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CáCERES Plasencia
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El Valle del Jerte

El Valle del Jerte es una ruta natural desde la prehistoria, que pone en comunicación las tierras altas de Castilla con los llanos de Extremadura,aprovechada como camino romano y como cañada de ganados trashumantes. No faltan además castros prerromanos,como el de Los Riscos de Villavieja y El Berrocalillo, villas romanas, pueblos serranos con típicas casas de piedras unidas con gruesos maderos de roble y castaño, chozos de pastores,arroyos trucheros y pasos de bandadas de palomas torcaces.

A lo largo de la gran falla de Plasencia, de dirección NE-SO,el río Jerte ha realizado este impresionante valle donde la primavera se nos muestra en todo su esplendor el Día del Cerezo en Flor. (Ver imágenes).

Naturaleza,historia y etnología aunadas en un marco incomparable.

Cómo llegar y horarios

Madrid-Navalmoral de la Mata-Plasencia-Tornavacas.


El poblamiento fue geoposicionado por jugimo.


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Comentarios

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  1. #1 Reuveannabaraecus 27 de sep. 2005

    Valle del Jerte: en Extremadura, considerada casi unánimemente como la comarca de mayor belleza natural, sin menospreciar a otras igualmente hermosas como puedan ser La Vera o el Valle del Ambroz, pero es que lo que éstas últimas sólo tienen por un lado (y que es un tesoro en el contexto paisajístico de Extremadura): alta montaña y sinfonía permanente de agua, el Valle del Jerte lo tiene por los dos: de hecho, se encuentra entre ellas. Pues, de un lado, este Valle se encuentra flanqueado por los imponentes Montes de Traslasierra, que lo separan del Valle del Ambroz y que culminan hacia el norte en el canchal del Calvitero, ya en la Sierra de Candelario (para los bejaranos, "de Béjar"), que con sus 2.401 mts. sirve de divisoria entre las provincias de Cáceres, Salamanca y Ávila y desde el cual la vista es inabarcable e indescriptible; y, del otro lado, el Valle se apoya en los murallones graníticos de la Sierra de Tormantos, que divide sus tierras de las veratas y que, ya convertida en Gredos, alcanza su máxima cota extremeña en La Covacha del Losar con 2.399 mts. El río Jerte, con sus impetuosos afluentes de montaña por ambos lados ("gargantas"), avena el espacio entre ambas cordilleras y ocupa la cota más baja de esta enorme falla perfectamente observable en cualquier fotografía-satélite de la Península Ibérica y que se prolonga en dirección suroeste hasta alcanzar el mar en Odemira (Portugal).

    Por motivos familiares conozco bien el Valle del Jerte y viajo a él con frecuencia. Con el frío del alba en el rostro como con la modorra de la tarde estival, he recogido cerezas encaramado a árboles inverosímiles. He sentido el seco pinchazo del erizo de la castaña al ir a extraer el suculento fruto. He experimentado la obcecación de la lluvia concentrada precipitándose de las montañas y desbordando el cauce del río y las gargantas. He subido al Camocho (Traslasierra) y a la Panera (Tormantos) y mi vista se perdía, en uno, hasta la lusitana Sierra de la Estrella, y en la otra, hasta las mismas Villuercas. Y he vivido la calurosa amistad y el alma festiva de sus gentes trabajadoras, saboreando un "tostón" o un cabrito sabiamente guisados, degustando unos "calbotes", paladeando una copa de "gloria" o de un aguardiente de cereza como, estoy seguro, no lo hay en ningún otro rincón del mundo. En fin, qué podría yo contar sobre esta comarca a la que sólo se me ocurre aplicar un calificativo: inigualable.

    Para terminar, acerca de lo que comentaba Brandan acerca de lo depresivo que puede llegar a ser vivir entre altas montañas, comentar simplemente que, en mi personal opinión, el Valle del Jerte, siendo como es comarca muy montuosa, es sin embargo "tierra abierta" en comparación con la comarca donde habito: Las Hurdes. Efectivamente, en el Valle del Jerte, los enormes paredones montañosos que hemos citado ocultan el horizonte por varias direcciones, pero no por todas: mirando hacia el suroeste, siempre veremos abrirse el paisaje en torno a Plasencia, y mirando hacia el nordeste vislumbraremos cielo castellano a través del inmenso boquete del Puerto de Tornavacas. Sin embargo, en el fondo de los valles de Las Hurdes no hay hacia donde "abrir" la mirada más de unos pocos kilómetros (en el mejor de los casos), a no ser que se suba a una altura considerable. Y es que el Valle del Jerte es eso, un valle, amplio y grandioso pero sólo uno, mientras que Las Hurdes están formadas por uno de los más intrincados y laberínticos nudos montañas y valles de toda la península, capaz de mandar sus aguas en dirección contraria a la de casi todas las demás de la vertiente atlántica.

    Saludos a todos y agradecimientos al paisano jugimo por este poblamiento.

  2. #2 Brandan 03 de oct. 2005

    He consultado el artículo sobre el topónimo "xeriz" en Celtiberia y la verdad es que no me aclara mucho. También he revisado un poco la Web y en lugar de resolver mis dudas, las he acrecentado. Lo único que me parecía claro hasta el momento era el topónimo Jerte, procedente de xerit o xerete, término con un doble significado de aguas cristalinas y lugar estrecho o angosto. He leído que hay quien lo hace derivar del griego xerte, pero esto ya me parece excesivo.
    He estado buscando una página que traduzca del español al árabe o viceversa y no la encuentro y aún encontrándola, haría falta saber que árabe se hablaba en la época y en la zona.
    Explicaré el por qué de mis dudas. Encuentro un texto de un asunto de linderos en Durcal (Granada) en el que dice:
    "Desde el dicho mojon dela Cruz ba prosiguiendo el termino hasta otro mojon, que por mandato del dicho Señor Juez se hizo enel pago que dicen del <> , que es en un Valdio, e mas adelante se hizo por mandato del dicho Señor Juez otro mojon enla la dera deuna cuesta, que se dice Cuesta dela manteca enlinde de una haza de Yñigo Muñoz vecino de Durcal, e mas adelante en lo llano de la dicha cuesta se hizo otro mojon por mandato del dicho Señor Juez, e alli se acavo de delindar con el dicho Lugar de Lofuela hasta un mojon, que el dicho Señor Juez mando hacer en una Cañada por donde ba un arroyuelo seco junto auna retama, e pasa el dicho varranco, e Cañada, e arroyo, e prosigue hasta otro mojon, que por mandado del dicho Señor Juez se hizo entre un retamal do llaman <> , e mas adelante do dicen la Vacauna se hizo otro mojon, e de alli prosigue el dicho termino hasta una era, que por alli no ai otra, que esta ala vista del Lugar de Concha encima de Barcatala donde por mandato del dicho Señor Juez se hizo otro mojon grande, e alli acavó de deslindar conel dicho Lugar de Lojuela, desde aqui proseguia la mojonera de Durcal con el Lugar de Concha, e por ser tarde, e no estar alli los vecinos de Concha no se prosiguio mas enla dicha mojonera, ese bolvio al dicho Lugar de Durcal testigos los dichos desuso, e Chriptoval de Morales, e Francisco deCastro vecino de Melexis = El Licenciado Jusepe Machuca = Antemi Antonio Perez Escribano"

