hoy que las Administraciones están "mirando para otro lado" ante el "expolio del patrimonio subacuático español que perpetran desde hace años" empresas "cazatesoros" como Odyssey.
Gracia dijo a Servimedia que ninguna persona preocupada por la protección del patrimonio arqueológico "puede comprender que el Ministerio de Asuntos Exteriores diera permiso para rastrear precios a una empresa como Odyssey, que busca pecios para lucrarse, y después no se hayan hecho controles a bordo día y noche de sus actividades".
Este experto dudó de que la polémica creada con el tesoro hallado por el Odyssey sirva de escarmiento. "Esto nos viene pasando desde la Expo de Sevilla", afirmó, "pero seguimos dejando entrar en nuestras aguas a cazatesoros que vienen expoliar el golfo de Cádiz, que es el mayor cementerio de pecios del mundo".
Última por hoy (todas de Terra antiquae
Acusan al Odyssey de ir "directamente a por el oro"
ESD/Servimedia
EN EL FONDO DEL MAR
Mientras Londres se desmarca del hallazgo, Cultura desafía a la empresa a mostrar el tesoro para ver si contiene oro español.
El director del Museo Arqueológico del Puerto de Santa María, Francisco Giles, no se realizó ninguna excavación marina y "su actuación ha ido en línea de los expolios".
23 de mayo de 2007.
El director del Museo Arqueológico del Puerto de Santa María, Francisco Giles, afirmó que Odyssey no realizó una excavación aqueológica marina, sino que se limitaron a "ir a por el oro".
Giles consideró que, "desde el punto de vista arqueológico y científico, la actuación de Odyssey es completamente negativa", por la metodología empleada en las extracciones.
Odyssey no utilizó los sistemas que suelen emplearse en arqueología submarina: "no llevaron equipos para estudiar la sedimentología o la fauna marina; sólo han ido a por el oro", añadió.
"No sé si se metieron o no en aguas territoriales pero, en cualquier caso, tenían que haber puesto en conocimiento de las autoridades más próximas sus movimientos", consideró Beltrán. "Su actuación ha ido en la línea de los expolios", concluyó.
estos ingleses llevan 300 años robandonos oro, plata, tierra, barcos y por supuesto ahora expoliando los tesoros submarinos, los españoles somos de los más masacrados junto con India, Egipto, Grecia, Persia y bueno por donde hayan puesto sus miras no dejan títere con cabeza.
Contundencia diplomática contra estos piratas del nuevo siglo, el Sr.Aznar igual nos podría echar una mano con sus amigos americanos.
Ya lo practicarón los romanos en las Médulas, arañarlo todo hasta que la tierra deje de brillar. No habría por qué extrañarse del comportamiento de los secuaces del Nuevo Imperio y de sus mercenarios, los corsarios ingleses. Demos gracias por no poseer millones de barriles de hidrocarburos debajo de nuestras ciudades y así acabar convertidos en refugiados en algún país limítrofe.
Más Numancias NO.
Dicen que el que roba a un ladrón tiene cien años de perdón. Porqué nadie pide la devolución a sus dueños. Parece que el debate és sobre quién expolia mejor, dándole un valor moral superior al hecho en sí de expoliar. Adelante pues. a pesar de que resulta inmoral justificar hoy lo actuado entonces, y sería de justicia, conocidos sus dueños, su devolución. O es que la tierra, el polvo, el oro y la plata, nos van a dar las gracias. O es que no se sacó suficiente oro y plata, aún hay avidez por el metal?.
Donde quedan las personas en todo éste discurso, donde quedan los pueblos.
Estos debates, provocan verguenza ajena, si se hacen desde la inmoralidad del derecho marítimo actual.
Yo tenía otro concepto de la protección del patrimonio arqueológico español e iberoamericano.
Por su interés y sus implicaciones traduzco de la noticia publicada en Terrae Antiqvae, que procede de una fuente tan autorizada en estos temas como National Geografic. Parece que están moscas porque ellos se gastan el dinero en excavar mientras que los piratas de Oyssey se llevan las monedas directamente. Parece confirmar la procedencia española.
“El futuro del tesoro del naufragio está en el aire, dice un experto”
Willie Drye para Nacional Geografic News
En lo que podría ser el tesoro submarino más rico jamás encontrado, exploradores sacaron la semana pasada cientos de miles de monedas de época colonial de un pecio en el Océano Atlántico.
Las monedas de plata y oro podrían alcanzar un valor de 500 millones de dólares, predicen algunos expertos.
Pero ahora Odyssey Marine Expeditions, la compañía con base en Florida que descubrió las monedas, podría afrontar una demanda sobre su dinero.
España podría presentar una reclamación legal sobre los derechos de rescate del navío y sobre los objetos encontrados en el barco- incluyendo las monedas.
El abogado de Washington D.C. James A. Goold dijo hoy que ha notificado a Odyssey que las leyes españolas que regulan el salvamento y la posesión del contenido de los barcos hundidos podrían ser aplicables a este pecio.
Goold, que trabaja para la firma Covington y Burling, dijo que también le ha pedido a Odyssey información acerca de la identidad del barco y su cargamento.
Pero la compañía planea mantener la localización oculta, y Natja Igney, portavoz de Odissey dijo que no podía responder a ninguna pregunta sobre el barco.
La compañía- que todavía no tiene certeza sobre la nacionalidad, el tamaño y la época, lo ha bautizado como el Cisne Negro.
