Autor: Rosa-ae
martes, 18 de marzo de 2008
Sección: Antropología
Información publicada por: Rosa-ae
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De penes, risas y meigallos
Reflexiones sobre la relación entre la sexualidad y la hechicería en la Antigüedad clásica.
Apuntes sobre la fascinación.
Es de sobra conocido que la mojigatería de las sociedades occidentales modernas ante la sexualidad y el erotismo aparece apenas hace unos tres siglos, en paralelo con el surgimiento de la burguesía, de la que ni el Marqués de Sade, ni siquiera el Arcipreste de Hita, podrían haber sido producto. Esta convergencia burguesía / represión sexual exculpa parcialmente a la Iglesia de todas las responsabilidades que, por lo general, se le atribuyen en esta materia. Reconoceremos sin embargo que, aún después de haber experimentado un Mayo del 68, hay imágenes antiguas de la sexualidad que todavía nos dejan perplejos. Por ejemplo, la cotidianeidad del falo y lo fálico en la vida de los clásicos. Veamos brevemente cuáles pueden ser las razones de esta cotidianeidad. El falo revestía en Roma una “forma institucional” conocida como Fascinum, que no llegaba a ser un dios sino una especie de ídolo fálico que se conservaba en el
penus(almacén del templo de Vesta destinado a guardar también los Penates, entre otros objetos sagrados). Este ídolo se exhibía públicamente en determinadas ocasiones, como durante el Triunfo, la ceremonia de celebración de una victoria militar, cuando se ajustaba durante el paseo triunfal al carro del general victorioso. Pero también se conoce la participación de representaciones suyas en fiestas populares, como las Liberalia, las celebraciones en honor a Liber (el Baco romano, por así decir). En esta ocasión la imagen del dios era conducida del campo a la ciudad acompañada de otras imágenes de falos y entre cantos lujuriosos, con el objeto de favorecer las cosechas y protegerlas, precisamente, del
fascinumo
fascinatio“mala suerte, fascinación, encantamiento”, es decir, de los perjuicios que provoca el “mal de ojo” (
fascinus/fascinumsignifica tanto “falo” como “amuleto fálico” o “mala suerte, mal de ojo”, designando también, como se dijo, al objeto sagrado guardado en el
penus) Como sabemos bien a través de nuestras propias tradiciones, el mal de ojo (galego: mal de ollo, mala ollada,
meigallo, mirada adiviesa, etc.), es el poder maligno que determinadas personas, a través de su mirada penetrante, aguda o considerada simplemente extraña por alguna anomalía en los ojos, son capaces de ejercer sobre otras personas por la envidia que les provocan (de ahí la denominación del Fascinus también como
medicus envidiae). El empleo de su imagen con fines apotropaicos (de protección) –a veces una simple columna fálica- era común en numerosos lugares: en las entradas de las casas, las tiendas, las herrerías, edificios públicos..., aunque muy especialmente delante de las huertas y de los jardines. Por lo que se refiere a su uso personal, se sabe que las mujeres romanas llevaban figuritas de bronce en forma de genitales masculinos colgadas de los collares, y que también era costumbre colgar del cuello de los niños ciertos objetos con forma obscena (
turpicula res) para que no les pasase ninguna desgracia. Su empleo como protección mágica contra las malas influencias hizo del
fascinumun sinónimo del genérico
amuletum, aunque especializado en la prevención contra el mal de ojo, pero también en la propiciación de la fertilidad femenina. No en vano, el intricado
nodus herculeuscon el que las mujeres ceñían sus túnicas el día de su matrimonio, era considerado
fascinumpor cuanto suponía de garantía de fecundidad (el nombre se explica por la creencia de que Hércules había tenido 70 hijos). Por lo que se refiere al mal de ojo, uno de los medios empleados para evitar sus efectos era intentar desviar esa mirada fascinadora haciendo uso, precisamente, de los amuletos. La idea de que el recurso a imágenes monstruosas, ridículas u obscenas tendría como propósito provocar la risa para, de esta manera, distraer o disminuir la fuerza de la mirada, se relaciona en la historia de la gestualidad romana con otra bien conocida representación del falo, también asociada a la risa: cerrar el puño haciendo ostensible el dedo corazón
medium unguem ostendere... El carácter entre procaz y burlón que se le atribuía a este gesto, que reproduce inequívocamente un pene erecto (de ahí los otros nombres del dedo:
infamis, impudicus), se ve bien reflejado en este epigrama de Marcial: “Ríete con ganas, Sextilo, de quien te llamó afeminado levantando el dedo corazón” En lo que insiste el poema priapeo: “¿Te ríes también a mi costa, ladrón, enseñándome el dedo impúdico cuando te amenazo?” Y al mismo código remite tanto el gesto como la forma de nuestra “figa / higa”, también conocida en la Antigüedad como “mano impúdica”, pues, al introducir el dedo pulgar entre el índice y el corazón con la mano cerrada, se supone que representa la cópula heterosexual. Aquí se da nuevamente una identificación semántica entre amuleto y sexo, puesto que la figa / higa (del latín fem.