    Como vemos, se aplica el término a un valdío y a un retamal. Nada de aguas cristalinas al parecer, en el primero que es un valdío y sí en el segundo en el que menciona un barranco, una cañada y un arroyo.
    Queda pues en entredicho la traducción "aguas cristalinas".
    Vuelve a aparecer el término en un documento sobre la edición de un lunario, que transcribo:
    "En este repertorio se añade algo de pronósticos del Bachiller Juan Ramon de Trasmiera y de Domingo Redel de Alcaraz. Al fin se lee: «Fenesce el repertorio de los tiempos». Síguese un lunario del Maestro Bernardo de Granolias, desde el ano 1531 hasta el de 1550, y al fin del libro dice: «Fenesce el repertorio de los tiempos sin el lunario, el qual ha seido agora nuevamente en muchas partes añadido, y en las conjunciones y llenos por transumpto muy verdadero, corregido de muchas faltas que por el discurso del tiempo tenía. Fué impreso en la muy noble y leal ciudad de Búrgos, en casa de Juan de Junta, impresor de libros: acabóse á cuatro dias del mes de Enero de 1531 años».
    Es tomo en 8.º, sin foliaciones, que estaba con el Enchiridion de Fr. Alonso Venero en la librería del Real Convento de Santo Domingo de Zaragoza. MMM. 140, y esta edicion infiere otra anterior. Despues se reimprimió con dichas adiciones y dedicatoria en Zaragoza, ano 1534, y se vale de ella en el <> su autor Bartolomé Gutierrez, edicion de Sevilla, 1755, pág. 123; advirtiendo: «que para el asunto que allí trata, presentará el Kalendario que trae en su Repertorio Andrés de Si (debe ser de Li), ciudadano de Zaragoza, impreso en 1534»."

    Aquí se emplea para nombrar un "año xertit ense". Lo que acrecienta, como digo, mi despiste.

    En cuanto al castillo de Xerit, creo que Jugimo adelanta bastante descartando La Atalaya, yo aporto otro texto por si ofrece alguna luz.

    XERIT SERÁ LA FUTURA PLASENCIA
    "Es muy interesante el lugar donde Fernando II firma el anterior documento, Xerit. Veremos como este topónimo aparece después en 1197 citado en el deslinde de Almenarella y Santa Cruz que Fernando II cita en su donación al conde de Urgel don Armengol: "...por el camino de Almazzayde el cual viene de los confines de Xerit..." y también: "...según va del Guijo y Xerit a la Athalaia de Cajabuyo...". Coincide perfectamente con el deslinde y se puede ver en el documento que ponemos en su tiempo correspondiente Y es normal que ande por estos lares el rey Fernando II, a meter en cintura a Nuño Rabia y sus abulenses cuando se entera de sus andanzas y peronias con los paisanos de Ávila (del bando contrario, Laras y amiguitos de su sobrino Alfonso VIII). Tal vez aquí coincida el suceso que cuenta en su manuscrito José María Barrio y Rufo citando al padre fray Luis de Ariz: "Que sucedió en Ávila y su obispado haber mandado un caballero, que tenía una torre y castillo, gente de guerra de la ciudad de Plasencia y de la villa de Béjar, para entregárselos, porque el concejo de Ávila lo quería prender. El caballero era Nuño Rabia, natural de Ávila, de la familia de los marqueses de las Navas". El rey don Fernando de León, que fue el que edificó Ciudad Rodrigo el año 1170, andaba muy indignado con Nuño Rabia (No olvidemos que este personaje ya tuvo un fatal encuentro en 1163 con Fernando II cuando llegó con sus gentes de Ávila ayudando a los de Salamanca para ir contra los de Ciudad Rodrigo siendo derrotados por el rey) y otros vasallos suyos. El Nuño Rabia se hizo fuerte con otros amigos en el castillo de Peñaflor, donde se le reunió como amigo Martín Martínez Malo, que después fue freire de Calatrava. Habiendo salido un día de caza Nuño Rabia, vuelto de ella, Martín Martínez Malo no le permitió entrar en el castillo. Visto su proceder por Rabia, pasó al puente del Congosto y se apoderó de sus torres. Y acto seguido pidió socorro a los concejos de Plasencia y Béjar. Y les decía que, si lo auxiliaban, se los entregaría. Tal luego como los concejos de Plasencia y Béjar recibieron el aviso, montaron a caballo con sus enseñas alzadas y se dirigieron para referido punto y tan a la ligera que, en día y noche que recibieron el aviso, anduvieron catorce leguas, de suerte que al siguiente día eran ya en compañía de Nuño Rabia y señores de expresadas torres. Estas estaban seis leguas de Burgohondo, que aquí llaman Abadía. Los de Ávila recibieron noticia de lo hecho por Rabia y sin demora salieron para quitárselas. Pero su obispo Domingo Blasco los siguió, con objeto de evitar todo choque. Para su consecución habló a sus abulenses, quienes le pidieron se presentase a Nuño Rabia y demás, e intimase al momento les entregase las torres y abandonasen la tierra de Ávila. De lo contrario estaban dispuestos ha hacerles mucho mal. Así lo hizo el obispo, pero no le quisieron atender y sí le mandaron que, si en el instante no marchaba, le herirían en la corona. Por cuyas palabras tan desatentas el obispo, enfadado, les dijo: Dios os quebrante tanta soberbia y orgullo. La pelea se realizó; la que fue grande y hubo gran mortandad. Después de la cual se hicieron amigos y Nuño Rabia entregó las torres a los de Ávila. Y los concejos de Plasencia y Béjar se volvieron a sus casas con honor. Dicho obispo Domingo Blasco murió el año de 1182. Así lo dice el maestro Gil González Dávila, en el libro I, capítulo 7, de su historia de Ávila."
    Es un poco largo, pero el lance me parece tan interesante que lo transcribo entero.
    La verdad es que este valle cada vez se hace más enignático.
    Un saludo.




  3. #3 Reuveannabaraecus 04 de oct. 2005

    jugimo: Pero, compañero, ¿cómo voy yo, humilde latinista rural, a enmendarle la plana a "la cabeza mejor amueblada de Celtiberia"? Nada más lejos de mis pretensiones, ¡líbreme quien no digo! Únicamente que los "muebles" tienen distintos estilos, los estilos van con los gustos y, para gustos... los colores. Me refiero a que sobre los temas de su dominio nunca polemizaría con esta persona, pero otra cosa es la ideología política de cada uno, sobre lo que nadie puede darle lecciones a nadie: cada uno tenemos la nuestra, y, en una sociedad democrática y plural como se supone que es ésta, el mismo derecho a expresarla. En contenidos puedo reconocer y aceptar magisterios, pero en ideología... de nadie.

    Pero, bueno, volvíendo al tema que nos ocupa, y para que esto no se convierta en un partido de tenis entre tú y yo, puesto que nuestro compañero Brandan también está manifestando su interés en la cuestión con elaboradas y documentadas intervenciones, te comento:

    -Ea, descartemos, pues, la ubicación del Castillo de Xerit en La Atalaya, puesto que yo, como dije más arriba, conozco la zona, pero no el yacimiento concreto, que según tu testimonio directo (que, como tal, hacemos prevalecer) no pasa de los restos de una humilde atalaya que no llega a la categoría de castillo; sería eso, una simple atalaya subsidiaria tal vez del castillo que nos ocupa y, eso sí, de innegable valor estratégico por su posición inmediata a la confluencia de Alagón y Jerte y su situación en la ruta Plasencia-Coria.

