La exposición Atapuerca: Un millón de años, muestra los hallazgos y resultados más significativos de las excavaciones y de los estudios sobre los yacimientos se la Sierra de Atapuerca realizados a lo largo de los últimos veinte años por un equipo de investigación multidisciplinar  compuesto por profesionales de multitud de ramas: Arqueólogos, paleontólogos, biólogos, geólogos...

Combinando todos los hallazgos en cada una de estas especialidades, se ha llegado a constatar la existencia de una secuencia estratigráfica en torno a un millón de años que permite conocer cómo ha sido la evolución del medio natural desde ese periodo hasta nuestros días. Además, junto a esto, se han descubierto restos humanos de gran importancia para conocer la evolución humana.

La conservación de un registro fósil de tanta duración y con numerosos restos óseos convierten a la Sierra de Atapuerca en testigo excepcional para conocer a los primeros hombres que habitaron el continente europeo y saber cómo vivían, cómo era el paisaje y el clima en el que se desenvolvían, con qué animales compartieron el medio, cómo se alimentaban, e incluso explicar parte de su comportamiento social.

Con la exposición se pretende mostrar de una manera eminentemente didáctica y gráfica todo el fascinante, complejo y delicado proceso de conocer nuestro pasado, los descubrimientos en la Sierra y los interrogantes que se han abierto, las respuestas que tenemos hasta este momento y también las preguntas que todavía no sabemos contestar con exactitud.

Esta exposición es la continuación de la muestra ATAPUERCA: NUESTROS ANTECESORES, que se pudo visitar en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid de mayo de 1999 a mayo de 2000. Aún así se ha pretendido dar una personalidad propia: se ha estructurado el recorrido de forma que el visitante vaya avanzando desde lo más antiguo a lo mas moderno, de una manera lineal. Otras novedades son la presencia del original de la pelvis "Elvis", pertenecientes a un homo heidelbergensis de hace 300.000 años de antigüedad. Fué inagurada el 20 de julio de 2000 y permanecerá abierta, al menos, un año.

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