ficus“higo” –fruto asociado a Príapo), no refiere sino el sexo de la mujer. De hecho, y como queriendo aumentar el poder de protección del
fascinum, muchos amuletos combinan ambas figuras, el falo en un extremo y la figa en el opuesto. Si a esto añadimos la consideración de la exhibición impúdica del sexo femenino como un gesto entre burlón y amenazante en la mitología de Baubo (la “vulva mítica” helena) vemos cómo el sexo, la risa y la protección mágica son ideas estrechamente vinculadas en la Antigüedad clásica. En la mentalidad romana esta interrelación es ilustrada de manera bien gráfica por la literatura que tiene como protagonista la figura de Príapo. Este dios griego fue incorporado a los cultos romanos por su fácil identificación con Fascinus y otras divinidades latinas menores caracterizadas por su aspecto salvaje y exuberante sexualidad (Fauno, Silvano –a su vez correlatos de los sátiros griegos). Aquel dios, al que la iconografía griega mostraba como un personaje excepcionalmente dotado, o simplemente como una turgente metonimia del dios (destacándose “la parte por el todo”*) estaba especializado, al igual que sus afines romanos, y particularmente, en la protección y estímulo de la fecundidad de los campos. (* NB: esta expresión en latín,
pars pro totoofrece un oportuno juego de palabras, puesto que
pars(también
maior pars“mayor de las partes”) es término común para el
membrum seminale, también llamado poéticamente
Arma inguinis, Arma ventris“armamento inguinal, ventral”;
Caput lubricum“cabeza lúbrica”;
Contus pedalis"pértiga de 12 pies";
Cupressus“ciprés”;
Hasta“lanza";
Inguen obscaenum“ingle obscena”;
Palus ruber“estaca colorada”;
Telum, tela“lanza, flechas”;
Sceptrum“cetro”;
Columna; Pyramis, etc...) Con todo, muestra patente del relativo respeto que el dios inspiraba a los romanos son los grafitos que Pompeya conservó en los muros de sus construcciones. A través de ellos podemos constatar, además del manifiesto escepticismo que el dios llego a suscitar entre algunos, también los poderes y funciones que en origen se le atribuyeron. Entre esos poderes destaca su verga como procedimiento disuasorio contra el latrocinio en los campos que vigilaba, como veremos a través de unos ejemplos de la interesante compilación titulada
Grafitos amatorios pompeyanos(http://www.identidades.org/literatura/priapeos.htm; http://www.usuarios.lycos.es/succedani/web3.htm) - “Quien ponga sus deshonestas manos en el vergel a mi confiado comprobará que no soy un eunuco. Y quien por ventura replique: ¿quién sabrá que aquí, en un lugar tan apartado y entre arbustos, has sido tú quien me ha partido en dos?, se equivoca, porque este pleito se llevará a cabo ante dos importantes
testígulos” - “Este cetro que, separado del árbol, nunca más podrá reverdecer, este cetro que reclaman para sí las lujuriosas mozuelas, que algunos reyes desean tomar en sus manos y que nobles sodomitas besan, se hundirá en las entrañas del ladrón todo entero hasta el empeine y la empuñadura de los cojones” - “Mientras no robes nada con esa atrevida mano, podrás mantenerte tan casto como la mismísima Vesta. De lo contrario, esta arma te abrirá en canal de tal modo que podrás salirte entero por tu propio culo” - “Si a robar viniese una mujer, un hombre o un muchacho, que aquélla presente su coño, aquél su boca, éste sus nalgas”. - “A ti, que tienes malas intenciones y que difícilmente aguantas sin robar en el huerto, te daré por culo con mi falo descomunal, y si este castigo tan duro y penoso no da buen resultado, tentaré otro agujero más alto”. - “Te atravesaré, muchacho, te lo advierto, y a ti muchacha te joderé. Al barbado ladrón la tercera pena le aguarda”* (* NB. Se refiere a la
irrumatio, la forma activa masculina de la
fellatio, más acorde con la violación con la que amenaza el dios. Para un hombre adulto, ciudadano romano, la irrumación era el castigo más humillante al que podía ser sometido legítimamente, por ejemplo, por un marido traicionado; su práctica en circunstancia diferente sería considerada un auténtico crimen, como cualquier otra forma de