    -La Patúa lo había considerado exclusivamente por haberlo tú propuesto, jugimo, pues, aunque no se me escapa su ubicación, tampoco en este caso he tenido ocasión de visitar el poblamiento concreto. No obstante, me extrañaba que pudiera ser el lugar del Castillo de Xerit, toda vez que, según tú mismo comentabas, sus hallazgos correspondían a las épocas tardorromana y visigoda, pero no hablabas de ocupación posterior. De modo que, si tú que lo habías propuesto lo descartas, descartado queda sin mayor problema.

    -Lo de una población llamada Ambroz como antecedente de Plasencia recuerdo haberlo leído en algún sitio (incluso algunos, fantasiosamente, llegaron a decir que había sido fundación de griegos procedentes de "Ambracia" en el Epiro: una de esas falsas etimologías mitologizantes difundidas en su día por el capellán de turno). ¿Nos podías dar, jugimo, la referencia exacta del texto donde aparece documentada Ambroz en el emplazamiento de la futura Plasencia (simplemente porque no la recuerdo)? Es que aquí se nos plantea un enigma similar al de "Jerte" río y pueblo, pues, como bien sabéis, Ambroz es el nombre de un río, también llamado Cáparra, afluente del Alagón por su margen izquierda y que nace en la Serranía de Hervás, localidad esta en que ya se le llama "Ambroz". ¿Qué relación tendría, entonces, su nombre con el de la aldea homónima considerada antecedente de Plasencia, si tenemos además en cuenta la relativa lejanía entre ambos? Otro tema interesante para investigar y debatir...

    -De modo que estoy contigo, jugimo, en que va a ser el emplazamiento más probable para el Castillo de Xerit ese "canchal de la encina" (¿o era un alcornoque?) a que antes nos hemos referido, próximo a Plasencia y al Jerte.

    -Brandan: aparte de Ojalvo (y su "Campana"), existieron otras poblaciones en el Valle del Jerte hoy también desaparecidas, de las que igualmente sería interesante aportar aquí más datos:
    ASPERILLA: sobrevivió a duras penas hasta principios del siglo XIX; estaba situada a la orilla del río, por tanto en el fondo del Valle, entre las Casas del Castañar y El Torno.
    PEÑAHORCADA: se despobló tempranamente, en el siglo XV, según la tradición popular por una plaga de termitas; ocupaba un lugar también ribereño del río, equidistante entre Navaconcejo (que incorporó su antiguo término) y El Rebollar.
    VADILLO: a poca distancia río arriba de Cabezuela del Valle, desapareció definitivamente también a principios del XIX; todavía hoy se pueden apreciar los restos de su iglesia parroquial.

    Bueno, pues nada, quedo a la espera de vuestras suculentas aportaciones. Saludos.

  4. #4 Brandan 17 de oct. 2005

    Quiero comenzar este comentario agradeciendo, a las personas que se incorporan, la colaboración que prestan a este foro con sus intervenciones.
    Me he tomado una pausa para releer lo escrito y recapacitar un poco sobre la cuestión; además de hacer una visita rápida a Granadilla que me ha impresionado muy gratamente.

    En mi opinión, una secuencia ordenada para el estudio del valle vendría muy bien para aclararnos sobre el asunto y dar un repaso al estado de la cuestión, labor que nadie me ha encomendado, pero que, con su permiso, me atrevo a intentar.

    Haremos en primer lugar un intento de clarificar la situación de la cabecera del valle y trataremos, estableciendo una secuencia temporal, de afrontar el enigma (para mí al menos empieza a suponerlo) del Valle del Jerte.

    Comencemos por la vertiente del Aravalle. Al prefijo Ara se le atribuye un origen prerromano, así como a Torm y Nava, tan abundantes en estas tierras, dejo a los especialistas de este foro el análisis profundo de este asunto. Para el tema que nos ocupa, me inclino por pensar que Tornavacas, del que volveremos a hablar ya como villa, procede de los usos ganaderos, no necesariamente trashumantes, que se practicaban en la zona, al modo de Villa-Toro y otros semejantes.

    Tenemos, oponiéndose al Valle del Jerte, la vertiente de otro río, el Aravalle, con nacimiento en la Trasierra de Candelario.

    Cerca de esta zona hay constancia de presencia humana, suponemos que itinerante, desde el Paleolítico superior (Cerro del Berrueco - Yacimiento de la Dehesa sobre el Arroyo Colmenar) y presencia constante de población, al menos desde el neolítico (La Mariselva, La Ladera Alta, El Collado, Las Cabezas Altas), siguiendo por el calcolítico (La Horcajada, Encinares, Valle Hondo, El Losar, EL Barco de Ávila, Los Llanos, La Aldehuela, Becedas, Gilbuena), la cultura de la cerámica campaniforme (El Collado, El Berrueco, Vallehondo), y de la edad del hierro (Las Paredejas, Los Tejares, etc...). No vamos a referirnos a los vettones para no entrar en polémicas que no aportarían nada al enfoque del debate.
    Ruego a Vettonio que me corrija, si es necesario, sobre los datos que aporto.

    De origen romano parecen ser dos sepulcros hallados en Navamorisca. Aparecen también algunas monedas diseminadas por diversos pueblos del entorno y se hace mención de una lápida con inscripción encerrada en la fábrica de una Iglesia. Pocos datos que no ayudan a mantener la teoría de una población estable o dominación romana continuada. La proximidad de la zona en cuestión a la Vía de la Plata, aconseja no descartar algún emplazamiento de control en la zona.

    Jesús Antonio González Calle, en un extraordinario trabajo de campo, realizado con su hermana María de los Ángeles, titulado Despoblados en la comarca de El Barco de Ávila y publicado por la Institución Gran Duque de Alba, sobre el que se apoya una parte importante de este comentario y del que se puede obtener abundante bibliografía sobre estudios realizados en la zona, sugiere que el antiguo paso del Tormes se haría sobre un puente romano cerca de Vallehondo, que unía las cuencas del Becedillas y el Caballeruelos y pasando por La Carrera (topónimo que designaría una calzada) y ganaría, por el Puerto de Tornavacas, en el que asegura que existen restos de un empedrado, el Valle del Jerte, siguiendo el cauce del Aravalle. Es reseñable el hecho de que aquí comienzan los caminos que reparten los ganados trashumantes a los agostaderos serranos.


    De la presencia visigoda no parecen haberse recogido muchos datos, algún autor sostiene que las élites godas podrían haber mantenido rebaños de ganados en las zonas altas del valle del Alberche y del Tormes. Sí es posible situar una posible ermita visigoda, o al menos la indicación de su existencia anterior, en el pueblo de La Herguijuela, atendiendo a la teoría de Jugimo, a mi juicio muy acertada, sobre guijos y herguijuelas sugerida en otro foro de Celtiberia.

