http://www.academia.edu/1254959/Ideolog%C3%ADa_y_realidad_en_la_fuente_principal_para_la_historia_del_Reino_de_Asturias_El_Relato_de_Covadonga

EL COMENTARIO

No se si estaremos ante una obra definitiva pero lo cierto es que el señor Bronisch ha detectado en su obra, de extraordinaria calidad,  aquellos elementos contradictorios que distorsionaban los acontecimientos de los momentos iniciales de la llamada Reconquista.

Es necesaria una lectura muy pausada para alcanzar a comprender la complejidad de los problemas y las soluciones que presenta el investigador alemán.

He aquí una pequeña síntesis

-Que algunos miembros de la familia de Witiza podían haber sobrevivido en el norte o bien el recuerdo de la familia real witizana gótica fue utilizado políticamente contra la familia real asturiana.

- Que la leyenda antiwitizana es una invención defensiva como una reacción  contra los ataques que habría recibido la familia real asturiana por su falta de legitimidad de auténtica sangre real goda. 

-Que ya en la época de Alfonso I el Católico de cuya genealogía se duda abiertamente se habrían producido dichos ataques recrudecidos en los convulsos tiempos de Mauregato.  Que este rey de suma importancia habría añadido la leyenda antiwitizana al inicial relato épico de Covadonga para "blindar" a la dinastía reinante.

- Asimismo otras interpolaciones al margen del tema witizano como el entroncamiento de Pelagianos y Alfonsís con la realeza gótica.

- Que ya existía un conflicto anterior al adopcionismo entre la Iglesia Asturiana y la Sede Metropolitana de Toledo. Es también durante el reinado de Mauregato y aprovechando la polémica adopcionista  cuando éste monarca no dispuesto a ceder tan importante parcela de poder político ejecuta la vinculación definitiva de la Iglesia Asturiana a la Monarquía separándola de la obediencia y la estructura toledana.

-Que probablemente otros elementos interpolados proceden de la Crónica Mozárabe véase los nombres de algunos de los protagonistas y numerosas similitudes.

-Que confirma la rivalidad dentro de la misma familia real asturiana del bando "pelagiano" y el "alfonsí" que en realidad son dos clanes dentro de la misma familia por la unión de Alfonso I con Ermesinda.

-Que todos los elementos detectados como interpolaciones al relato inicial de la batalla de Covadonga no hacen otra cosa que confirmarla.

-Que el relato inicial de la batalla de Covadonga fue compuesto pocas décadas mas tarde de los sucesos, que era de naturaleza épica y se equiparaba a Don Pelayo con Judas Macabeo.

-Que el filorodriguismo fue una cuestión posterior ajena a la importante cuestión política que dio pie a la formación de la leyenda antiwitizana.

-Que teniendo en cuenta todas estas cuestiones no puede sostenerse que en la época de Alfonso III se hubiera creado una ideología completamente nueva, la ideología goticista como así han venido sosteniendo numerosos autores.

Finalmente otras cuestiones menores aunque no menos llamativas.

-La asignación a la figura de Wamba   de elementos que muy posiblemente habrían correspondido a Pelayo conformando entre ellos lo que el autor califica como "tipo" y "antitipo".

-La falsedad de que el ejército postuló a Wamba para que ocupara el cetro real - en la elección de Pelayo el ejército tuvo un papel preponderante.

-La destrucción por Wamba de 270 naves sarracenas; un hecho inverosímil no mencionado en ninguna otra fuente - Está fuera de toda duda un choque militar favorable a Pelayo.

-La falsa información sobre el lugar de la unción regia de Wamba -la Iglesia de Santa María-  y el domum sancte virginis marie pelagiano.

Por último la controvertida afirmación de que Wamba puso fin a la reiterada rebeldía de los astures que Brosnich considera falsa  calificada por el autor como "muy difícil de interpretar"  bien como que Pelayo también había puesto bajo su mando a los astures o que su notoria y tradicional rebeldía habían servido para frenar a los musulmanes.

Sin duda un trabajo impactante que sirve para explicar muchas cuestiones contradictorias que han traído de cabeza a numerosas generaciones de investigadores.

¿Hasta que punto lleva razón el señor Brosnich......? El tiempo lo dirá si alguna vez se decide a hablar.