impudicitiao pasividad sexual –reservada a mujeres, esclavos y libertos) Lo provocador de estas pintadas no oculta, como vemos, la función apotropaica del dios (que cumple con celo enfermizo: “¿Qué tengo yo que ver contigo, inoportuno metomentodo? ¿Por qué impides que se me acerque el ladrón? Deja que venga. Se irá más ancho”). Y la respuesta a por qué su verga se consideraba el instrumento disuasorio contra este delito concreto, nos devuelve a los terrenos tanto de la fecundidad como del hechizo: mientras que el mal de ojo se creía que provocaba la esterilidad o la impotencia, el poder sobrenatural del dios –su “superdotación sexual”- se suponía que contrarrestaba esa acción mágica. Y no olvidemos que la Ley de las XII Tablas (las leyes romanas escritas más antiguas) preveía severos castigos para aquellos
qui fruges escantassit, es decir, para quien “encatase” las cosechas de los vecinos provocando la infertilidad de los campos (típica acusación contra las brujas/meigas modernas). Contra esta clase de imaginario latrocinio actuaría más eficazmente el poder de Príapo. Para los pequeños ladronzuelos quizás fuesen más eficientes la distracción y las carcajadas que provocarían las pintadas pompeyanas: “El rey del rayo es Júpiter. De Neptuno el arma es el tridente. Poderoso gracias a su espada es Marte. La lanza de Minerva es atributo. Con el tirso emparrado, Baco entabla el combate. La mano de Apolo lanza la flecha, como todo el mundo sabe. Arma la pica invicta la diestra de Hércules: mas a mí me hace terrorífico un carajo tieso”.
Blázquez, J.Mª; Martínez-Pinna, J.; Montero, S., 1993: Historia de las religiones antiguas. Oriente, Grecia y Roma. Éd. Cátedra, Madrid Cantarela, E., 1991: Según Natura. La bisexualidad en el Mundo Antiguo. Akal, Madrid Devereux, G., 1984: Baubo. La vulva mítica. Icaria, Barcelona Foucault, M., 1977: Historia de la Sexualidad. 1. La voluntad de saber. Siglo XXI, Madrid Grant, M., 1976: Eros en Pompeya. El gabinete secreto del Museo de Nápoles. Barcelona Lisón Tolosana, C., 1990: Endemoniados en Galicia hoy. La España Mental II. Akal, Madrid Payne Knight, R., 1980 [1786]: El culto a Príapo y sus relaciones con la teología mística de los antiguos. Colección Alatar, Madrid. Rey Seara, E., 1989: “Notas sobre la fascinación en la Antigüedad”. Gallaecia 13 (p.229-38) Rodríguez Campos, X., 1989: “Envidia e identidade social. Adaptación social e simbolización sexual na sociedade galega tradicional”, en Actas do II Coloquio de Antropoloxía. Xunta de Galicia, Santiago (p.223-30) Valente, L., 1992: “Notas para un estudio do meigallo: desorde e reconciliación”, en M. Gondar Portasany e E. González Fernández (eds.): Espiritados. Ensayos de Etnopsiquiatría Galega. Ed. Laiovento, Santiago ADVERTENCIA: cuidado con la consulta de estos temas en Internet. La sola mención de Príapo puede conducirnos a lugares insospechados....
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Un artículo verdaderamente interesante.
Me ha recordado uno que yo escribí, dentro de otro más largo, pero en este caso, es el amor por lo fálico en la antigua Grecia:
El arte griego y el
culto al pene
- “A ti, que tienes malas intenciones y que difícilmente aguantas sin robar en el huerto, te daré por culo con mi falo descomunal, y si este castigo tan duro y penoso no da buen resultado, tentaré otro agujero más alto”.
...
La semana pasada, un viejo me cuentò que, en un lugar montano del Piamonte, en las primeras decadas del siglo XX, los latrocinios en los huertos se resolvian todavia asì...pero decia tb que ataban a un arbol el latron y lo follaban en muchos.
Logicamente no digo el nombre del lugar. Solo que es un lugar aislado.
Rosa-ae, ¿hay seguridad en que la figa represente la cópula heterosexual? ¿no tendría más sentido que la figa fuese representación, única y exclusivamente, de los genitales femeninos? un poco más adelante dices que: "muchos amuletos combinan ambas figuras, el falo en un extremo y la figa en el opuesto" como si fuesen figuras contrarias, tipo yin-yan. Yo preferiría verlo así si se puede, me queda como más simétrico, y se adapta mejor al nombre figa (genitales femeninos). Entonces el dedo pulgar asomando entre índice y medio vendría a ser el clítoris, cuyo "descubrimiento" se disputaron Columbus y Falloppio en el siglo XVII.
