Iglesia de San Juan Bautista

Es uno de los edificios mudéjares de cronología más antigua, construido sobre los resto de un templo románico. Sigue el modelo mudéjar de Toro.

De fábrica de ladrillo y mampostería, con ábsides y torre cuadrada a la cabecera, posee una decoración a base de arcades y rectángulos que recorren los muros. Destaca en la actual puerta de entrada, un arco de medio punto, ligeramente apuntado, ubicado en un recuadro decorado con un friso de esquinilla entre dos bandas de ladrillos en vertical.

Perdura el estilo románico en el ábside, hecho de piedra de sillería y ladrillo, dividido con pequeñas columnas que sirven de contrafuertes, ventanas Abocinada con baquetones y decoración en zig-zag, una línea de puntas de diamantes corre bajo el tejaroz.
El interior está formado por tres naves que concluyen en tres ábsides y un coro a los pies y bajo éste, una hermosa armadura mudéjar.

Especial atención merece el sepulcro gótico-mudéjar del último tercio del siglo XV, que se halla a un lado de la capilla mayor, consistente en un arco de medio punto hendido en el muro e inscrito en su correspondiente recuadro de finísima lámina de estuco. El sepulcro se halla al pie, donde deben conservarse los restos del fundador.