Autor: berserker
jueves, 25 de enero de 2007
Sección: Artículos generales
Información publicada por: berserker


Mostrado 89.364 veces.


Ir a los comentarios

¿La invasión que nunca existió?

-

¿Pudo ser así la historia?

Algunos historiadores cuestionan de forma creciente la versión tradicional católica según la cual el Islam se implantó violentamente en la península, después de una invasión árabe, en el año 711. Estos historiadores argumentan que el Islam ni se impuso ni era ajeno a los hispanos, que lo abrazaron libre y mayoritariamente. En realidad, la tesis de la imposición fue una "conspiración" promovida por la Iglesia con objeto de encubrir su derrota ante los cristianos unitarios, seguidores del arrianismo que predicó Prisciliano.

¿Ocurrió la historia tal y como nos la han contado? ¿Es posible que, en el siglo VIII de nuestra era, un ejército musulmán cruzara el estrecho de Gibraltar, derrotara a las tropas visigodas y avanzara victorioso hasta el punto de llegar a someter a casi todo el territorio peninsular? ¿Un puñado de bereberes pudo someter a 20 millones de hispanos durante varios siglos? En contra de esta hipótesis tenemos el hecho de que los documentos de la época no contienen referencias a aquella terrible invasión que, de ser cierta, habría supuesto para los peninsulares todos los males imaginables. Las primeras noticias no aparecen hasta las crónicas latinas y musulmanas del siglo IX, a seis generaciones (ciento cincuenta años) de los hechos que se relatan, cuando el Islam estaba ya firmemente arraigado en la península.

Algunos investigadores, tras que los cristianos omitían consignar cualquier aspecto de lo que estaba sucediendo en su suelo, concluyen que el mito ha pervivido, contra toda lógica, porque a los católicos les ha interesado mantenerlo, porque encubría ante su propio pueblo lo que en realidad fue su fracaso social y religioso.

La guerra civil que estalló en la Península Ibérica a principios del siglo VIII, explicada como conflicto político y disfrazada más tarde como invasión de una potencia extranjera, tuvo su auténtico origen en unos hechos que se remontan a cuatro siglos antes, al enfrentamiento producido entre dos corrientes cristianas: los unitarios o arrianos, que negaban que el Hijo fuera igual al Padre -según esta premisa, Jesús no era Dios- y los trinitarios, adheridos al dogma predicado por san Pablo, que mantenían que hay tres personas distintas -Padre, Hijo y Espíritu santo- en un solo Dios verdadero.

Por tanto, para aproximarnos a una de las verdades de lo que sucedió realmente en el año 711, cuando un contingente de guerreros del norte de África, entre los que predominan los bereberes, cruzan el estrecho de Gibraltar, derrota a las tropas visigodas lideradas por Don Rodrigo y se establece en la Península Ibérica, tendremos que remontarnos al siglo IV.

Un poco de historia

En el año 325, el emperador Constantino acababa de convocar un concilio en Nicea para zanjar las disputas teológicas que estaban perjudicando al imperio. Fue una fecha crucial, porque el dogma de la Trinidad se impuso y se incluyó en la religión oficial, mientras que se reafirmaba la excomunión del obispo alejandrino Arrio, que murió en el año 336, el día anterior al fijado por el emperador para obligarle a reconciliarse con la Iglesia. Un siglo después, su mensaje obtuvo un eco imprevisible.

Las ideas que Arrio había predicado en Oriente fueron propagadas por Prisciliano en la Península Ibérica y en el sur de la Galia. Este controvertido personaje nació en el seno de una familia senatorial en el año 340 -se cree que en Galicia- y comenzó su predicación hacia el 370. Era un hombre culto, ascético, vegetariano y que no hacía distinción entre hombres y mujeres en cuestión de nombramientos relacionados con el culto, unos principios que retomarán siglos después los cátaros.

Los libros de Arrio fueron quemados y apenas quedan obras de Prisciliano. De los signos externos y sacramentos del arrianismo sólo se sabe, por referencias de sus enemigos, el empleo de alguna forma de tonsura y que el bautizo se realizaba mediante tres inmersiones, quizá en correspondencia con la trilogía "cuerpo, alma y espíritu" o "cuerpo físico, astral y mental". Prisciliano tuvo que soportar durante toda su vida pública el acoso teológico y personal de los obispos trinitarios, temerosos de su creciente influencia entre el clero y la población. El último acto de esta historia tuvo lugar en el año 385 en la ciudad de Tréveris, donde el emperador Máximo le hizo acudir para que se defendiera de la acusación de hechicería lanzada por sus adversarios. Hubo un juicio, viciado por intereses clericales e imperiales, y una condena: a Prisciliano le cortaron la cabeza. Fue el primer hereje que sufrió pena de muerte. Curiosamente, el propio emperador Máximo fue ejecutado tres años después por orden de Teodosio.

