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En Algeciras, de donde soy yo, os puedo contar historias de auténtico miedo, o mejor dicho, cosas que rozan la crueldad: palacetes preciosos que se caen literalmente a pedazos sobre los viandantes, arrojar restos paleolítcos al mar (un profesor del instituto más cercano se subió literalmente a una pala de una excavadora y recuperó puntas de sílex y cuarcita, y otras piezas), y las dos cosas más duras: primero, la Puerta de Tarifa, la puerta principal de la famosa muralla de finales de la época musulmana en la ciudad, destrozada impunemente; y dos: unos arqueólogos estaban excavando, y en el último momento del día encontraron el esqueleto de un niño de unos nueve años o así, de aproximadamente el sglo XII; truvieron que dejarlo, y lo cubrieron cuidadosamente... Al día siguiente no quedaba ni rastro del esqueleto, ni un diente, nada.
Decidme vosotros para qué quiere alguien el esqueleto de un niño de nueve años; y además el esqueleto parecía algo importante, o al menos curioso, porque no estaba en la zona del cementerio, y tampoco junto a las murallas, ni estaba enterrado al estilo musulmán.
Biblioteca: Siguen excavando y desmantelando el castro de San Cibrao (Lugo)
En Algeciras, de donde soy yo, os puedo contar historias de auténtico miedo, o mejor dicho, cosas que rozan la crueldad: palacetes preciosos que se caen literalmente a pedazos sobre los viandantes, arrojar restos paleolítcos al mar (un profesor del instituto más cercano se subió literalmente a una pala de una excavadora y recuperó puntas de sílex y cuarcita, y otras piezas), y las dos cosas más duras: primero, la Puerta de Tarifa, la puerta principal de la famosa muralla de finales de la época musulmana en la ciudad, destrozada impunemente; y dos: unos arqueólogos estaban excavando, y en el último momento del día encontraron el esqueleto de un niño de unos nueve años o así, de aproximadamente el sglo XII; truvieron que dejarlo, y lo cubrieron cuidadosamente... Al día siguiente no quedaba ni rastro del esqueleto, ni un diente, nada.
Decidme vosotros para qué quiere alguien el esqueleto de un niño de nueve años; y además el esqueleto parecía algo importante, o al menos curioso, porque no estaba en la zona del cementerio, y tampoco junto a las murallas, ni estaba enterrado al estilo musulmán.
Biblioteca: CMS BC Compra Celtiberia
Vale, ya vuelvo a respirar... Sois unos niños mu malos, ¿eh?
:D
Hay 2 comentarios.
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