George Bass, profesor retirado de arqueología submarina de la Universidad A & M de Tejas dijo a National Geographic News que entiende por qué Odissey mantiene en secreto la localización del Cisne Negro, pero le preocupa que no se hayan revelado otros detalles. “Puede que haya alguna razón para ello, pero no es la forma en que los científicos tratarían el asunto,” dijo Bass.
Un pecio como el del Cisne Negro debería haber sido manejado con mucho cuidado por arqueólogos submarinos profesionales, que podrían haber tardado años en excavar e interpretar completamente el hallazgo.
¿Una carga clandestina?
Odissey, cuyo centro de operaciones está en Tampa, anunció a principios de este mes que había encontrado un barco que se había hundido en el Océano Atlántico, con una carga de monedas de oro y plata.
El 21 de Mayo la compañía hizo el anuncio oficial de que no revelaría el nombre del barco por razones de seguridad.
“Por nuestra experiencia con otros pecios sabemos que dar información sobre la identidad de los pecios… provoca salvajes especulaciones sobre el valor, los derechos de propiedad y el resultado de otros temas.
Oddisey dice que ha recuperado 17 toneladas de monedas que han sido traídas a los Estados Unidos con una licencia de exportación válida concedida por el país desde el que han sido exportadas. Asimismo han sido importadas válidamente según las leyes estadounidenses.
La información no aclara que país ha concedido la licencia de exportación.
“La Constitución del Océano”
Goold, que ha representado a España en otros casos relacionados con los derechos de salvamento de pecios, dijo que no podía responder a preguntas sobre si España le ha pedido que emprenda acciones legales contra Odyssey.
Él informó que informó a Odyssey el 18 de Mayo sobre las leyes españolas y les pidió información sobre el Cisne Negro, pero no obtuvo respuesta.
(Gooled también ha representado a Nacional Geografic Society, cuya sede está en Washington, D.C., en temas legales. Nacional Geografic News es parte de esta sociedad.)
En su nota del 21 de Mayo Odyssey decía que su trabajo en el barco se ha hecho de acuerdo a las leyes más relevantes, incluyendo la Convención de la Ley del Mar.
Asimismo afirmaba que ninguna parte del trabajo del Odyssey se ha realizado en aguas de jurisdicción española.
La Convención de la Ley del Mar fue promulgada por las Naciones Unidas en 1982 y se aplica a los pecios encontrados en alta mar, fuera de la jurisdicción de ningún gobierno.
La convención, firmada por 150 naciones, reconoce los derechos de propiedad de los países sobre sus barcos hundidos.
Se la ha llamado la “Constitución del Mar”, dijo Peter Oppenheimer, abogado de la Oficina Nacional de los Estados Unidos para la Administración Oceánica y Atmosférica y el Consejo Generalpara las Leyes Internacionales.
Los Estados Unidos no han firmado la Convención pero reconocen la mayor parte de sus disposiciones.
Una de esas disposiciones afirma que “los objetos encontrados a bordo de cualquier pecio se preservarán y pondrán a disposición del conjunto de la humanidad, poniendo particular atención en los derechos preferenciales del estado o país de origen.”
El futuro del barco.
Bass de Texas A& M se preguntaba por el destino de los otros objetos- aparte de las monedas- encontrados en el barco.
“Si es un barco bien conservado de un periodo concreto, todas sus partes seran importantes. Sabemos que tiene monedas. Pero el resto ¿va a ser abandonado? ¿Se está tratando la historia de la forma correcta?
Fuente:
National Geographic Society. May 24, 2007
Link: http://news.nationalgeographic.com/news/2007/05/070524-ship-treasure.html
Shipwreck Treasure's Fate a Toss-Up, Experts Say
Willie Drye for National Geographic News
In what could be the richest deep-sea treasure ever found, explorers last week pulled up hundreds of thousands of colonial-era coins from a shipwreck in the Atlantic Ocean.
The silver and cold coins could fetch as much as 500 million U.S. dollars, some experts predict.
But now, Odyssey Marine Expeditions, the Florida-based company that discovered the coins, could face a run for their money.
Spain may present a legal challenge over salvage rights to the vessel and ownership of any artifacts on the ship—including the coins.
Washington, D.C. attorney James A. Goold said today he has notified Odyssey that Spanish laws regarding salvage and possession of the contents of sunken Spanish ships may be applicable to this shipwreck.
Goold, who is with the firm Covington and Burling, said he has also asked Odyssey for information about the identity of the ship and its cargo.
But the company plans to keep the location under wraps, and Natja Igney, a spokesperson for Odyssey, said she could not respond today to questions about the ship.
The company—which is still uncertain of the ship's nationality, size, and age—has coined itBlack Swan.
George Bass, a retired professor of underwater archaeology at Texas A&M University told National Geographic News he understands why Odyssey is keeping the location of the Black Swan secret.
But he is concerned that other details haven't been disclosed.
"There may be a reason, but that's not the way scholars would deal with it," Bass said.
Bass said a shipwreck such as the Black Swan would be handled very carefully by professional underwater archaeologists, who might take years to fully excavate and interpret a site.
A Clandestine Cargo?
Odyssey, which is headquartered in Tampa, announced earlier this month that it had found a ship that had sunk in the Atlantic Ocean with a cargo of gold and silver coins.
On May 21 the company announced in a statement it would withhold the name of the ship because of security concerns.
"Based on past experience with other shipwrecks, we have found that putting out information about the identity of shipwrecks ... results in wild speculation about values, ownership rights and scores of other issues," the statement said.
Odyssey said it had recovered 17 tons of coins and that the coins were brought into the United States with a valid export license granted by the country from which they were exported. They were also imported legally pursuant to U.S. law, Odyssey said.
The statement did not say what country had issued the export license.