Bueno, no sé, me gusta más.
Gran artículo. Añado una imagen clásica:
zevlagh, ¿donde puedo encontrar más información sobre ese "lararium" (¿?) que nos muestras?. Gracias.
Es una foto de Pompeya...
Sip, muy buen artículo.
Dos curiosidades: en Aragón el órgano femenino se le llama la "figa" y uno de mis apellidos (no es uno de los primeros) es Falo (ya sé que no tendrá que ver con el falo en sí pero me ha hecho gracia verlo tantas veces escrito)
buen artículo ¡Vive Dios¡
Rosa, hay una constumbre en mi pueblo en los banquetes de boda, que puede parecer obscena y de mal gusto, pero que viene al pelo para tu artículo.
En los banquetes de las bodas, suele, el panadero hacer un pan con forma de pene (con testículos y todo) y lo rellena de leche condensada, es cuando las amigas de la novía se lo presentan delante de toda la concurrencia y la pobre le tiene que dar un bocado en la punta ante las risas y jaleos de todo el mundo..... imagínate la consecuencia del bocado....; antiguamente (te hablo de cuando se casó mi madre) les daban un vaso de leche y dos huevos cocidos, entonces eran más recatadas.
Salud,
Gracias a todos, sobre todo a ti Zevlagh por la foto. Si "habeis" más virtuosos de las imágenes, adelante!! (lo siento pero yo soy muy zote para estas cosas). Sé apreciar cualquier noticia relacionada con el tema, así que también se agradecen. Medraina: olvidas mencionar tu pueblo. Onnega: lamentarás haberme hecho esa pregunta (me tomo mi tiempo...)
Rosa aquí tienes una articulo muy interesante sobre la iconografía fálica en mesoamerica.
http://www.famsi.org/reports/20001es/section02.htm
y te mando una imagen de un dios con falo
Yo soy de Rute.
Saldu
Vista la acogida, ahí va otro clásico:
Y un detalle de la imagen anterior de Pompeya (del que me encantaría algún erudito diese más datos):
Aquí otro falo pompeyano
Exvoto ibérico masculino de bronce
Santuario de Castellar de Santisteban (Jaén)
Tienes una colección impresionante en el MAN de exvotos íberos mostrando "sus atributos".
En la última imagen de Cierzo: Hic habitat felicitas "aquí reside la felicidad". Creo que en ninguno de los casos que ilustrais se trata de lararios, que son pequeños altares domésticos, sino de relieves sobre muros o fachadas, las figuraciones que, como decía, aparecen en cualquier lugar de las ciudades romanas. El hecho de que se representen bajo estructuras arquitectónicas semejantes a templos hace sospechar que se trata de representaciones de Príapo.
Figura varonil en pie sobre una peana. Viste túnica corta con cuello en pico, ceñida por un ancho cinturón. Tanto éste como el borde del vestido se decoran con circulitos realizados a troquel. Su cuerpo con las piernas abiertas se inclina hacia adelante, acentuando su comunicabilidad. Extiende sus manos la derecha con ofrendas indeterminadas: ¿una pátera?. La figurita destaca sobre todo por el inmenso falo que le asoma del vestido. El poder mágico y fecundador del falo y el gesto de las manos se interrelacionan. Esta figura, como el Príapo helespóntico cuyo culto el helenismo extendió por el Mediterráneo, trata de proteger y estimular mágicamente la fertilidad. También el falo erguido, signo de violencia y agresividad sexual, ha podido tener un significado profiláctico, amuleto protector contra el mal de ojo. Es una figura ambigua: ¿un oferente o un dios bajo la imagen de un oferente?
Exvoto ibérico masculino de bronce. Procedencia desconocida. Conjeturalmente, Monteagudo, Murcia.
Dimensiones: Alt.: 12 cms.
Antigua colección Vives. Museo Arqueológico Nacional, Madrid.
Cronología: ¿siglos II- I a. C.? Según Nicolini, es tal vez de época romana.
Foto: Ministerio de Educación y Cultura.
Fuente: CD-ROM "Los iberos y sus imágenes"
Salud
Dificultades técnicas o problemas de equilibrio? :-))
Los albores del hiperrealismo ;-)
zevlagh, muchas gracias. ¿No sabrás en que casa pompeyana se encuentra?