Unamuno sugiere que quien está enterrado en Compostela no es el Apóstol Santiago, sino Prisciliano, lo cual daría idea de la extensión e importancia que alcanzaron sus doctrinas. Lo cierto es que su ejecución afianzaría el arrianismo en el país. Por otra parte, hacia el año 460 tomó el poder en la península el monarca godo Eurico, quien se convirtió a la fe arriana y truncó así las ambiciones de los que no habían dudado en matar a Prisciliano con tal de acabar con sus ideas.

En el año 587, el rey godo Recaredo se alió con los trinitarios por conveniencias políticas y, en nombre propio y en el de todo su pueblo, abjuró del arrianismo que habían practicado los anteriores monarcas godos. Se prohibió el culto arriano y se iniciaron brutales persecuciones contra sus seguidores y también contra los judíos, quienes hasta entonces habían practicado su religión libremente. Los arrianos de la península y del sur de Francia se sublevaron y tuvieron que soportar durante el siglo siguiente robos, violaciones, asesinatos y reducción a la esclavitud, perpetrados por elementos de la oligarquía goda y el propio clero.

La tensión se rebajó cuando el rey godo Vitiza subió al trono en el año 702 y comenzó a deshacer los entuertos de sus antecesores: declaró una amnistía contra los perseguidos y les restituyó sus bienes; detuvo las medidas hostiles contra los judíos y convocó el XVIII concilio de Toledo, cuyas actas, sospechosamente, se han perdido. El grueso de los historiadores opina que fueron destruidas porque eran contrarias al Cristianismo ortodoxo romano. A la muerte de Vitiza, en torno al año 709, todo cambió. La nobleza y los obispos impidieron que su hijo Achila, que era menor de edad, ocupara el trono, y eligieron en su lugar al que la historia ha conocido como Don Rodrigo, un jefe militar afín a sus intereses. Estalló entonces una guerra civil entre los partidarios de éste, probablemente seguidores del Cristianismo establecido, y quienes apoyaban a los sucesores de Vitiza, más comprometidos con las creencias unitarias o arrianas, que veían en Don Rodrigo a un usurpador del trono visigodo.

Al mando de la Bética estaba Rechesindo, el antiguo tutor del hijo de Vitiza. Rodrigo lo mató en una escaramuza y entró en Sevilla sin oposición. Entonces, los partidarios de la estirpe de Vitiza, los debilitados unitarios, pidieron ayuda a su correligionario Tariq, gobernador de la provincia visigótica de Tingitana (la actual Tánger), en el norte de Marruecos, que había sido nombrado por Vitiza y con cuyo reinado mantenía estrechas relaciones comerciales. Tariq era, probablemente, de raza goda, como apunta la sílaba "ic" hijo en lengua germánica. Uno de sus jefes militares era Yulian, de origen romano, a quien la leyenda de la invasión convirtió en el traidor conde Don Julián. Tariq cruzó el estrecho con guerreros de diversas etnias, integrados en la causa unitaria, entre los que abundaban los bereberes. La presencia de estas tropas no provocó una especial reacción entre la población autóctona, ya que la petición de auxilio a fuerzas extranjeras era una práctica muy corriente en Hispania. Los judíos, que habían sido ferozmente perseguidos por los monarcas godos después de que éstos abandonaran la fe arriana, acogieron favorablemente a los recién llegados.

Los expertos subrayan que sólo un estado puede organizar una invasión militar. Y no existía entonces un imperio arábigo, sino tribus y pequeños caudillos frecuentemente enfrentados entre sí y carentes de gobierno, administración y ejército.

Según el historiador Ignacio Olagüe, "en las crónicas latinas y bereberes aparecen los godos como un grupo aparte que guerreaba contra un enemigo que no era español, ni cristiano, ni hereje, sino anónimo; es decir sarraceno". Lo que no podía decir, o lo ignoraba el cronista, era que los godos luchaban contra la masa del pueblo, contraria a la oligarquía dominante".

Suponiendo que la batalla de Guadalete no hubiera sido una ficción, el número de fuerzas que intervino tuvo que ser más modesto de lo que se ha contado, y bastante menor la trascendencia militar que se le atribuye.