    La dominación árabe y la posterior reconquista del territorio, parecen haber dejado profunda huella en la toponimia de la zona. Repárese en el nombre del pico más alto de la siera de Gredos, el Almanzor.
    El Barco de Ávila, fue fortificado entre los siglos XII- XIV, para defender el paso sobre el Tormes, y puede considerarse verdadera zona de frontera durante un período dilatado de la reconquista. Las referencias a San Pedro del Barco, un anacoreta, que más que un religioso cristiano, parece un auténtico druida, y que, solo su entierro merecería un monográfico en otro foro, datan del siglo XII. Baste decir que se comunicaba, según la leyenda, con San Pascual de Tormellas, a través de una cierva. Nótese que la presencia del santo es anterior a la fecha de repoblación “oficial” de estas tierras.
    Aquí se libraron batallas como la de la Vega del Escobar, ya mencionada, que algunos atribuyen a Fernán González y otros a Ramiro II, lo que lleva a dudar a algunos de la existencia de la misma. Lo que parece probable es, desde luego, una dominación dilatada del territorio y un hostigamiento posterior más o menos constante por parte de los musulmanes. En Santiago de Aravalle, en la cabecera del puerto, hay una talla de Santiago Matamoros, que lo representa tan rampante sobre los infieles como pudiera serlo en sus mejores épocas. Otro castillo fronterizo, en el mismo ámbito, cuyos caballeros parece que tuvieron no poca importancia en las campañas contra Plasencia, es el del Puente del Congosto, aguas abajo del Tormes y no muy lejos de La Horcajada y El Barco de Ávila, pero ése es ya otro valle.

    Sugiere J.A. González Calle la posibilidad de que las dificultades halladas por Alfonso VI para someter a bandas de moros, diseminadas por el territorio, que recogen las fuentes, fuese en realidad una resistencia de la población autóctona, de pastores semi trashumantes, que hubieran podido permanecer en las majadas serranas con sus rebaños, cambiando de lugar cuando era preciso; y que se oponían a una dominación externa de la índole que fuese. Y recogiendo otras opiniones, aventura la posibilidad de que fueran estas gentes quienes formasen los primeros núcleos de población en las cumbres serranas que dieron lugar a poblaciones posteriores de más entidad, creadas con la llegada de una segunda oleada de repobladores, éstos ya norteños, e incluso que estas tierras aportaron, elemento humano para la repoblación de ciudades como Ávila y Salamanca.

    Es pues el Aravalle un río de poco recorrido pero de importancia considerable en el aporte de caudales hidráulicos e históricos. Se une al Tormes muy cerca de El Barco de Ávila, en el Puente de las Aceñas, donde están datadas dos ermitas, una a cada lado del puente, hoy desaparecidas.


    En resumen, tenemos aquí un territorio muy poblado desde antiguo y sujeto al control, más o menos continuo, de las huestes cristianas desde el siglo XIII y que no dejaría de ser frontera de la Extremadura ni siquiera a partir de la toma de Plasencia.

    Algunos topónimos, del cauce del Aravalle, que relaciono a continuación podrían ofrecer a los expertos un motivo para ilustrarnos algo más.

    Pueblos:
    El Barco de Ávila – Confluencia del Aravalle con el Tormes –Se relaciona con una antigua barca que cruzaba el Tormes. – Algunos defienden de un posible prefijo celta “Barc”.
    La Carrera – Podría indicar la existencia de una calzada o carrera hacia Tornavacas.
    La Cereceda – Aunque no está en el cauce, la incluyo aquí por la relación con el tema que nos ocupa. Actualmente no hay plantaciones de cerezos.
    La Retuerta y La Canaleja – Podrían indicar efectos de la acción del río en esas zonas.
    Umbrías – Situado en la umbría. Lugar sombreado.
    Casas del Abad – Probablemente propiedades del superior de alguna abadía. No hay constancia de abadías en la zona.
    Las Hustias – Se relaciona con Justias o Justas
    Gil García – Se atribuye a un personaje que aportó su esfuerzo en la batalla de la Vega del escobar, muy cercana. Podría ser simplemente el fundador del pueblo.
    Casas del Rey – Algunos lo relacionan con la famosa batalla, otros con la pernoctación de Carlos V en su viaje a Yuste.
    Solana de Ávila – Antes Solana de Béjar. A solana, lugar soleado. Contrario a la umbría. De hecho los dos pueblos están casi enfrente.
    Santiago de Aravalle – Parece que hubo una época en que aquí Santiago cerraba verdaderamente España.
    Puerto Castilla – A un par de kilómetros de la cabecera del Valle. Quiero recordar un comentario de la doctora Canto sobre otro Puerto de Castilla, en otra Extremadura. Un indicador repetitivo, algo así como lo de las Trasierras.

    Y así llegamos a la cima del puerto. Aquí no se constata, que yo sepa, ningún poblamiento, castro, ermita, castillo o torre. Hay una edificación de factura muy reciente. El resto es despoblado. Desde el mirador de este alto se obtiene una de las más espectaculares vistas del Valle del Jerte. Sin embargo, resulta muy difícil imaginar el lugar sin una torre de vigilancia que controlase las invasiones enemigas, incursiones de bandoleros y cuatreros, vigilancia de los ganados de La Mesta, cobro de portazgos etc... ¿Existió o existieron edificaciones defensivas? Ni las fuentes escritas ni las orales, de las que yo tengo conocimiento, transmiten noticia alguna. Sin embargo, el siguiente texto podría darnos alguna pista:

    “El hecho de que la Reconquista y Repoblación se llevaran a cabo en diversas fases y por gentes de variedades dialectales distintas, castellanos y leoneses, ha tenido influencia en las diferencias lingüísticas dentro de la propia región. En sendos estudios monográficos sobre el tema, Ángel Bernal Estévez (9) y Juan Luis de la Montaña Conchina (10) han analizado cómo se fue poblando y conformando la región entre los siglos XIII y XV. Analizando la población del espacio que hoy conocemos como Extremadura, Ángel Bernal concluye que existía un gran despoblado en una franja vertical al este que iba desde el Valle del Jerte a la Serena. Como señala el autor, “nos encontramos aquí con un gran desierto demográfico, salpicado de torres vigías o castillos defensivos, que definen la zona como marginal y fronteriza dentro del reino aftasí” (11).

    De la segunda mitad del siglo XII a 1212 la Reconquista avanza hasta el Tajo. Las zonas más al este de Extremadura son repobladas por gentes venidas de Castilla. Para facilitar las tareas repobladoras se funda la ciudad de Plasencia con colonos venidos de la vecina Ávila a través del corredor del Valle del Jerte (12). Como señalan los dos investigadores, al lado de los pobladores cristianos se asientan también importantes colectivos mudéjares y judíos (13). Alrededor de Plasencia, fundada en 1181, se van consolidando pequeños núcleos rurales en los valles del Ambroz, Jerte y en la Vera que han pervivido hasta nuestros días. Después de la batalla de las Navas de Tolosa (1212) se da un nuevo avance en la Reconquista, esta vez por parte del reino de León. Una vez que los cristianos consiguen llegar al Guadiana, la Reconquista avanza en gran medida por el papel desempeñado por las Órdenes Militares que facilitaban y organizaban la repoblación de las diferentes zonas (14).”
    http://www.ucm.es/info/especulo/numero26/extrem.html
    Irene Sánchez Carrón

    De épocas anteriores, en el fondo del valle, no encuentro dato alguno. Se agradecerían aportaciones. Otro resultado ofrecerá el estudio de los pueblos situados en los altos de las sierras que cierran el valle y que deberían merecer más atención por nuestra parte en el futuro, con el ánimo de completar una idea.

