"Lápida de la Torre de Hércules. Las letras hubieron de ser retocadas con tiza para poder apreciarlas, a pesar de tratarse de un método poco ortodoxo" ( La Romanización de Galicia. 1976. varios autores. Cuadernos del Seminario de Estudios Cerámicos de Sargadelos 16).

Es dificil no creer que el Faro Romano (conocido como Torre de Hércules en función de documentos que empiezan a aparecer, ya, a comienzos de la Baja Edad Media) construido en el promontorio, por encima de As Eiras, que da entrada al golfo ártabro y dando abrigo a la ciudad de Coruña, la antigua Brigantium, que la dirección de obra y autor de proyecto no se corresponda con C. Sevio Lupo, arquitecto lusitano natural de Aeminium (hoy Coimbra, Portugal, a la orilla del antiguo río de igual nombre -Aeminium, Plinio IV 113,115 - hoy conocido como Mondego, también de otro antiguo Munda, Mela III 8 - Plinio IV 115. Es muy posible que en la antigüedad este río fuese conocido con ambos nombres), ya que a unos diez metros de la base del faro y en su misma roca base, se encontró una inscripción que parece ser su "firma" in memoriam. Muy claro lo de: Lusitanus pero algo confuso lo de Aeminiensis. (IRG I Sup., núm. 11). Evidentemente, argumentar que la mencionada inscripción no da seguridad a la autoria del faro por el arquitecto Lvpvs, también es aceptable.

El Faro Romano fue reformado varias veces, el interior y sus cimientos son de clara construcción romana y los sillares exteriores ya se corresponden a reparaciones en época de Carlos III. En la actualidad no se sabe, por expertos, la fecha de construcción; inclinándose unos por época Augusta y otros por la de Adriano. A lo mejor, hasta es posible, que ni de la una ni de la otra; supongo que el tiempo, un buen estudio epigráfico, otro constructivo: del fundamentum y de la memoria de los sillarejos que la forman interiormente (incluso aparejo y trabazón) y alguna que otra cosilla, darán con la fecha constructiva de esta joya romana que los coruñeses tienen el orgullo y satisfación de tenerlo al pie de sus viviendas y poder contemplarlo en el día a día siempre que gusten.