Autor: Brigantinus
viernes, 07 de julio de 2006
Sección: Artículos generales
Información publicada por: Brigantinus


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Los cátaros: más acá del mito

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  1. #1 Leola 11 de jul. 2006

    Buenas noches celtíberos,

    Brigantinus, muy interesante artículo, que no hace sino acrecentar mi interés por conocer la Historia de este grupo de "perfectos".

    La semana pasada terminé de leer un interesante libro sobre la historia de los cátaros y su dispersión por Europa. Llamó mi atención el hecho de que cruzaran los Pirineos, y en su peRIPlo llegaran a tierras del Maestrazgo. Así es, Morella y San Mateo podrían representar los últimos reductos y bastiones de su presencia.

    He encontrado en esta web:

    http://www.iacobus.net/Es/Catala.Htm

    "Mientras en Occitania la dura represión había arruinado las ciudades, en Cataluña, gracias a las argucias del rey Jaume I y su consejero Raimon de Penyafort escapan a la destrucción, sino al contrario hacen de las tierras catalanas unas tierras más prosperas.
    Pere Authié, un muy fiel de la doctrina cátara, consigue crear un grupo de cataros en la Cerdanya. Al final cayó en manos de la inquisición, y fue quemado, pero su grupo consiguió escapar a Cataluña, con un viejo cátaro denominado Guillaume Bélibaste, que había escapado de las prisiones de Carcassonne, que representó la ultima iglesia cátara de Occitania. Este hombre vivió en diferentes pueblos de Cataluña, alternando su trabajo de tejedor con la de pastor. Vivió en Flix, Lleida (1313), Tortosa y en las montañas de Morella (1315), de dónde sólo salía para presidir las reuniones de creyentes que venían de todas partes de Cataluña, y que se encontraban en San Mateo. La Inquisición envió un espía a Cataluña para descubrir los grupos de cataros que operaban en estas tierras. Este espía era Arnau Sicre, miembro de una familia cátara, a la que le habían confiscado sus corderos. La madre de este espía fue quemada en la hoguera acusada de herejía, y el que Arnau quería conseguir era el regreso de sus posesiones a su familia. En el 1218, y por casualidad, topó con la comunidad cátara de San Mateo, en la que se infiltra, y con la excusa de administrar el consolamentum a una moribunda, arrancó de las tierras catalanas a Bélibaste, que denunciado por Arnau, fue encarcelado y quemado a Villerouge-Termenès. La comunidad se disolvió dándose a la fuga algunos y otros fueron condenados a cadena perpetua."

    Saludos,
    Leola

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