    Tengo algo sobre la villa de Tornavacas pero conviene completarlo.
    Les dejo contemplando el valle y me disculpo de antemano por la extensión del comentario, en especial con Reuveannabaraecus que ya me ha hecho notar alguna vez que la brevedad no es mi fuerte, que espero no les resulte demasiado aburrido. Un cordial saludo

  5. #5 Reuveannabaraecus 22 de oct. 2005

    Obeid: la obra a que hacía referencia antes pasó por mis manos hace años, pero no la tengo en mi biblioteca; se titulaba algo así como "Las vías (¿o "calzadas?) romanas en Extremadura: La organización del territorio", y no recuerdo el autor. Lo siento, pero he estado más de media hora buscando en los fondos del Servicio de Publicaciones de la Universidad de Extremadura y, según puedes comprobar tú mismo (http://www.unex.es/servicios/servicio_publicaciones/), no aparece hoy por ningún sitio: debe de estar descatalogada. Sí que recuerdo haber extraído de ella informaciones interesantes para mis clases de Latín y Cultura Clásica, como un completo mapa de las calzadas romanas en territorio extremeño, de donde procede el dato que mencioné más arriba.

    Efectivamente, este ramal que comunicaba la vía romana del Valle del Jerte con la Vía de la Plata cruzaría Traslasierra por la depresión existente entre el Gordo (997 mts.) y el Pitolero (1.350 mts.), concretamente por su punto más bajo, el Puerto de Sangamello, ya mencionado más arriba. No creo, empero, que subiese hasta el Collado de Piedras Labradas (Jarilla), pues queda bastante más al norte de la dirección hacia Cáparra, aparte de ser un lugar ya bastante elevado, en torno a los 1.000 mts. sobre el nivel del mar.

    El Collado de Piedras Labradas se sitúa en el camino de El Torno a Casas del Monte, en término municipal de Jarilla y, por tanto, con vistas ya al Valle del Ambroz y a las Tierras de Granadilla. Este yacimiento ha sido investigado por Alvarado Gonzalo, M. et alii ("Homenaje a José Mª. Blázquez", Hispania Romana II, ed. Jaime Alvar, Madrid, 1998), que, acerca de su dedicación, concluyen: "[...] podemos conjeturar que el Collado de Piedras Labradas pudo ser un santuario indígena, "locus sacrum liberus", consagrado a alguna divinidad de las fuerzas de la naturaleza. Las condiciones físicas del emplazamiento, altura, bosques, agua en abundancia... imposibilitan la determinación precisa del carácter del numen. La romanización de la zona, motivaría un proceso de sincretismo religioso que culminó con la construcción de un templo típicamente romano. De hecho, la zona geográfica que nos ocupa constituía parte del área de influencia de la ciudad de Cáparra, cuyos orígenes indígenas son evidentes tanto por las fuentes clásicas [...] que la incluyen dentro de las ciudades estipendiarias de la Lusitania, como por los hallazgos arqueológicos [...]".

    Salud :-)

  6. #6 Reuveannabaraecus 23 de oct. 2005

    Obeid: mesa camilla sí, cómo no, pero ya, ¡ay!, sin brasero de picón. En su lugar, puedo ofreceros una confortable exedra ante una no menos acogedora chimenea donde crepitan orondos tueros de encina jurdana. Lo del Forlady no, eso ya tuve que sufrirlo antaño en el hogar parental.

    De los lugares de que hablo, unos los he pateado y otros no, supongo que como todos vosotros; de los primeros suelo hablar con más atrevimiento que de los segundos, pero siempre intento hacerlo prudentemente pues, hasta ahora, mi bagaje intelectual se ha sustentado más en las letras que en las piedras; en aquéllas soy profesor, en éstas simple diletante...

    Jugimo: respecto del templo romano de Fuentidueñas (Plasencia), añado a lo que comentas la referencia que Alvarado, García-Hoz y Glez. Cordero hacen sobre el mismo en el trabajo que mencioné más arriba:

    "La "aedicula" de Fuentidueñas, a cinco kilómetros al sur de Plasencia y a escasos metros de la carretera nacional 630, conserva de época romana el "podium" y un zócalo con moldura. El edificio fue reconstruido durante el siglo XV como parte de una iglesia que aún se conserva, si bien es empleada como cochiquera y pajar. Su planta original es también de reducidas dimensiones (8,70 por 9,80 m.) y de forma rectangular, con "cella" y "pronaos". Pese a no conservarse el alzado podemos suponer una cubierta a dos aguas con tejado de "tegulae" a juzgar por la gran cantidad de éstas esparcidas por las inmediaciones".

    Estos conocidos arqueólogos extremeños mencionan también el "reciente hallazgo" (la publicación es de 1998) de una edificación similar a la de Fuentidueñas y a la de Piedras Labradas en el término municipal de Cabezabellosa, concretamente en el Collado de la Lobosilla y, por tanto, en el área de esa "vía 22, Jerte-Cáparra" que comentábamos antes.

    Por último, amigos, la alusión de Obeid respecto del culto del templo de Piedras Labradas en el epígrafe aducido, me hace fijarme en ese inquietante *Agathas (del griego Agathé "buena", "honrada", etc., pero a saber qué habrá detrás en este caso): Sierra de Gata, rio Águeda, río Agadón, Cespedosa de Agadones, Agallas... Todos estos orónimos, hidrónimos y topónimos se esparcen, podréis comprobarlo en un simple mapa de carreteras, por el área más occidental del Sistema Central en territorio español, llamada precisamente Sierra de Gata, y todos ellos parecen esconder, si no un origen común, formantes léxicos similares (alguno incluso hizo derivar Gata de *Agatha). ¿Podríamos insinuar la presencia de un teónimo en la región de los vetones, presente en la dedicación de templos como el de Piedras Labradas, y cuyo nombre hubiera sobrevivido en algunos topónimos como los mencionados? Propuesta arriesgada, pero sugerente... ¿Qué os parece? Aunque nos transporte un poco más al oeste de nuestro Valle del Jerte...

  7. #7 Brandan 01 de nov. 2005

    Muchas gracias Eyna por la información sobre el documental, sería interesante saber como podemos adquirirlo o donde puede verse.

    He estado husmeando un poco sobre El Valle esta semana y me he dado una vuelta, aprovechando una visita a Cáparra, otra vez por esos lugares, lo que me anima a seguir con los comentarios.

    Un dato; recordaréis que hacía una diferenciación, teniendo en cuenta características geográficas, de población y de usos, entre la zona alta y la zona baja del valle; esto es, entre la zona que va de Puerto Castilla a Tornavacas y el resto. Pues bien, la diferencia también es política, o mejor dicho, jurídica. La villa de Tornavacas pertenece al partido judicial de Jarandilla, con la que por cierto no está siquiera comunicada directamente y de la que la separa una agreste sierra, y el resto del valle que pertenece al partido judicial de Plasencia.