"Constitution of the Ocean"
Goold, who has represented Spain in other cases involving salvage rights to Spanish ships, said he could not respond to questions about whether Spain has instructed him to begin legal proceedings against Odyssey.
He notified Odyssey of Spanish laws and requested information about the Black Swan on May 18, but to no avail.
(Goold also has represented the National Geographic Society, which is headquarted in Washington, D.C., on legal matters. National Geographic News is part of the Society.)
In the May 21 statement, Odyssey said its work on the ship was done in accordance with relevant laws, including the Law of the Sea Convention.
None of Odyssey's work on the Black Swan had been done in waters subject to Spanish jurisdiction, the statement also noted.
The Law of the Sea Convention was enacted by the United Nations in 1982 and applies to shipwrecks found on the high seas, which are outside the jurisdiction of any government.
The convention, supported by 150 nations, recognizes countries' ownership of their sunken vessels.
It has been called the "constitution of the ocean," said Peter Oppenheimer, an attorney with the U.S. National Oceanic and Atmospheric Administration's Office of General Counsel for International Law.
The United States has not signed the convention but does recognize most of its provisions, Oppenheimer said.
One such provision states that "artifacts found aboard any shipwreck shall be preserved or disposed of for the benefit of mankind as a whole [with] particular regard being paid to the preferential rights of the State or country of origin. ..."
The Ships Fate
Bass of Texas A&M wondered what might become of other artifacts besides the coins aboard the Black Swan.
"If it's a well-preserved ship of a particular period, every part of it would be important," Bass said.
"We know it has coins. Is it just going to be abandoned? Is that treating history the way it should be?"
Source: National Geographic Society. May 24, 2007
Link: http://news.nationalgeographic.com/news/2007/05/070524-ship-treasure.html
Se está montando un pollo fino. Al parecer, por lo que leo en la prensa, el PP ha solicitado la presencia en el Congreso de cuatro ministros, y no sé hasta qué punto se piden responsabilidades a quien corresponde.
Hace unos días, La Gaceta de los Negocios informaba que debído a "lentitud administrativa", la Junta de Andalucía no había destinado a un arqueólogo que debía haber subido al barco mes y medio antes de que se conociesen los hechos.
Es de suponer que Andalucía, como cualquier otra comunidad, tendrá competencias exclusivas en Cultura. Es decir, para el caso que nos ocupa, supongo que que el único organismo competente para autorizar una prospección, sondeo o excavación subacuática -si valen los términos- en aguas inmediatas a Andalucía es la Junta de esta comunidad.
Es cierto que una de las pocas competencias que conserva la Administración General del Estado en temas de cultura, es la protección de los bienes culturales contra la exportación ilítica y el "expolio", entendido este último término como "toda acción u omisión que ponga en peligro de pérdida o destrucción todos o alguno de los valores de los bienes que integran el Patrimonio Histórico Español o perturbe el cumplimiento de su función social" [Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español, art. 4].
El mismo artículo de la LPHE continúa señalando: "En tales casos [de expolio] la Administración del Estado, con independencia de las competencias que correspondan a las Comunidades Autónomas, en cualquier momento, podrá interesar del departamento competente del Consejo de Gobierno de la Comunidad Autónoma correspondiente la adopción con urgencia de las medidas conducentes a evitar la expoliación. Si se desatendiere el requerimiento, la Administración del Estado dispondrá lo necesario para la recuperación y protección, tanto legal como técnica, del bien expoliado".
Pero no parece de aplicación este segundo párrafo porque el expolio está ya realizado, y es de suponer que con la que está cayendo, la Junta de Andalucía pondrá todos los medios a su alcance para que no continúe.
Concluyo. No sé qué opináis, pero creo que la Administración General del Estado entiendo que ejerce sus competencias contra el expolio a través de la unidad de Patrimonio Histórico de la Guardia Civil, que debe informar a la Junta o al Ministerio de Cultura, si la Junta no actuase. Por lo tanto, si hubiese que pedir explicaciones, yo las pediría en primer lugar al Ministerio del Interior por no dotar con efectivos suficientes la sección de Patrimonio de la Guardia Civil; en ese mismo nivel, también las pediría a la Junta de Andalucía por la "flojedad" administrativa; y por último, al Ministerio de Cultura, que se mueve y ejerce sus competencias contra el expolio en función de la actuación de los dos anteriores.
Aquí va lo último de Odyssey:
http://www.elpais.com/articulo/cultura/arqueologos/espanoles/podrian/haber/estado/barco/elpepucul/20070526elpepicul_8/Tes
***
Está claro que la táctica de Odyssey es la siguiente:
-Ocultar la información de las monedas, el máximo de tiempo.
-Ocultar la información del lugar del hallazgo.
- Intentar convencer de que el barco fue encontrado fuera de las aguas españolas.
- Intentar mantener el enigma, todo lo cual sirve para ganar tiempo.
- Confundir sobre donde han faenado, a ver si cuela que estuvieron en el Atlántico por unos días.
- Aprovechar la pasividad de las autoridades, como argumento de que "ellos estaban vigilados", sin estarlo realmente.
- Confundir, confundir, confundir...no dar ningún dato hasta que puedan volver a la zona del pecio.
En resumen, la actitud de no dar información, es la actitud clara del que no quiere dar ningún argumento a la otra parte para que se pueda reclamar algo. A su vez, ocultar bajo la excusa de estar seguros antes de qué barco se trata para no crear rumores; lo cual produce lo contrario precisamente: aumentar los rumores, y mostrar claramente la realidad de que tratan de ocultarlo todo. Han llegado alevosamente hasta a borrar digitalmente en las fotos la marca de las monedas.