Se dice que Rodrigo murió en la batalla, pero es más probable que fuera expulsado de Andalucía y buscara refugio en Lusitania, donde pudo haber fundado su propio reino, ya que existía en Viseu una sepultura con la inscripción "Aquí yace Roderico, rey de los godos", que todavía se conservaba en el siglo XVIII en la iglesia de San Miguel de Fetal, según señala el abate Antonio Calvalho da Costa en su Corografía portuguesa.

En el siglo IX, vemos que los musulmanes llevaban 140 años en la península, tenían desde hacía un siglo la capital del reino en Córdoba, la más importante y refinada ciudad de Occidente por entonces, con un millón de habitantes, y es evidente que no habían forzado la conversión masiva de indefensos cristianos, ni siquiera hacían proselitismo de su fe ni alardes de su culto. ¿Qué fe seguían entonces los andaluces? Lo más probable es que se tratara del arrianismo tradicional, en discreta evolución hacia el islamismo, que la mayoría de la población acabaría abrazando, igual que adoptó paulatinamente la lengua árabe en sustitución del latín. No hubo imposición, sino una lenta seducción. Y no se trataba de una fe extranjera. Asín Palacios y otros arabistas mantienen que el Islam tiene relación con el Arrianismo y el Judaísmo. Se comprende el respeto de los musulmanes hacia las "gentes del Libro", con las que comparten lo esencial: el sometimiento a un solo Dios con el que pueden comunicarse directamente y desde cualquier lugar.

Incluso los investigadores que respaldan la teoría de la invasión juzgan extraño que un puñado de árabes pudieran influir tan profunda e inmediatamente en 20 millones de hispanos. El historiador Olagüe sintetiza su perplejidad en tono irónico: "Tuvo entonces lugar una mutación formidable, como se produce en el teatro un cambio de decoración.

España, que era latina, se convierte en árabe; siendo cristiana, adopta el Islam. Como si hubiera repetido el Espíritu Santo el acto de Pentecostés, despiertan un buen día los españoles hablando la lengua del Hedjaz (árabe). Llevan otros trajes, gozan de otras costumbres, manejan otras armas. Los invasores eran 25.000. ¿Qué había sido de los españoles?"

Se ha querido transmitir la idea de que España era poco menos que un desierto artístico e intelectual hasta que la fecundó el Islam. Sin embargo, el historiador Bonilla san Martín apunta que "el movimiento priscilianista, los trabajos de los concilios de Toledo, las producciones de los escritores, atestiguan en la España de los siglos IV y V una cultura excepcional. La invasión goda, lejos de sofocar este progreso, lo acrecentó y estimuló notablemente". De hecho, los estudiosos mantienen que el arte arábigo fue una prolongación del ibero y del visigótico.

El árabe no empieza a generalizarse por escrito en España hasta la segunda mitad del siglo IX. Es entonces cuando florecen las ciencias, la filosofía y la poesía. La rica lengua árabe es el instrumento; el genio lo aportan aquellos que vivían ya en Al-Andalus y los que llegaron como invitados, tanto del mundo islámico como del cristiano, sin distinción de etnias. No obstante, innovaciones arquitectónicas como el arco de herradura no son una aportación arábiga; éste existía en Occidente y puede verse en varias construcciones de España y Francia anteriores al Islam. Tampoco parece obra suya la mezquita de Córdoba, ni nació mezquita. Ese templo, bosque de columnas, es incompatible con el culto musulmán y con el cristiano, ya que ambos exigen espacios diáfanos para seguir al oficiante.

En suma, demasiadas incógnitas a la hora de analizar un periodo que fue trascendental para la posterior evolución de la sociedad española y que la historiografía oficial ha catalogado, de forma excesivamente parcial y simplista, como un invasión y una reconquista, pero como decía Ortega y Gasset "Una reconquista de seis siglos no es una reconquista".

Lo más probable es que nunca existiera una invasión violenta sino una revolución interna de los pobladores de la Hispania que se dejaron seducir por la magia de lo nuevo y mejor.

-


No hay imágenes relacionadas.

Comentarios

Tijera Pulsa este icono si opinas que la información está fuera de lugar, no tiene rigor o es de nulo interés.
Tu único clic no la borarrá, pero contribuirá a que la sabiduría del grupo pueda funcionar correctamente.


  1. #1 F. 23 de ene. 2007

    orison: sin ánimo de mortificar. La última mención de bagaudas es la de Hidacio referida a su eliminación en Tarraconense en 454. Si te has molestado en leer mis artículos sobre bagaudas, verás que no las hubo en Bretaña ni en África. Y que, en mi opinión, no se trata de un movimiento de tipo social sino político. Por lo que, siguen sin pintar nada por aquí. Y es F. (que le he cogido cariño al punto).