    Podríamos convenir, si os parece, que la división que sugeríamos se produce al menos desde la edad media, teniendo en cuenta que la villa de Tornavacas fue dominio de la casa de Oropesa, pasando posteriormente a la casa de Alba, con castillo en El Barco de Ávila , y que el resto del valle se hallaba al amparo de la influencia de la diócesis de Plasencia. ¿Recogería esta marcada división una linde anterior?

    He encontrado una página sobre la historia de Trujillo que ofrece datos interesantes, de la época medieval, sobre la zona que nos interesa. Con vuestro permiso voy a comentarlos.

    No puedo citar al autor porque no lo menciona, lo que lamento sinceramente, doy por tanto la dirección y agradezco al anónimo historiador el favor que nos hace.

    http://www.mundosvirtuales.org/Turgalium/Historia/3Clave/3Almohades.htm
    Reconquista de 1178
    En 1177 empieza a reinar Alfonso VIII y después de conquistar Cuenca, al año siguiente, se apodera de una torre que llaman Ambroz, la antigua Xerit que junto a Coria había caído en manos almohades en 1174.
    Dice Fray Fernández que "en uno de los avances del ejército cristiano por esta parte oriental de Extremadura, cayó en su poder un antiguo lugar y castillo llamado Ambroz, de origen griego, y prendado el rey de la amenidad del sitio, regado por el río Jerte de frondosas orillas, mandó se poblara; convocando a gentes nobles de otras provincias, sobre todo de Burgos, a quien dio muchas tierras y repartimiento, como privilegios a la nueva ciudad, para que llegara a ser una de las principales de Castilla. Placer de Dios e del Rey sus seniores". Y es entonces cuando Alfonso VIII comienza a denominarla Ambrosía, la bebida de los dioses, delicia, complacencia o Plasencia que acabará llamándose. Fernando II fue quien le dio su nombre antiguo, el del río, Xeret, que los moros llamarían de otra manera y cuando llega Alfonso VIII se deja llevar por la belleza del lugar -sería en Primavera- placiéndole todo, principalmente su situación frente a Coria que es León: eterno contrario-igual.
    Con lo del origen griego se refiere lógicamente al nombre y no al lugar. Sobre el nombre no saquéis todavía conclusiones, puesto que más adelante ofrece datos más completos.

    El año 1178 los moros tenían Coria y la Sierra de Gata por donde entra el rey leonés conquistando Almenarella, hecho que conocemos por el documento de donación de este castro regio de Almenarella en 1179 al conde de Urgel Don Armengol. Casando las diversas lecturas de este documento hallamos una media muy verosímil entre la versión de Velo y Nieto y la de J.L. Melena y es la que sigue, traducido y filtrados los preámbulos:
    "...con todos estos confines que en esta carta nombramos. Evidentemente, por el camino de Almazzayde el cual viene de los confines de Xerit en el Árrago y asciende por el Árrago hasta lo alto, pasa el camino de Gomar y vuelve a pasar igualmente el Árrago por el camino hacia los villares de la izquierda y desde allí por las atalayas, mirándolas por la izquierda yendo rectamente al Guijo y según va del Guijo y Xerit a la Athalaia de Cajabuyo, de donde se ven Acuzzola y Ranconada, de modo que delimita Puzzola con la misma Ranconada y desde allí, como antes, por la vista, donde desemboca Santa Cruz en Alauon y todo esto lo doy y concedo a vos, compañero de Urgel y sobre el cual vos mandareis para siempre y con los restantes límites y pertenencias, o sea, del modo que lo separan las aguas de la sierra y vuelven al Almazaide con prados, pastos (?) y ríos..."
    Fatigosa tarea la de interpretar estos límites. Espero que druidas más informados le hagan frente.
    Continúa...
    El tercer califa Abu Yacub al-Mansur establece alianza con el rey de León. Este año de 1184 toma Trujillo y Montánchez el walí de Sevilla Abu Ishac de paso para Toledo. Fueron recuperadas al año siguiente por el rey Alfonso VIII en persona a quien se unen las guarniciones exiliadas de caballeros trujillanos, también iba el maestre del Pereiro don Gómez Fernández Barrientos y los de Santiago que pudiera ser tomaran Montánchez.
    Citando a Luis de Mármol en la Crónica General de la Orden de Alcántara transcribimos: "Alfonso VIII hizo una gloriosa entrada por sus tierras a la vuelta por Talavera, y pasando el Tajo entró por tierra de Trujillo e hizo grandes daños en la Serena, de allí atravesó hasta cerca de Sevilla, y aunque no dice si ganó Trujillo... Mandó edificar Plasencia y se hizo dueño de todos los pueblos adyacentes, y entre estos fue el de Truxillo. Yo pienso que luego que el Rey dio la vuelta, mandó a don Gómez, maestre del Perero, pusiese en él algunos freyres que estuviesen de guarnición".
    Este puede ser el origen de la extendida interpretación de que en Plasencia no existía, antes de estos hechos, ninguna población. Interpreto que por “edificar” se refiere el cronista a ampliar o remodelar el caserío preexistente.

    El 21 de Abril y el 8 de Mayo de 1186 el rey Alfonso VIII firma documentos en Trujillo en entre cuyos confirmantes está el obispo de Ávila don Domingo. El 11 de Mayo están en Toledo y el 12 de Junio han regresado a Ambrosía (Plasencia) en donde confirma una donación a Muño Díaz de la villa de Albalat del alfoz de Saldaña: "...Facta carta apud civitatem Ambrosiam, in diebus fundationis ejusdem urbis..." o sea: Hecha la carta en la ciudad de Ambrosiam, en los días de la fundación de dicha urbe. Sin embargo el día 4 de Diciembre en otra carta ya no pone Ambrosiam que dice: "Facta carta apd Placentiam", pero si ambrosía es la bebida de los dioses, tanto nos da placer; Ambrosía y Plasencia son términos sinónimos que casi al mismo tiempo suplantan al nombre original de Plasencia como Xerit (de Jerte), el nombre de su río que quiere decir en ibero moderno (euskera) txerta, pequeña cereza silvestre que da xinxa en lagartero, guinda en extremeño y en galaico guindeira.
    Esto contradice muchas versiones que circulan como oficiales sobre el significado de Xerit, Xerte, Xerete etc...y se acerca más a alguna hipótesis planteada en este foro. Quizás no podemos dar por bueno, sin más estudio, el significado y la procedencia del término que el autor señala, solo porque se aproxima a nuestra interpretación, pero es satisfactorio comprobar que estábamos bien orientados en lo de cuestionar la traducción al uso de río de aguas cristalinas o lugar angosto.
    La cuestión vasca sin embargo confieso que no me la había planteado. Nótese la calificación de ibero moderno que el autor le atribuye al euskera.