Ahora España tendrá que demostrar cosas de las que a lo mejor no puede obtener datos, y Odyssey no los va a dar.
La actitud es claramente la de un pirata, que lo único que desea es maniobrar y ocultar de todas las maneras posibles para que España no pueda tener argumentos sólidos ni pruebas en la reclamación. Se ve claramente que han hecho un expolio, ya sólo por ver cómo conducen sus declaraciones para no dar pruebas a España, y sabiendo que todo se decidirá en un juicio, donde les puede ser suficiente la falta de pruebas del oponente. Esta es la estrategia, que han tenido en mente para al hacer lo que han hecho.
Si hubiera sido legal, ¿qué inconveniente tendrían en dar todos los datos para ya callar a todo el mundo?.
Hay una alevosía descarada.
Dices Irluaxair: "Aprovechar la pasividad de las autoridades, como argumento de que "ellos estaban vigilados", sin estarlo realmente".
Pues sí parece que estaban vigilados, pero no se tomaron medidas porque, al parecer, el buque Galicia informó de forma reiterada acerca de las actividades de los cazatesoros, al menos a juzgar por lo que publica hoy el ABC:
El comandante de Infantería Jaime Segalerva y el capitán de Corbeta Juan Bautista Pérez Puig, destinados en el buque de asalto anfibio «Galicia» explicaban en el programa informativo «Ones de Mar» las características de su barco, cuando el presentador, David Oliver, les preguntó por el papel de la Armada en el caso Odyssey.
«Los vemos y nadie es ajeno»
Los oficiales del «Galicia» explicaron que «nosotros vemos los barcos, cómo están haciendo este tipo de extracciones y se informa al Estado, dentro de la cadena de mando, de forma lógica y natural; pero ya son otros los organismos que tienen la competencia y se encargan de vigilar.»
El capitán Perez Puig aseveró que «cualquiera que navegue por allí, sea en un velero, o sea en el «Galicia», como es mi caso, los ve y no es ajeno a lo que está pasando. Nosotros informamos y el Estado es quien se encarga, en unos momentos con más acierto y en otros con menos, nosotros no entramos en eso».
Fuente: Defensa tiene cientos de informes de los buques de la Armada sobre el Odyssey
Bien, Giannini, efectivamente estaban siendo vigilados...el problema es de la autoridades...
Lo que quiero decir es que Odyssey, ahora dice: "Cómo ibamos a poder hacer nada ilegal si nos tenía vigilados"...esto lo dice en la entrevista. O sea, aprovechan la desidia d elas autoridades, para argumentar que siendo vigilados les dieron una especie visto bueno, o hicieron dejación.
Están insinuando que España "hizo abandono legal de los restos"... o sea quizás estén insinuando que van a argumentar en el litigio que España no hizo nada ni para poner arqueólogos, ni para parar el expolio.
Por otro lado, la entrevista es asquerosamente falaz, porque si España hizo abandono de los restos, ¿eso quiere decir que reconocen que trabajaban en aguas españolas?. Hasta ahora han dicho rotundamente que eran aguas internacionales. ¿Es que acaso ya se están preparando para cuando se demuestre que los restos estaban en aguas españolas, cosa que niegan?... O España hizo abandono de los restos en sus aguas, o ellos trabajaron en aguas internacionales..¿en qué quedamos?...pero mantienen las dos cosas. No se puede ser más farsantes.
Desde mi punto de vista habría que presentar una protesta formal ante el gobierno de Gibraltar y denunciarle como colaborador necesario del expolio.
Otra noticia sobre los corsarios (con patente de corso del gobierno británico para buscar el Sussex en aguas españolas), cortesía de Terrae Antiqvae:
Los mayores expertos nacionales, desde Cataluña a La Caleta, coinciden: hay tantos tesoros submarinos como desidia administrativa. Los cazatesoros llevan décadas con ventaja para dar con el 'Sussex', el 'Cisne Negro' o el 'Nuestra Señora de Atocha'.
Estamos en 1998, cerca del Peñón de Gibraltar, en la cubierta de un barco de cazatesoros zarandeado por las olas. El Halcón de los mares (como aquella película de Errol Flynn) anda en busca del HMS Sussex, un galeón británico hundido el 19 de febrero de 1694 con un importante botín en sus tripas. El velero es una sombra en estas aguas oscuras y agitadas. Pasan dos años, anuncia el calendario, y los codiciosos regresan en un buque alquilado en Francia, el Minibex. «Estuvo atracado en 2000 y 2001 en Sotogrande», recuerda Lorenzo Sarmiento de Dueñas, abogado maritimista, periodista, escritor, un imán tenaz tras los cazatesoros de la Odyssey durante estos últimos años.
Vuelan las hojas del almanaque. Estamos en 2001, y la Odyssey Marine Exploration obtiene un permiso del Gobierno español para hacer una prospección y localizar el Sussex. A bordo se ve a veces a algún arqueólogo español, recuerda Sarmiento, el perseguidor incansable desde el mirador de su pequeño barco de catorce metros de eslora. Pero el Minibex intenta ir más lejos de lo que el documento le autorizaba, y el Gobierno, que había recibido más de una crítica por aquella visa, dice basta. La Guardia Civil les expulsa de la zona en 2002, aunque en esta historia aún está lejos el final. Entre 2000 y 2006, toma el relevo otro barco, el Ocean Boomer, y los mismos «barqueros». Al cabo, este invierno, otras dos siluetas, la del Odyssey Explorer y la del Ocean Alert.