    Saludos

  2. #2 berserker 23 de ene. 2007

    F. si el articulo tiene que compararse con la enciclopedia británica que quieres que te diga....no me parece para nada fiable esta, (la historia la escriben aquellos que cuelgan a los héroes, o los vencidos sobre los vencedores ) asi que por mucha fama que tenga , la enciclpedia del imperio cuanta la historia desde su punto de vista, como todos incluido tu , y esto se ve muy bien en esta web que tanto criticas el rumbo que está tomando,

  3. #3 ofion_serpiente 23 de ene. 2007

    Más aún, y que F. me corrija si me equivoco. Historiadores hay que explican la rápida conquista de Siria por los árabes por referencia al debilitamiento del Imperio bizantino como consecuencia de las devastadores guerras con los Partos, acumulado al hambre y a las epidemias padecidas en Siria en la época de la invasión

  4. #4 F. 23 de ene. 2007

    Aquí hay gente con la mente tan abierta que casi se oye correr el aire.

    Que conste que la frase es de Groucho Marx, no vaya a ser que me cercenen.

    Saludos.

    P. D. Que es F., caramba.

  5. #5 Cadwaladr 23 de ene. 2007

    Ni los moriscos fueron expulsados de España...

    Estamos hablando de historia-ficción. Las fuentes no son fiables si no dicen lo que nos interesa, por lo que nos lo inventamos y todos contentos.

    Saludos F.

  6. #6 orison 23 de ene. 2007

    Bueno lo de invasión total y sumisión tenemos la destrucción Oreto en el siglo IX creo y rebeliones en la sierras de Jaén en el mismo siglo, luego lo de la invasión es muy discutible en ese aspecto Cadwaladr.

    F., a mi por menos mi vida pende de un hilo fino en celtiberia.

    Bueno Berserker ya lo dijo Kaerkwes

  7. #7 González 24 de ene. 2007

    Totalmente deacuerdo F.

    saludos a ti también y a todo el foro.

  8. #8 berserker 24 de ene. 2007

    No tengo nada contra ti F. , es más se puede debatir tranquilamente con personas como tu sin entrar en la descalificación, como verás en ningún momento he dicho nada ofensivo contra ti, en cambio a mi ya me han tachado de: propagandista fanático.
    No intento convencer a nadie solo intento dar otra versión de la historia que a mi parecer puede ser acertada, en lo que estoy en contra es en aceptar la teoría oficial como dogma de fé, eso si me parece fanatismo (y no va por ti).

  9. #9 Cadwaladr 24 de ene. 2007

    Bueno, F. ya he indicado que ponía el artículo porque respondía a muchos interrogantes.

    Lo que sí me apetece introducir son las fuentes más cercanas a los hechos:

    http://www.artehistoria.com/frames.htm?http://www.artehistoria.com/histesp/
    contextos/5984.htm

    "...los textos latinos son mucho más escasos, pero más cercanos a los acontecimientos. El más importante y conocido es, por supuesto, la Crónica mozárabe de 754; escrita por un cristiano que vivía bajo la dominación de los gobernadores musulmanes de Córdoba, la crónica relata el conjunto de los acontecimientos de la primera mitad del siglo VIII relacionados con la conquista de la Península por los árabes y los beréberes, y con la instalación de un nuevo régimen político-religioso. Este relato muestra, con frecuencia, poca precisión, y está escrito en un latín que dista mucho de la perfección en lo que se refiere a las reglas de la lengua clásica, pero es insustituible.
    Se podrían mencionar otros textos latinos, si fuera necesario, para probar la veracidad del conjunto de los hechos de la conquista militar de la Península por los musulmanes: algunas referencias, tal vez breves, pero inequívocas, a esta ocupación brutal de Hispania, redactadas por fuentes contemporáneas en otras regiones de Europa occidental, donde se conocían los acontecimientos y se transmitían. El Liber Pontificalis romano, en el que las noticias se redactaban en vida de cada papa, incluye en la época correspondiente a Gregorio II (715-731) un largo relato relacionado con la invasión sarracena de España y de la Galia meridional. Bastante más al norte Beda el Venerable, al revisar, poco antes de su muerte en 735, su Historia eclesiástica de la nación inglesa, habla del avance de los sarracenos hasta la Galia, las devastaciones que causaron y el castigo que recibieron en la batalla de Poitiers. Una carta de San Bonifacio al rey Etelbaldo de Mercia (746-757) enuncia la idea de que la conquista de España y del sur de Francia por los árabes sólo se puede explicar por el hecho de que los habitantes de estas regiones habían caído en la fornicación y la lujuria, tópico que recuerda curiosamente las leyendas que dan como causa inmediata de la conquista la violación que comete Rodrigo, el último rey visigodo, contra la hija del conde Julián.
    Otra serie de fuentes contemporáneas a la entrada de los musulmanes a España a las que no se ha prestado suficiente atención, porque no son escritas, es la que forman un número relativamente importante de monedas acuñadas por los conquistadores en los años siguientes a la invasión. Evidentemente, hay que colocar estas acuñaciones latinas, latino-árabes y -en seguida- exclusivamente árabes en su correspondiente lugar dentro del contexto general de las cecas arabo-musulmanas de la época."