Es una pena no sacar fotografía en su día, deciros que en el Museo de Nápoles en la primera planta zona erotismo se encuentra un "Lararium" con un falo muy parecido a la segunda fotografía que nos brinda el druida zevlagh a las 16:33., cre recordar que entre dos columnas. Pompeyano.
Hmmm... tendría que mirarlo en la guía, a ver si para mañana te lo puedo decir con seguridad.
Rosa-ae, como demostrar una cosa u otra supongo que va a ser muy difícil, retiro la pregunta. Es que no sé muy bien cómo se podría enfocar el asunto, he estado mirando por ahí y no hay mucho sobre imágenes de los genitales femeninos en la antigüedad, he encontrado este artículo que me pareció bien y con referencias a estudios clásicos sobre el tema, pero son libros imposibles de conseguir, y al artículo le faltan todas las fotos, que además imagino que no tendrán la precisión anatómica suficiente para aclarar nada:
LA IMAGEN DEL CUNNILINGUS EN LA ANTIGÜEDAD CLÁSICA
Juan Francisco Martos Montiel
Universidad de Málaga
http://www.anmal.uma.es/anmal/numero11/Martos.htm
Saludos
Abo,
El lararium está en la Via de la Abondanza, junto a la casa que tiene pintados en la fachada a Jupiter, Mercurio, Apolo y Minerva (sobre fondo amarillo).
Sé que no es mucho, y además no estoy seguro, pues Pompeya es muy grande, para regocijo del que suscribe.
Zevlagh,
Gracias, se trataba solamente como curiosidad. En esa calle creo que el principal Decumanos de la ciudad se encuentra en el suelo (relieve ) indicando la dirección de la calle de uno de los Lupanares (quizá el de 2ª cat.) un Falo para mi de los más interesantes, aunque sin mérito alguno por su sencillez.
Para este tema me viene a cuento sin quererlo este tipo que me traigo hoy de paseo.
Os presento al gigante de Cerne Abbas, en Dorset, Inglaterra. Está grabado en la ladera de una colina. No se sabe quién lo hizo, cuando ni para qué. Las mujeres que querían concebir pasaban una noche solas en la colina, preferentemente junto al falo. Y las parejas jóvenes practicaban el chacachaca precisamente sobre el falo, con el mismo objetivo.
Algo similar en funciones a ciertos petroglifos gallegos.
Pero vamos, se trata de un falo con función específicamente fertilizante, no es que tenga mucho que ver con fascinaciones ni con "agüeyamientos" (del ast. güeyu: "ojo").
Salud-os
Amuletos fálicos, Extremadura, Museo de Cáceres
(Click sobre la imagen para ampliar)
El de abajo combina un falo y una figa dispuestos de tal forma que sirven de brazos de una figurita que se completa con tronco (con indicación del ombligo), cabeza (con pelo y ojos) y lo que podría ser como la corona de un santo (anillo para colgar). Fui a San Andrés de Teixido con la intención de encontrar algo parecido pero nada. Esos grabados en zig-zag que recorren los brazos de la figurita y las líneas incisas en la corona y el pelo aparecen también en las figuras de miga de pan. El ombligo se hace también igual en este amuleto y en los sanandreses. A ver si Per o Rosa me pueden aclarar algo, aunque con esta foto tan mala... Gracias por adelantado
Aquí van otras representaciones de los órganos:
ESPAÑOL GAELICO IRLANDES GALÉS INGLES SANSCRITO
Pene=Picha=Pija pic pic pyg pitch=lanzadera
Vulva bolaigh=olorosa buli=vulva
Vulva gobhal=horcaja fork
Tb en piamontes decimos "pichu"
Perdón, el mensaje anterior era un cuadrante que se ha deshecho.
Las distintas expresiones que tenemos para referirnos al pene, picha y pijo, parece que tienen alguna similitud con la palabra gaélica pic, con el galés pyg y con el inglés pitch=lanzadera.
La palabra vulva tiene su equivalente en el gaélico bolaigh y en sánscrito buli, con un significado de "la olorosa".
Todavía en inglés actual se llama bishop ="obispo" al pijo (to bang the bishop ="cascársela"), y a la vulva se la denomina como honey pot ="tarro de miel" (por lo del olorcito). Lo de honey dirigido a una mujer, por tanto, que se oye en tantas canciones, no tiene una traducción tan inocente como la que se le suele dar: "cariño", sino que va cargado de un inequívoco toque sexual...
dasagis19 de mayo de 2008Información eliminada por el Administrador Silberius
dasagis23 de jun. 2008Información eliminada por el Administrador Silberius
Hay 30 comentarios.
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