Siempre un mismo lugar
«A partir de febrero -relata el abogado e investigador- el Odyssey comenzó a trabajar en aguas españolas en campañas de diez días, regresando a Gibraltar du-rante periodos muy cortos, para descargar y aprovisionarse. Se puede comprobar que durante el día cambiaban unas millas de posición, seguramente para no levantar sospechas y despistar sobre el punto donde pensaban extraer las monedas. Pero si miramos las posiciones nocturnas y las que realizan a lo largo de marzo, en la segunda campaña de 17 días, siempre regresan a la posición 36º 2' N y 5º 12' W, lugar en el que vienen manifestando que estaba lo que ellos llamaban la fragata Sussex, sin que jamás aportaran prueba alguna de que se trataba de ese barco». Dos acuerdos hilvanan, que no cosen, la operación. El primero, entre la Odyssey y la Armada Británica para buscar el Sussex; el segundo, una nota verbal (comunicación por escrito, valga el contrasentido, típica del ministerio de Asuntos Exteriores) en la que el departamento de Miguel Ángel Moratinos autorizaba a «prospeccionar, identificar sin remover arena, siempre con la presencia de arqueólogos de la Junta».
La nota verbal resulta un procedimiento «sorprendente» en este caso, porque las competencias arqueológicas las tienen las autonomías. Al parecer, el ROV Hércules, ese robot tan grande como una habitación, 18 toneladas de última tecnología, removió -sin ningún arqueólogo a bordo- y halló, no se sabe si el Sussex.
El cargamento fotografiado tras su viaje a Estados Unidos tenía el aspecto de una esquina de la cueva de Alí Babá: 17 millones de toneladas de oro y plata valoradas en 500 millones de dólares, quizá sacadas de algún lugar entre Estepona, la roca de Gibraltar y Sotogrande, según delata el satélite AISlive escrutado por Sarmiento y según opinan todos los especialistas consultados, o de algún punto del Atlántico, en aguas internacionales, según la compañía Odyssey (www.shipwreck.net).
El sentido del sinsentido
Estamos cerca de la ciudad romana de Ampurias, en el Thetis, el barco desde el que se lanza al agua tres horas cada día -desde mayo hasta principios de noviembre- Xavier Nieto, director del Centro de Arqueología Subacuática de Cataluña, una autoridad del fondo del mar. «Como arqueólogo me sorprende mucho que el ministerio dé una autorización así», afirma. Aunque, tras pensarlo dos veces, surge un «sentido»: el tradicional abandono en el que malvive este territorio de nuestra cultura. «La arqueología subacuática española llega muy tarde -explica-. Los países del Mediterráneo empezaron en los años 50; nosotros, en 1981, 30 años de desventaja, y ahora estamos peor que entonces. Se crearon cuatro centros, y ahí se les dejó, con una escasísima dotación humana y presupuestaria. Hay menos de una docena de arqueólogos profesionales que trabajen sobre ese inmenso patrimonio, no hay ninguna Universidad que les forme, salvo alguna asignatura cuatrimestral aislada, y existe un evidente problema legislativo. La ley de 1985, que equiparaba la arqueología en tierra con la del mar, era muy poco realista».
Xavier Nieto ha navegado por océanos y bibliotecas, como Herman Melville en Moby Dick. En España, donde el mundo submarino es un lugar desconocido, es rara avis. Dice que, si hablamos de naufragios y tesoros contantes y sonantes, la costa andaluza es un lugar excepcional.
«En Sevilla se instaló la Casa de Contratación de Indias (1503), y por allí pasaban todos los galeones que venían de América. En cuanto a Cádiz, la entrada a la Bahía es muy peligrosa, porque hay unas barras de arena que modifican la topografía submarina, y que provocaban muchos accidentes, por eso es una franja con tantos pecios».
Nieto no se atreve a aportar una cifra de lo que se esconde ahí abajo -«es imposible saberlo»-, pero otros sí lo hacen. Gonzalo Millán del Pozo, escritor, curioso, director del Proyecto Poseidón, grupo que pretende proteger el patrimonio cultural subacuático, habla de más de 800 galeones hundidos con cargamentos que podrían superar los 100.000 millones de euros.
Claudio Bonifacio, cazatesoros, opina que bajo nuestras costas podría haber 800 toneladas de oro y 12.000 de plata, amén de otros tesoros. Un botín inmenso, en cualquier caso. O un patrimonio histórico y cultural, según los ojos que lo miren.
En el Centro Andaluz de Arqueología Subacuática (CAS), en Cádiz. Los ojos de Carmen García Rivera, la coordinadora, no son dos monedas.
«Nuestra misión no es recuperar tesoros, sino investigar, proteger y conservar el patrimonio donde está. Lo importante es la información histórica que nos aporta. El cargamento económico sería sólo un valor añadido».
Una década de limitaciones
El CAS gaditano cumple este año su primera década, tiempo en el que han tratado de hacer una carta arqueológica rigurosa -por ahora, incluye unos 80 yacimientos- como paso previo para su investigación. «Hemos utilizado información oral, archivos, documentos, y el trabajo que hizo una empresa estadounidense en el Proyecto Galeón durante la Expo», afirma. García Rivera cree que el desarrollo tecnológico debe servir para proteger los pecios y para luchar contra el expolio.
«El reglamento de actividades arqueológicas de la Junta de Andalucía dice claramente que nadie puede remover arena sin un permiso de la Consejería, y siempre que la investigación tenga un objetivo científico», recuerda.