  10. #10 luisote 25 de ene. 2007

    Me llamó la atención el artículo de Berseker pues nunca había oído esa teoría. Así se puede apreciar el grado de mis conocimientos sobre el tema, ero al final ha sido todo un poco decepcionante.

    Gracias a F.(obsérvese el punto), Moriarty y Brigantinus. Hay alguno más que olvido pero no tengo tiempo de leerlo todo de nuevo. Lo siento.

    También me parece significato que no haya respuestas a las preguntas de Atalaya.

    La "no invasión de los moriscos", un tema que me interesa mucho y la relación de Olague con Ramiro Ledesma, colmó el vaso de mi interés por el tema.

    Y ¿Porqué no aparece una "no expulsión de los judíos"?.

  11. #11 ofion_serpiente 25 de ene. 2007

    Bueno, bueno, bueno.

    Meollo del Foro

    1)Afirmación: no existió invasión musulmana porque no es lógica la rápida caida del Reino de Toledo frente a un grupúsculo de fanáticos. La pretendida invasión no fue más que una "conversión" una revuelta pacífica de Unitarios.

    .2)Refutación:Existen testimonios históricos sobradamente contrastados que relatan la invasión. Existen causas suficientes que explicarían la disolución del Reino de Toledo dentro de una lógica histórica.

    Añadido

    El tema es repetición de otros anteriores en que sus autores se han significado por su militancia islámica.Esta posibilidad ha sido tan solo mencionada tangencialmente en una o dos intervenciones. El resto ha tratado de aportar datos objetiva y asépticamente históricos.

    El defensor de la Afirmación ahora, nos dice que era todo un juego un "estudio sociológico" y que el no cree en lo que dijo, que lo utilizó para jugar con el resto.

    Me la pone al pairo los ocultos designios del quien defiende la tesis porque el tema interesa, o permite divulgar las razones de la caida del reino visigótico no me importa quién y por qué saca a la palestra el tema. La verdad es la verdad, la diga Agamenón o su porquero.

    A mi el tema, como he indicado, que no es nuevo, me parece interesante.¿por qué cayó tan rápido el reino visigodo?.Sin embargo, como dije en ateriores foros, no me parece fundamentada la afirmación sostenida.

    Ahora, desvelada la "broma de berkeser", creo que el foro puede continuar tal y como lo estaban encaminando F., CAdlawar y los otros: las razones de la caida del reino visigótico de Toledo.

    Otra cosas, a mi entender, es iniciar foros de "verdad absoluta" que comienzan descalificando a siglos de investigación histórica y nos pretenden convencer que un indocumentado iluminado ha descubierto una historia escondida desde hace cuatro mil años. Entonces, por respeto, solicito pruebas y argumetnaciones, ante su ausencia, pues lo considero eso, una alucinación,una boutade,una nosense, una tontería, vaya, y como tal la trato. Si alguien le disgusta, pues........A jugar pala