    Este año de 1187 Alfonso VIII firma: "...dono, ofrezco y concedo a Dios y a la iglesia de San Salvador de Ávila, y a vos, don Domingo, obispo de la dicha iglesia, y a vuestros sucesores, la tercera parte íntegra de todas las rentas reales en Plasencia: es decir, de los quintos y portazgos, de los homicidios y caloñas, de las monedas y transacciones, y de todo el marzazgo y vedinazgo de los judíos y de todas las otras cosas que se hallaren corresponder al derecho real o se puedan hallar, para tenerlas por juro de heredad y poseerlas para siempre...". Buena "aljama" había en Plasencia.
    Sobre la cuestión judía ya comenté que me estoy documentando para tratar de ofrecer una visión informada de la influencia de esta confesión religiosa en el Valle del Jerte, que debió ser. La documentación es escasa.

    Seguimos...
    En Plasencia Alfonso VIII concede el 3 de marzo de 1188:
    "...a vos, don Pedro, arcediano de Plasencia y arcipreste de Ávila, porque os hallé doquier y constantemente aficionado, solícito y fiel en mi servicio, una presa en Plasencia, en el río que se llama Serit, situada cerca de la puerta de Santa María, toda entera, con el molino y aceñas allí construidas y por construir, con las entradas y salidas y todos sus límites y pertenencias, para que la tengáis por juro de heredad y la disfrutéis incondicionalmente.
    También os doy el lugar de la antigua iglesia referida, que hallamos aún no arruinada en la primera fundación de Plasencia, cuyas paredes lindan con el caserío del arroyo Nieblas, con la heredad circundante, separada, en la forma luego dicha, de las otras heredades y lugares por la señal de los siguientes linderos, esto es: según se va del lugar de la iglesia a la torre situada por encima de dicha iglesias; Y desde la esquina de la torre que está más próxima a la iglesia, según se va en derecho a la parte alta, a un alcornoque; y desde el alcornoque, al camino; y desde lo alto del camino, según se va por el mismo camino en derecho desde el alcornoque y desde el alcornoque viene a la calleja por donde se baja al huerto del obispo; y desde esta calleja, según se va a la cabezola (cerro), incluida la cabezola dentro de los límites; y desde allí se viene junto a la calzada pública que va por la margen del arroyo que llaman de Nieblas y se viene en dirección a la referida torre antigua y se pasa desde la puerta inferior del río hasta la esquina de la torre dicha.
    Y también os concedo que, de la presa citada anteriormente con sus aceñas y molinos y pertenencias, y de la heredad referida, hagáis lo que quisiereis, dando, vendiendo, cambiando, empeñando o disponiendo cualquier otra cosa.
    Más si alguno pretendiese inflingir o alterar esta escritura, reciba de lleno la ira de Dios omnipotente y sufra las penas infernales con Judas, traidor del señor, y pague además al tesoro real mil áureos de multa y a vos indemnice duplicado el daño que os hiciere.
    Hecha la carta en Plasencia, era 1226, III idus martii. Yo el rey Alfonso..."
    El 8 de marzo de 1189 Alfonso VIII da privilegio fundacional a Plasencia y de cuyo documento vamos a rescatar su alfoz:
    "...En todas las partes que se hallan allende del Tiétar, posean los términos junto al Tajo, según se le cruza por el valle de Alarza que hay en el Tajo, yendo derecho a la Cabeza-Mayor de la Pedernalosa.
    Y de la Pedernalosa en dirección a Piedrahita.
    Y de Piedrahita en directo a Cabezas de Terrazas.
    Y de Cabezas de terrazas en directo hasta el río Tiétar.
    Y pasado el Tiétar hasta la garganta de Chiella.
    Y de la garganta de Chiella por el camino recto que llega hasta lo último del valle vellido.
    Y por el valle Vellido adelante según se va en directo a la Cabeza de don Pedrolo.
    Y de la Cabeza de don Pedrolo adelante según entra el camino en el río Tormes.
    Y el río Tormes adelante hasta el arroyo de la Mula, cuando entra en el Tormes.
    Y el arroyo de la Mula arriba según se dirige a lo alto del Falgoso.
    Y de Falgoso adelante según se va a la calzada de la Guinea.
    Y más allá del río Tajo, desde el supradicho valle de Alarza, según el camino sale del vado y por él se llega hasta el puerto del Ibor, exceptuando el castillo de Albalat con su término, que se halla según caen las aguas junto al castillo desde las tierras más allá del Tajo.
    Y desde el puerto del Ibor según se va derecho al río que llaman Almonte.
    Y el Almonte adelante hasta donde el Geblanco vierte en el Almonte.
    Y el Geblanco arriba según se va al Tamuja y en directo a Çafram de Montánchez y al campo de Lucena y a la sierra de San Pedro.
    Y siguiendo la línea de esta demarcación, todo lo que los placentinos puedan adquirir.
    Y dentro de los referidos linderos, os concedo Monfragüe por aldea, pero reservándome yo el castillo...
    Hecha esta carta en Plasencia, era de 1227, 8 de los idus de marzo, segundo año después que el serenísimo Alfonso, rey de Castilla y de Toledo, armó con el cíngulo de la milicia a Alfonso, rey de León, y el mismo Alfonso, rey de León, besó la mano al dicho Alfonso, rey de Castilla y de Toledo, y el mismo ya repetido Alfonso, ilustre rey de Castilla y de Toledo, armó nuevo caballero al hijo del emperador romano, de nombre Conrado, y le dio a su hija Berenguela por esposa..."
    Extenso término. Dejaremos la interpretación para más adelante con el fin de no hacer demasiado extenso el comentario y por si alguien, más experto, se anima a acometerla.
    Más...
    Poco después de que Alfonso VIII concediese al arcediano los molinos y Santa María pidió al papa Clemente II que convirtiera Plasencia en sede episcopal y lo hizo, documento que no se encuentra pero se refiere al hecho otra bula de confirmación que Honorio III les da en 1221:
    "Honorio obispo, siervo de los siervos de Dios, al venerable hermano obispo y a los queridos hijos en el cabildo placentino, salud y bendición apostólica.
    En estos hechos de feliz recordación del papa Clemente, nuestro antecesor, hallamos unas letras en la siguiente forma:
    Clemente obispo, siervo de los siervos de Dios, al muy querido hijo en Cristo, ilustre rey de Castilla, salud y bendición apostólica.
    ...De aquí el que, valorando en todos sus matices el regio deseo de ampliar los confines de la religión cristiana, ya manifestada en la ciudad placentina que en tierra sacada del poder de los hismaelitas hicisteis poblar con ayuda de la clemencia divina, constituimos con autoridad apostólica una cátedra episcopal.
    Mandamos que dicha iglesia catedral posea una diócesis de acuerdo con el mandamiento real y, como villas, según en el presente escrito se consigna, que son suyas, concedidas por su liberalidad, deben pertenecerla con derecho diocesano para siempre, esto es, Trujillo, Medellín, Monfragüe y Santa Cruz con todas sus pertenencias.
    ...Dada en Letrán, el décimo octavo día de las kalendas de diciembre, año quinto de nuestro pontificado" (14 de noviembre de 1221).
    El primer obispo de Plasencia fue don Bricio y con poca gracia debieron ver los abulenses que de un trozo de su territorio resurgiera semejante diócesis, a costa propia y principalmente de la vieja sede Emeritense pues engancha Trujillo, Medellín y hasta Lucerna y la sierra de San Pedro, aun más si pillaban. Don Bricio consta en 1190 como confirmante de una donación a la orden de San Juan que firma Afonso VIII en Burgos.
    Algo de mafia debió haber y tal vez tenga razón quien dice que si al arcediano don Pedro Tajabor le dieron la heredad aquella de los molinos y Santa María sería a cambio de permitir que Ávila perdiera este trozo de su alfoz episcopal; por cierto que la famosa heredad pasó a la muerte de Pedro para su hermano Juan Tajabor, confirmado el paso de la heredad en la que ocurren algunos cambios como veremos en el documento:
    "..., sepan, así, los presentes como los venideros, que yo, Alfonso, por la gracia de Dios rey de Castilla y de Toledo, deseando respetar en lo sucesivo lo que establezco, juntamente con mi esposa la reina Leonor y mi hijo Fernando, te doy y concedo a ti, Juan Tajaborch, y a tu esposa doña María, y a tus hijos María, Ioto y doña Oria y a toda tu descendencia, aquella heredad, que en otro tiempo había otorgado a tu hermano el arcediano, más allá del río y del lado acá del río, desde la roca que está bajo el pie del puente hasta el lugar donde el arroyo Nieblas se junta con las aguas del río mayor.
    Sin embargo, se excluye de esta donación la parte de los molinos que puedan construirse, la cual, Juan Tajaborch, aplicaste humanitariamente en remisión del alma de tu hermano.
    Y que hayas, tengas y poseas en sosiego la dicha heredad con todas sus aceñas y pertenencias, tu y tu progenie después de ti...
    Hecha la carta en Toledo, XIII kalendas de marzo, era MCCXXXI" (1193). Este año muere el obispo de Ávila don Domingo.
    La heredad que rodeaba Santa María tampoco la tiene porque se ha convertido en catedral y donde se edificará todo el aparato diocesano cuando llegue la ocasión y se despejen los aires almohades.
    En el documento de deslinde placentino es curioso el final de sus límites indefinidos, llega hasta la Çafram de Montánchez, se incorpora Lucerna que debe ser Alcuescar y la Sierra de San Pedro por donde les dice que lo que pillen para ellos; respeta Montánchez que debe estar en manos de Santiago pero se pasa por la barba los terrenos de su primo Alfonso IX. Por otro lado y en el mismo documento le quita la aldea de Monfragüe ¿a quien? Debe ser a Pedro Fernández de Castro, para dársela a los placentinos reservándose el castillo que tienen los freires de Monfrag.
    No es de extrañar la rivalidad secular que se profesaron las diócesis de Ávila y Plasencia.