Desde luego, ninguna de estas dos condiciones se han cumplido en el caso Odyssey, si es que su hallazgo se ha producido en aguas españolas, como sospechan arqueólogos y Administración. Esta compañía fundada en 1986, que el pasado día 18 duplicó su valor en Bolsa, parece seguir al novelista chileno Francisco Coloane (1910-2002): «Todo lo que se encuentra en el mar, sin dueño, es de uno» (El camino de la ballena, 1962).
La Unesco denunciaba en 2001 que «el intenso pillaje de los sitios arqueológicos marinos por parte de buscadores de tesoros, así como por la frecuente pérdida de materiales de inestimable valor para el estudio de los orígenes de las civilizaciones y de su historia». El despacho del presidente de la Asociación de Rescate de Galeones Españoles, en Madrid, sirve para decir lo mismo: «En España apenas existe la arqueología subacuática. En EE.UU. hay más de veinte empresas dedicadas a buscar pecios», dice.
Una de ellas, la de Mel Fisher, quizá el cazatesoros más popular, halló el Nuestra Señora de Atocha, que se fue a pique en 1622. Fisher empezó la caza en 1970. Recuperó oro y plata, y algunas de aquellas monedas todavía se venden en su web, www.melfisher.com
Es otro ejemplo de que el caso Odyssey es uno entre miles. Habrá más y hubo muchos antes.
Fuente: JUAN FRANCISCO ALONSO / La Voz Digital.es, 28 de mayo de 2007
Irluaxair, voy a hacer de abogado del diablo. Si ellos dicen que estuvieron vigilados, como parece más o menos cierto, e incluso añaden que no estuvo un arqueólogo español por dejadez o lo que sea, entiendo que con eso tampoco se demuestra que el pecio lo expoliasen en aguas españolas, porque con la misma gentileza también pueden decir que se invitó a un arqueólogo español para que comprobase que la extracción no se realizaba en aguas españolas, y que aquí estábamos tan seguros de que el pecio no se encontraba en nuestras aguas, que ni llegamos a enviar un arqueólogo. Tienen que empezar por señalar la ubicación del pecio.
Yo no creo que se puedar ir por ahí, sino por los datos de satélite y las posiciones de los buques. Hace unos días, también leía otra entrevista en la que se preguntaba al abogado de Odyssey en España cómo era posible sostener que el pecio estuviese en aguas internacionales, cuando el barco que realizó la extracción, aparece por datos de radar, siempre en aguas españolas. Respondíó que, con eso se demostraba que había otro barco. Para mí, cuanto más hablan, más se ponen en evidencia. Ahora, deben demostrar, no sólo que el pecio que ellos expoliaron estaba fuera de aguas españolas, sino que hubo un barco a mayores. Vamos, hombre, vamos...
¿Quieres decir que pillarles en mentiras no va a servir en el litigio, sino que va a haber que aportar pruebas?...Si, es verdad, pero ¿un juez no tendrá en cuenta todas estas maniobras de confusión?...que si el pecio está en aguas internacionales, que si en el atlántico, etc etc..cuando el satélite lo demuestre.
Bueno, también pueden dar datos falsos, que tendrán que contrastarse con los datos que aporte España; y puede ser muy complicado...
Yo lo veo venir, van a argumentar como último recurso que ante la posibilidad de que fuera el Sussex, bajo acuerdo con Inglaterra, y la dejación de España, pues que arramblaron con el tesoro.
Pero eso si no les cuelan otra serie de argumentos que ya han ido lanzando: que si estaban en el Atlántico, que si eran aguas de Gibraltar (hay una zona que reclama Gibraltar y anda en litigio con España), que si un barco suyo hizo unos viajes al Atlántico, que si no sabían de qué barco se trataba etc etc...
lo dicho que como sigamos con la torta nos quitan hasta los calzoncillos, estamos atontaos y nos van a dar con el timo de la estampita en todos los morros.
Irluaxair, ¿sobre quién recae aquí la carga de la prueba? Para formular una denuncia, primero tendremos que demostrar que hemos sido expoliados, por lo tanto, aportar pruebas de que:
1) El pecio se encontraba en aguas españolas.
2) El Odyssey se encontraba sobre el pecio.
3) Que estando sobre el pecio, lo expoliaron.
A partir de ahí, supongo que ellos tendrán que probar que no fueron ellos los que expoliaron el pecio y que, a tenor de lo que señala su abogado español, "hubo otro barco que extrajo el tesoro del Cisne negro en aguas internacionales.
En definitiva, que en mi opinión, para realizar una denuncia y reclamar lo que es nuestro, España es quien debe probar sus acusaciones.
En vez de lamentarse, lo ideal sería crear una sección de arqueología submarina desde el ministerio y dotarla de la tecnología apropiada para llevar a cabo acciones de "rescate de pecios", tal como hacen estos piratas, pero oficialmente y con todas las garantias legales. Asi no tendriamos que quejarnos que nos expolian. Y si ademas se les prohibe la entrada en aguas españolas mejor. Los costes de esta operación están mas que cubiertos por lo visto.
jfca, dudo que el Ministerio de Cultura tenga competencias al respecto. Las competencias de cultura, salvo unas pocas, están transferidas a las comunidades autónomas. Aquí en Galicia, creo que algo van a hacer. Por convenio del 4 de enero pasado, la Zona Franca de Vigo cedió la titularidad y la gestión del Museo del Mar a la Xunta de Galicia, y en algún sitio leí que ese museo se va a convertir en el centro que coordine las actividades de arqueología subacuática en la comunidad. No tendría sentido que el Ministerio de Cultura crease un centro de arqueología submarina, y todas sus actividades estuviesen supeditadas a la licencia de intervención que les concedería o no la comunidad autónoma que fuese.