  12. #12 Teshub 25 de ene. 2007

    Y ya puestos a seguir con la invasión musulmana, y hablando en serio, ¿que os parece la opinión de Roger Collins, "Early Medieval Spain: Unity in diversity 400-1000", Londres, 1983, quien asegura que no existía decadencia de la sociedad visigoda, ni derrumbe, sino evolución (p. 145: "The society of the Visigothic Spain was not declining or decaying: it was evolving"). .
    Lo mismo respecto de Harold Livermore, "The Origins of Spain and Portugal" (London: George Allen and Unwin, 1971), p. 302, que describe el imperio islámico, en sus primeras épocas, como un sistema neo-Romano.
    ¿Resultaría posible que la escasa resistencia de los hispanoromanos se debiera precisamente a que en realidad los conquistados culturalmente eran los árabes y no los hispanos, y que verdaderamente se iniciara la resistencia de la población cuando los árabes intentaron empezar a islamizar el territorio -sublevaciones de Toledo de 797, Córdoba 805, etc-?
    Thomas F. Glick en su libro "Islamic and christian Spain in the early middle Ages", cap I, -quien por cierto admite como hipótesis la época de hambruna pre-invasión árabe señalada por Olagüe- afirma que la población hispana no modificó ni sus estructuras sociales ni su sistema jurídico, sino que mantuvo contra viento y marea su herencia romana, la cual tampoco había desaparecido en época visigoda ni tan siquiera tras la supresión del derecho romano por Recesvinto en 652 y la sumisión de los hispanoromanos al sistema godo: "Diffusion is one of the crucial ingredients of innovation, whether technological or cultural, and its particular contours will be outlined below. But the persisting influence of the Roman world on the Islamic Empire has generally not been emphasized. To be sure, many of the physical structures of the classical age survived more or less intact. Towards these the Arabs had an ambivalent attitude: on the one hand, reverence for the ancients (al-'uwal), especially for their mastery of technologies unknown to nomadic peoples; on the other, the plundering of Roman ruins for their materials without regard to the origin or aesthetic worth of the structure.
    But more than this survival of Rome as a kind of vague memory, there was a persistence of local custom regulating, in particular, the agricultural year and the utilization of resources (particularly water) which eventually entered the corpus of Islamic law. Al-Mâwardî, a Shâfi'î jurisprudent in the Andalusi tradition, noted the special place in Islamic law of irrigation canals dug by the ancients, and there is good reason to assume also the direct borrowing of Roman water-allocation principals by the Muslims. Roman law, which may be regarded as a compendium of customary Mediterranean usages, has never been compared systematically with Islamic law, generally assumed to have had radically different and highly idiosyncratic roots."

    "The Visigothic state which the Muslims found such an easy victim was an ethnically stratified society, with a fragmented political structure, a depressed and unbalanced rural economy, and a town life which was rudimentary at best.. (....)Thus, paradoxically, the religious and legal merger of the two peoples proved only fictive; the intense stratification of the society along ethnic lines was reinforced rather than diminished, to the point where distinctions between Romans ancl Goths persisted even after the Islamic conquest. At the same time, the political structure of Visigothic society manifested distinct disintegrative tendencies, as the dukes tended to make their provinces increasingly autonomous units which they were able to control tightly by granting land to their own vassals in return for loyalty and military service."

  13. #13 Cadwaladr 25 de ene. 2007

    Me han llamado la atención los apuntes de Teshub, sobre todo “que en realidad los conquistados culturalmente eran los árabes y no los hispanos”. Y, en un primer momento, parece más que lógico. Luego, la cita aportada de Thomas F. Glick incide sobre la persistencia de la regulación consuetudinaria local, “en el año agrícola y la utilización de recursos (en particular el agua) que eventualmente entró en la recopilación de ley Islámica…”. Lo cual, tampoco sería de extrañar y me ha venido inmediatamente a la cabeza el contenido de uno de los bronces celtibéricos de Botorrita: una regulación de regadíos. Tan sólo lo digo como testimonio de que, seis siglos antes de la aparición de los árabes, en Hispania existían tanto los regadíos como los pleitos derivados de ellos. Así, no sería de extrañar que partes de esta regulación consuetudinaria, hubiesen irrumpido incluso en la ley Islámica.

    Pero ¿Qué ley islámica?. Y, hasta en esto, la incipiente Al-Andalus parece marcar su propio camino. Dice Diego Melo Carrasco (Universidad Adolfo Ibañez)
    En su artículo: “Un Pequeño Gran Problema de la Historia Medieval: La Revuelta del Arrabal (Rabad) de Córdoba (818) y la Toma de Creta en el 827*”

    “…Las luchas por el poder continuaron, incluso la elección de Hisham I (788-796) -hijo de Abd-al-Rahman- estuvo llena de vicisitudes, debiendo defender su título ante su propio hermano Sulaynam quien no se conformaba con la decisión de su padre (…) Esta pugna se mantuvo durante casi un año; además, volvieron a resurgir los antiguos problemas que aquejaron a su padre, pero ahora renovados y con más fuerza. La constante surgencia de problemas sociales fue lo que definió su política de control rígido, reforzándola con la aplicación severa de la ley islámica . De hecho, es en este período cuando se reemplaza la doctrina de la Escuela de Damasco -al-Awza't- por la Malikí.
    La doctrina Malikí se difundió en España gracias al favoritismo que le otorgaron Hisham y su hijo al-Hakam. El primero permitió el ingreso de ésta, mientras que el segundo fue el que decidió que los cadies (jueces) y los demás magistrados, tanto en Córdoba como en el resto del país, habrían de dictar sus resoluciones basándose en la doctrina de esta nueva escuela jurídica.

