En esta imagen de la localidad hurdana de Ladrillar, cabeza del municipio homónimo, podemos observar cómo las tradicionales edificaciones de pizarra han quedado relegadas al casco antiguo y abandonado del pueblo, mientras ven crecer a sus espaldas rutinarios macizos de hormigón y ladrillo enlucido que, con un simple recubrimiento de piedra, hubieran sido más respetuosos con el entorno y con el patrimonio arquitectónico de la comarca. Por cierto, lo de "Ladrillar", y aunque parezca mentira observando esta imagen, no viene de "ladrillo"; su origen hay que buscarlo en un "Adrillar" con aglutinación del artículo.