Efectivamente, aquí os dejo parte de una nota de prensa sobre el Museo do Mar de Galicia:
Centro de Arqueoloxía Subacuática
A nova unidade de arqueoloxía incluirá persoal e equipos técnicos especializados na realización de traballos de investigación de xacementos subacuáticos. Así mesmo, ocupará unha posición central, xa que se prevé que se encargue de coordinar as exploracións deste tipo que se realicen en toda Galiza. Para reforzar o papel deste novo departamento, a Consellaría enviará pezas recuperadas en depósitos arqueolóxicos baixo da auga e que se integrarán nos fondos do Museo.
A unidade de arqueoloxía subacuática é unha das iniciativas mediante as que a Consellaría de Cultura e Deporte busca darlle novos azos ao Museo de Mar, xa que está a preparar un Plan de Arqueoloxía Subacuática, un programa que comezará este ano coa creación dun catálogo de todos os pecios que existen en augas galegas, incluídos os galeóns de Rande.
Fuente: Consellaría e Zona Franca asinaron hoxe o convenio polo que Cultura se fai cargo do Museo do Mar. O NOVO PROXECTO INCLÚE UN CENTRO ESPECIALIZADO EN ARQUEOLOXÍA SUBACUÁTICA
De hecho, salvo mejor opinión, las únicas competencias exclusivas del Estado sobre Cultura aparecen recogidas en el art. 149.1.28 de la Constitución:
"Defensa del patrimonio cultural, artístico y monumental español contra la exportación y la expoliación; museos, bibliotecas y archivos de titularidad estatal, sin perjuicio de su gestión por parte de las Comunidades Autónomas".
Desde luego, creo que La Gaceta de los Negocios está proporcionando una magnífica información sobre el tema. En la noticia de hoy hacen hincapié en la existencia de un segundo convenio entre Odyssey y el gobierno inglés. Al parecer, en los famosos túneles militares que horadan el peñón se almacenaron las monedas durante unas dos semanas... La cosa huele muy mal.
El ejército británico guardó el tesoro de Odyssey durante dos semanas en Gibraltar
jejeje...cuanto más leo a estos tipos más me parto. Dicen “Lo hemos sacado del Atlántico, pero tenemos derecho al 95 % aunque España reclame”
“No eran aguas de España, pero España hizo dejación de los restos”
“No son monedas españolas, sino una variedad, pero hemos borrado las imágenes de las monedas por seguridad”...
jejeje...es que son de Jaimito. Pura contradicción. En sus declaraciones sus malas intenciones son siempre transparentes de que han sido unos chicos malos, negando todo, pero dando siempre las claves de lo que van a hacer cuando se demuester que ha sido un expolio.
Por otro lado Giannini. Ese es el problema, que han hecho el expolio a sabiendas de que tienen las de ganar, y que el éxito de España en el litigio depende de las pruebas que aporte, por eso no dan ningún dato. Sólo darán unos datos filtrados por ellos mismos. Tienen el poder mientras ellos sean la única fuente de los datos, y sea difícil saber la verdad de otras fuentes que no sean ellos. ¿Quién te dice a ti que no hicieron breves viajes al Atlántico desde el Estrecho para luego usar ese argumento (si no totalmente falso)?. Ya han soltado todos los elementos de su discurso para tener las coartadas etc...lo tienen muy estudiado.
Lo peor, y casi lo más sorprendente de todo, es que Carmen Calvo dijo despues de los primeros díis de la noticia : “Estamos tranquilos de que no ha sido en aguas españolas porque los teníamos totalmente vigilados”...jejeje...o ella lo creía de verdad que la guardia civil les tenía vigilados e impediría cualquier expolio, o los datos salidos hasta ahora de los satélites que hablan de que los barcos no salieron del Estercho son falsos.
En mi sentir, como decía más arriba, la mayor parte de la responsabilidad recae en la Junta de Andalucía. También en la Guardia Civil, o en quien no provee de medios suficiente a la unidad de Patrimonio de la Guardia Civil. Aquí Carmen Calvo está comiéndose el marrón, tal vez protegiendo a la Junta de Andalucía, con la que dice que está perfectamente coordinada, pero la actuación del Ministerio, una vez que tuvo conocimiento del posible expolio, en principio parece correcta.
Lo que resulta inexplicable es que Odyssey pida licencia a la Junta de Andalucía para realizar una prospección subacuática, que se la concedan -de acuerdo con la prensa- condicionada a la presencia de un arqueólogo que debía presentarse en el barco con un mes y medio de antelación a la fecha en la que se conoció el expolio, y que la Junta haga dejación de sus funciones no destinando al arqueólogo por "lentitud administrativa". No me parece normal.
Luego por supuesto está el tema de Gibraltar. Gibraltar pretende reclamar para ellos desde siempre unos terrenos, aguas territoriales, espacios aéreos sobre el Penón...y los ingleses actúan como si la zona fuera suya. En fin, que no es de extrañar tampoco que en todo esto se mezcle el tema de la reclamación de unas aguas que ellos pretenden que no son españolas...
Es que las concepciones son muy diferentes: los gibraltareños e ingleses piensan y actúan poco más o menos como si ellos fueran el ombligo del mundo, y que el Estrecho de Gibraltar es más o menos su propiedad y nadie más cuenta, por lo que tienen derecho a darles parte de ese derecho a su amigos americanos.
Luego los españoles de hoy en día, la gente de la zona, pensamos que Gibraltar es un simple reducto pequeño y rodeado...pero eso choca con la concepción inglesa de actuar a sus anchas en un estrecho dominado por ellos históricamente. Así que nos choca esta manera de actuar que ellos ven completamente normal. Por ejemplo, ellos consideran la mitad de la bahía de Algeciras (lo que ellos llaman bahía de Gibraltar) como aguas de Gibraltar, cuando los tratados no dicen eso.