    La Escuela Malikí fue fundada por Malik ibn Anas, quien murió en Medina (c.795-796). En sus enseñanzas establecía la aplicación práctica del derecho religioso, tal como había sido fijado en la Sunna. Su obra fundamental fue el al-Muwatta' (el camino allanado) ; éste se difundió por gran parte del occidente musulmán, mientras que las otras tres escuelas - la Shaifi'í, la Hanafí y la Hanbalí que diferían más que en simples detallas, en cuestiones de método- se van a implantar en el mundo musulmán ortodoxo.”

    ¿No creeis que una de las principales plataformas para el rápido establecimiento del Islam pudo ser, precisamente, la obligatoriedad establecida por Hisham por medio de la aplicación de la Ley Islámica?. ¿Sustituyó ésta en todo el territorio de Al-Andalus al Fuero Juzgo?. ¿Tal vez estoy elucubrando demasiado?

  14. #14 ofion_serpiente 25 de ene. 2007

    bien, como indica F., wikipedia no es precisamente un pozo de sabiduría, pero acabo de leer las distintas voces relativas a los emires independientes y califas omeyas en España (756 - 1031). La verdad, en todos y cada una de ellas se recalcan dos cosas.

    .- Mantenimiento de un poderoso ejercito a costa de mercenarios de todas las latitudes, aunque particularmente bereberes
    .- Continuos conflictos con mozárabes y muladíes

    Y ahora yo pregunto

    ¿si toda la gran mayoría de la población aceptó voluntariamente el Islam, para qué mercenarios?.
    .- Se supone que la guerra santa es deber de todo buen musulman,
    .- Se supone que los reinos del norte estaban despoblados y en situación paupérrima en comparación con Al Andalus
    .- En 1081, trescientos años después de la conquista, los norteños habían alcanzado el Tajo. Al Andalus se había disgregado y parecía pronto a desaparecer pero los reinos musulmanes reciben la inestimable ayuda de los almoravides primero y luego de los almohades.

  15. #15 berserker 25 de ene. 2007

    F.
    Hoy, a las 20:16 :

    "Vaya, pues, berserker, perdonarás que, en mi ingenuidad. a mi me parezca que, en realidad, después de las intervenciones en contra de la teoría que aquí has sostenido contra viento y marea (incluido eso de los "cruzados"), te has dado cuenta de que la tesis de Olagüe era de todo punto errónea. Hay gente que hubiera rectificado y ya está, porque todos cometemos errores. Yo el que más. Pero eso con lo que ahora te descuelgas hace que tu credibilidad, para mi, haya perdido muchos enteros, porque hasta ahora me habíaas parecido honrado, equivocado, pero honrado."

    Sinceramente el grado de honradez o credibilidad que mi persona cause sobre ti, me sobra infinitamente, el "experimento" que tu comentas ,no es más que ,tras un articulo tremendamente polémico por las fuentes utilizadas, (fuentes islamistas) se cree un interés por un tema para mi demasiado dejado a la oficialidad ,y que oculta muchos puntos oscuros.
    Asi que me reitero en la afirmación antes expuesta por mi, en la que hablando claro, me importa un comino tu opinion personal sobre mi, ya que gracias a esto ,se esta intercambiando gran cantidad de información aportada por los integrantes del foro, y que a mi entender, vienen a dar un poco mas de luz en este tema en particular.