    En 1196 Alfonso VIII hizo paces con sus colegas de Aragón y Navarra para ir contra los almohades, juntó mucha gente en especial de Extremadura. El almohade Miramamolín había desembarcado en Andalucía con una estupenda escuadra, gran ejército y casi sorpresivamente se puso ante las líneas castellanas de Alfonso VIII sin darle tiempo a que llegaran los refuerzos de Aragón y Navarra. Cuando empezó la batalla se le rebelaron trescientos hidalgos con Diego López de Haro porque el rey había dicho que tanto quería un villano de Extremadura que no un hidalgo de Castilla, estos salieron del campo de batalla y se fueron a contemplarla en lo alto de un monte. El 18 de Julio de 1195 son derrotadas en Alarcos las fuerzas cristianas con Alfonso VIII al frente de sus leales, muriendo en la lid el cuarto maestre de Calatrava y el arzobispo de Toledo don Gutierre Girón, solo pudieron conservar Cuenca y Toledo. Después los moros ganaron Yévenes teniendo grandes encuentros en el camino con los cristianos, quedó destrozado el reino de Toledo.
    En 1196 se preparan los moros para recuperar la Extremadura cristiana, el 15 de Junio las jarqas de Sevilla cruzaban el Guadiana por Medellín, tomaban Montánchez, Santa Cruz y Trujillo; en un ataque sorpresa llegaron hasta Plasencia donde razziaron e hicieron prisionero al Obispo y a un montón de notables que fueron deportados a Sale de Albañiles para la construcción de la gran mezquita.
    Alfonso IX es reprochado por la Cristiandad ante su ausencia en Alarcos y como se endurece su disputa con castellanos y portugueses se alía con los almohades para lo cual envía a parlamentar a Pedro Fernández de Castro (el dives homo in tota Ispania) que se trae dinero y un cuerpo de caballeros armados. El Papa Celestino III le excomulga.
    Y aquí termina la crónica, que resuelve alguna incógnita y abre otras muchas. Parece ponerse de manifiesto una necesaria revisión del significado de los topónimos comúnmente aceptado, como creo que proponemos todos desde el inicio de este debate.

    También he encontrado, en la misma página, una referencia interesante a la ocupación visigoda del Valle, paso a transcribirlo:

    En el 666 se celebra concilio en Mérida. El 1 de Septiembre del 642 Recesvinto muere tranquilamente en su finca de Gerticos, valle del Jerte, sobre la calzada que unía Toledo con Salamanca.

    Habrá que suponer la finca cerca de Plasencia. Aun así el comentario parece que indica una población visigoda muy estable controlando el valle.

    No me resisto, al terminar, a incluir algunas curiosidades y coplillas de la tierra, extraídas del:

    Diccionario Geográfico Popular de Extremadura, colección de refranes, cantares, romances y apodos de las provincias de Cáceres y Badajoz (297 pueblos); Antonio Rodríguez-Moñino (Calzadilla de los Barros, 1.919 - Madrid, 1.970)

    http://www.paseovirtual.net/diccionariopopular/


    “Jarotes: Así llaman a los hijos de Extremadura los pastores castellano-leoneses que pasaban a Extremadura con ganado trashumante, quizá derivando la palabra jaro, puerco que tira a cárdeno parecido al jabalí en la dureza de las cerdas, por la gran industria que de ellos hay en nuestra región.”

    Podría ser, aunque yo me inclino más por pensar en que la procedencia del apodo podría venir impuesta por la costumbre de alumbrarse o calentarse quemando jaras (; una especie de “ahumaos”, como llamaban a los que se alumbraban con teas de pino en algunos pueblos.

    De hecho, hay una coplilla extremeña que se refiere a la invasión francesa a la que tan firmemente se opusieron en esta tierras en la que se nombra dicho arbusto:
    El señor Napoleón
    no sabe lo que son jaras
    por eso de Extremadura
    se las llevaron jincadas.

    En cuanto a lo áspero de algunas zonas del Valle que ya hemos comentado:
    Puerto de Honduras, quien no te pase no sabe de mala ventura. (Este puerto se halla en la Sierra de Béjar y es muy dura y áspera su subida)

    ¿Qué cosa es penitencia? montar en burro e ir a Plasencia (según dicen los de Serradilla, por el mal camino y las sierras que tenían que atravesar)

    Y estas para los mozos y mozas extremeños que participan en este foro.

    ·A Plasencia me he de ir · aunque me arrisca de frío, · pa ve a las plasencianas · subir y bajar al río


    Tú no quieras pa casarte
    un novio con muchas perras
    más te vale un extremeño
    que sepa coger cerezas.

    Si queréis completar la idea que ofrece el mapa de la morfología del valle, consultar esta página.

    http://www.valledeljerte.info/informaciongeneral/turismoactivo/01d64f94b612b0714/index.html



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