Siempre me ha resultado completamente envidiable la actitud de diferentes países   con respecto a su patrimonio, ya sea cultural como arqueológico. Casos como Gran Bretaña, Irlanda, Francia o incluso Portugal y un largo etcétera.

El deber de un país, debiera ser la protección de su patrimonio. Ya bien por el orgullo y conocimiento de su propia historia como por los beneficios que pueden otorgar con un poco de esmero en el plano turístico.

Existen a mi modo de entender dos tipos de destrucción arqueológica en España.

1 - Cuando un yacimiento arqueológico es destruido por la propia administración con conocimiento de causa. 

Esto suele suceder cuando existe una obra pública en curso y una clara negativa a paralizarla. Resulta ser el caso mas aberrante. Pues si bien el yacimiento estaba catalogado, en el trazado de la obra pública no se dio importancia al mismo. O bien cuando en el propio trazado de la obra aparece un yacimiento de la suficiente magnitud, como para que requiera un estudio y el deber de paralizar la obra. 

Pondré un par de ejemplos. (Pido disculpas de antemano por poner solo ejemplos del panorama gallego por ser los que conozco al ser oriundo de ahí. Pero estoy convencido que es aplicable a toda la geografía española. )

"El Túmulo de Coeses" ( norte de Lugo ). Túmulo de 60 metros de diámetro con un foso alrededor y muros interiores y exteriores, que los arqueólogos denominaron como "anillo lítico pseudotumular", o como lo denominarían en las islas británicas, un "henge". El primero aparecido fuera de ellas. 

Pese a la negativa de colectivos culturales y la totalidad de la oposición del parlamento, el gobierno gallego prosiguió las obras del trazado de la autopista A-54 pasando por encima del yacimiento y destruyéndolo  en vez de desviar el trazado unos pocos metros.

Se ha descubierto otro circulo lítico "henge" recientemente también en el norte de Lugo en Barreiros, llamado "a roda". Posiblemente existan mas confundidos con pequeños castros.

Otros ejemplos que me cuadran de primera mano son el trazado de la vía rápida de Sarria-Monforte donde numerosos dolmen y petroglifos fueron arrasados incluso antes de empezar las obras propiamente dichas, puesto que como es sabido están obligados a llevar un arqueólogo. 

2- Destrucción del patrimonio arqueológico por la población local. 

Son los casos mas abundantes y normalmente destruidos o afectados por labores agrícolas y forestales.

Dichos yacimientos, no siempre están catalogados, en cuyo caso la responsabilidad no se puede atribuir a nadie. Sin embargo, la mayoría son los casos en que si lo están y sin embargo su destrucción se lleva a cabo con total impunidad. 

Desconozco si la administración no avisa a los propietarios de las tierras donde se ubican dichos yacimientos o si por la contra no existe penalización adecuada para esos actos. El caso es que la destrucción es constante y en vez de ir a menos son cada vez mas los yacimientos destruidos. Numerosos son los casos que se podrían poner de ejemplos. Los dolmen de la sierra del páramo (Lugo) numerosos petroglifos de Maside (Sarria, Lugo),  Castros donde se destruyen sus muros y se aran en la cima (gran cantidad de casos) y una infinidad de etcéteras.

Conclusión: Deberíamos tener unos gobiernos capaces de valorar lo que todavía tenemos. Pues si no valoramos lo que tenemos o ni siquiera lo conocemos, tampoco podemos valorar ni nuestras raices ni lo que somos.

Espero que algún día se tome conciencia de ello y podamos enseñar al mundo todo lo que tenemos que ofrecer a parte del sol y playa.