  16. #16 moriarty 25 de ene. 2007

    No pensaba volver a escribir en este hilo, que me parece desacreditado por la actitud de quien lo ha abierto, pero después de las últimas intervenciones no tengo más remedio.
    Las tesis de Olagüe, que son las que sirven de base al texto inicial, no están ni lo han estado nunca en el ámbito de la discusión historiográfica: ni los historiadores marxistas, ni los neopositivistas; ni los de derechas ni los de izquierdas; ni los historiadores cristianos, musulmanes o ateos, le han hecho nunca el menor caso porque son un absoluto disparate sin fundamento. Es por tanto falso lo que se afirma al principio del artículo acerca de “cada día mayor número de historiadores bla, bla, bla…” Como muestra, invito a los interesados a que hagan una sencilla búsqueda en google sobre “Ignacio Olagüe”; podrán comprobar que no aparece en debate serio alguno, pero sí en tres tipos de páginas por este orden de frecuencia: las de islamistas, las de nacionalistas andaluces y las de nazis, es decir, páginas de carácter político o político-religioso, no histórico. De las primeras es de donde el autor del artículo tomó su texto; aparece en muchas de ellas y tiene un marcado significado político; el propio Yusuf Fernández los afirma en webislam más o menos con estas palabras: los musulmanes españoles nos identificamos mayoritariamente con las teorías de Olagüe. ¿A qué se debe esto? Pues me imagino que se sienten como el reflejo de esos hipotéticos hispanos del s. VIII que voluntaria y mayoritariamente deciden abrazar el Islam ante la superioridad de sus valores y que de alguna manera legitimarían su propia experiencia. Por mi parte, podemos debatir de cualquier tema, histórico o político, pero me parece vergonzosa esta actitud: primero colgar un texto pseudohistórico de evidente fondo político-religioso, descargado de alguna página “islamista” como acaba de reconocer el propio Berserker; a continuación rehuir el debate histórico cuando se le plantean argumentos de este tipo volviendo al tema que le interesaba, el político, y revistiéndose de victimismo; en tercer lugar insultarnos a los que denunciábamos la verdadera naturaleza del artículo llamándonos, entre otras lindezas, xenófobos, islamófobos y racistas y, finalmente, decir que todo era una broma, algo así como un experimento sociológico. Me parece el colmo de la desfachatez que después de todo este historial, Berseker, te permitas esa actitud chulesca con F., que en todo momento ha intervenido con caballerosidad y que finalmente sólo te ha reprochado lo que tú mismo has reconocido: que nos has estado mintiendo.

  17. #17 Al-alyazirí 26 de ene. 2007

    No podía imaginarme que hubiera por ahí tantos "dueños de la norma" (Bueno, la verdad es que sí pero es que no puedo reprimir la ironía). Tanta gente "saliendo de cañas con Dios" y yo pensando todavía que no conocemos bien lo que pasó. Pobre de mí.

    El alegre salto desde al-andalus al fundamentalismo islámico actual o al desarrollo de un posible nacionalismo andaluz de corte "radical" indica que la mente de muchas personas están presas de extraños miedos atávicos y cervales que les impiden acercarse a la realidad histórica y, lo que más nos importa, cultural que fue al-andalus con el mínimo de "objetividad" que sería deseable para que la dialéctica del foro fuese constructiva y fecunda.

    "Las correrías y el pillaje no son invasiones. Por otra parte, Hispania no era un erial despoblado y tampoco lo era el norte de África; y adelantemos que a las legiones romanas les llevó doscientos años lo que las crónicas árabes posteriores adjudican al islam en tres. Sólo un inconveniente nos sale al paso: resulta que no hay documentación de la época. Conclusión aparente: todo es mentira." (ProF. Emilio González Ferrín, Historia general de al-andalus, p. 79, dentro del apartado "Mitos fundacionales").

    "General Bremond, Berbères et Arabes. Paris: Payot, 1950. Tras su avance por el desierto norteafricano durante la II Guerra Mundial -al frente de contingentes aliados en contra de Rommel-, se pregunta este general quién puede creerse el milagro de la caballería árabe..." (op. cit. Nota al pie de la página 86).

    Y, ya que estamos, apuntar que he escuchado decir a la ProF. Mar Marcos, del departamento de Historia Antigua de la U. de Cantabria, en ponencia pública, que el término "RECONQUISTA" no se utilizó en la E. Media. Aclarar, eso sí, que sólo quería decir lo que dijo sin luego hacer "historia ficción".

  18. #18 moriarty 26 de ene. 2007

    Tienes razón F.
    espero que volvamos a coincidir en alguna otra línea.
    Saludos

  19. #19 berserker 26 de ene. 2007

    F.
    Hoy, a las 19:01 moriarty, no creo que ya merezca la pena que sigas intentando hacer recapacitar a esta gente.

    Como me repatea.....pero tu quien narices te crees que eres tio? el santo patrón de la verdad absoluta o que?.....no hay cosa que mas asco me de ,que la prepotencia de los que se creen en posesión de la verdad.......
    A lo mejor el que debes de recapacitar eres tu campeón, menuda altivez que se gasta el señor F.

  20. #20 Cadwaladr 26 de ene. 2007

    F. ¿Cómo osas contrariar a los inventores de las matemáticas?

    Repite cien veces

    2 - 1 = 2;
    2 - 1 = 2;
    2 - 1 = 2;

    Pues eso, salud que no falte.

  21. #21 ofion_serpiente 26 de ene. 2007

    Gracias por el comentario F.. Si, ya he llegado a la parte en que explica su Gran Plan

  22. Hay 21 comentarios.
    1

Si te registras como usuario, podrás añadir comentarios a este artículo.

Volver arriba