¿No fue el gobierno el que firmó un acuerdo con Odissey y no la junta?.
Si, hay una responsabilidad de la Junta. Pero sería por lentitud, porque eso no quiere decir que diera permiso para expoliar a Odyssey. Si tu necesitas un documento oficial para por ejemplo hacer una obra, eso no te da derecho a hacer la obra antes de tiempo. Es verdad que jode tener que esperar, pero si no tienes el documento te tienes que esperar. Odissey no sólo no esperó a los arqueólogos para buscar al Sussex, sino que aprovechando su ausencia, hizo algo distinto para lo que no tenía permiso.
Todos tienen la culpa, por legitimar a esta empresa haciendo acuerdos con ella, lo cuasl le han dado la oportunidad para prospectar toda la zona el tiempo que han querido. Por no haberles controlado, por no haber sido duros, hacer la vista gorda, por confiar en el zorro para cuadar el gallinero etc... son todos unos ineptos...y no va a dimitir nadie.
Bueno, creo que el acuerdo lo firmaron el gobierno español y el británico, aunque la empresa que lo materializaba era efectivamente Odyssey, para el Sussex, no para el Cisne Negro.
Madrid rompe un acuerdo con Londres sobre un barco hundido y su tesoro
Me temo que lo firmó Exteriores porque la Junta de Andalucía no puede obligarse mediante acuerdos de tipo internacional, y es de suponer que Exteriores contaba con el beneplácito (¿tácito?) de la Junta de Andalucía, que es, insisto, quien creo que ostenta las competencias para autorizar una intervención arqueológica en sus aguas. Hay dejadez por parte de la Junta. El Ministerio de Cultura, repito también que ejerce sus competencias en cuanto tiene conocimiento del expolio -que es en donde las tiene- y por ahora, su actuación me parece correcta.
Es cierto que los españolitos tenemos que fastidiarnos con la "lentitud administrativa", pero alguien que no tiene nuestra nacionalidad puede usar resquicios, y sabiendo esto, aún no me acabo de explicar como la Junta de Andalucía no fue mucho más diligente y previsora para evitar que ahora estemos lamentando algo que va a tener difícil solución. Por eso, para mí el principal responsable, por no haber actuado con previsión ante estos impresentables es la Junta.
En el fondo, estamos de acuerdo. Si se ha producido un expolio, los responsables máximos del mismo son los expoliadores, pero desde luego, no creo que la actitud de la Junta de Andalucía sea un ejemplo a imitar.
Claro que si, la junta tiene gran parte de la culpa, pero el gobierno ha sido quien ha legitimado a Odissey con un acuerdo; y además la vigilancia costera y la guardia civil depende del gobierno.
No me parece que el gobierno haya actuado impecablemente, porque se fió completamente del zorro para guardar el gallinero, cuando en el Campo de Gibraltar todeo el mundo estaba avisando de lo que hacía la compañía. Aquí todos los medios y autoridades locales estaban espantados y avisando de lo que hacía el Osdissey, pero la autoridad, sea la junta o Gobierno, que ambas pudieron mandar parar aquello, ninguna lo hicieron. Y la Guardia civil, si tienen indicios de un expolio...¿necesita a alguien más para pararlo?...
Aquí se lleva años protestando contra estos piratas americanos, pero misteriosamente el gobierno les daba permisos etc...
Las noticas sobre el asunto siguen. La embajada británica emitió hoy un comunicado en el que asegura que Odyssey no usó los túneles militares de Gibraltar, noticia que proporcionaba ayer La Gaceta de los Negocios.
Reino Unido asegura no ha almacenado 'carga alguna' del Odyssey en Gibraltar
Creo que esta mañana hubo un debate en la Cadena SER en el que participó la ministra de Cultura, pero no me concretaron si proporcionó más información.
Seguimos con informaciones contradictorias, o no tanto... Si la embajada británica sostenía hoy en un comunicado que no se han almacenado en los túneles de Gibraltar materiales procedentes del pecio, La Gaceta de los Negocios lo desmiente, y mantiene, citando a los conductores civiles que transportaron las cajas en camiones militares, que éstas se guardaron en el polvorín Fosse Way de Gibraltar:
Noticia de La Gaceta de los Negocios: El tesoro de Odyssey se guardó en el polvorín Fosse Way de Gibraltar
El gobierno lo ha hecho fatal, porque Odyssey ha usado el “acuerdo verbal” (ya “roto” por la ministra) de localizar al Sussex para prospectar toda la zona y buscar otros naufragios.
Otra cuestión que no entiendo... si la guardia civil se encuentra a un tipo con un detector de metales en una zona arqueológica ¿qué hace?...¿le deja que se pasee con el detector o se le impide seguir?...bueno, pues, si llega un barco a aguas españolas con el mejor arsenal de expolio conocido, y se les ve pasearse por todos lados...¿qué debe hacer la guardia civil?...¿dejarlos que sigan pululando a ver qué pasa, o simplemente detenerlos o expulsarlos ante el evidente peligro para el patrimonio arqueológico?..
¿Es que no tiene la guardia civil autoridad para impedir un expolio?...Con los ciudadanos no se andan con chiquitas, ¿porqué a Odyssey se le deja tranquilo siendo un peligro ambulante?...
Pero es que me temo que encima van a volver y se lo van a seguir permitiendo.
Hay 110 comentarios.
1 2 3 página siguiente