Autor: Carlos Sánchez-Montaña
viernes, 18 de agosto de 2006
Sección: Roma y Grecia en Celtiberia
Información publicada por: lucusaugusti
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¿A quién le importa la historia de Galicia?
Empiezan los trabajos para desmontar los restos romanos de la calle Ribadeo. La excavación había mostrado la planta de Lucus Augusti alto imperial.
El yacimiento de la calle Ribadeo dejó al descubierto la ciudad alto imperial de Lucus Augusti, el emplazamiento de los restos, a quinientos metros del foro, permite apreciar un barrio periférico colindante con el pomerio de la ciudad y conformado por ínsulas de dos plantas.
Esta ciudad, de urbanismo cuidado, fue la capital del convento lucense desde el siglo I a.C. y por lo tanto la primera ciudad en el territorio de la actual Galicia. La primera ciudad de Galicia.
Los arqueólogos han podido constatar el altísimo valor arqueológico del yacimiento y de los diversos elementos que en ella han encontrado.
Galicia esconde su verdadera historia desde hace siglos, Plinio “el viejo” no menciono a la ciudad de Lucus Augusti, las fuentes históricas ignoran a la ciudad alto imperial que ha sido encontrada ahora en la calle Ribadeo.
La Academia, los centros de estudios históricos, las asociaciones culturales gallegas, miran para otro lado para no ver con sus propios ojos lo que a menos de un metro de profundidad surge en la ciudad de Lugo. La verdadera historia de Galicia, una gran ciudad romana heredera del urbanismo de Hipodamo y Vitruvio.
Ahora, en el sempiterno mes de Julio, cuando los yacimientos de la ciudad siempre desaparecen impunemente, nos dicen que un millón de euros es un coste excesivo para mantener vivo el yacimiento. Posiblemente el yacimiento arqueológico más importante de Galicia no alcanza el precio de mercado de un sótano para cuarenta automóviles. Muy poco vale en el mercado la historia de esta comunidad.
Lean la noticia que en los medios se ha publicado esta semana sobre el proyecto de acondicionamiento de la Villa Romana de La Olmeda en la provincia de Palencia y que tiene una dotación presupuestaria de 6,3 millones de euros., y que como no, será aprovechado para potenciar la promoción turística y cultural de la zona.
¿Saben ustedes la diferencia que existe entre el yacimiento de La Olmeda y el de la calle Ribadeo? No se lo pregunten, una está en Lugo y la otra en Palencia. Es evidente para todos que una villa rural tiene un valor relativo frente a la primera ciudad de Galicia, pero seis millones de euros no son imposibles de alcanzar para los palentinos.
Nunca de manera tan concreta hemos quedado los gallegos en evidencia frente a nuestra historia.
Pero no debemos de preocuparnos, Lugo contará en breves semanas, del mayor centro comercial de Galicia, con un nombre que hará honor a la ciudad romana, “As Termas” y con reproducciones tipo Disney de los restos romanos originales que permanecen ocultos en el centro de la ciudad.
¿A quién le importa la historia de Galicia?
© Carlos Sánchez-Montaña
LAS EXCAVADORAS EN EL YACIMIENTO
Restos romanos de Recatelo se destruyen por el alto coste que tendrían conservarlos.
Patrimonio estimó, tras estudiar un informe municipal, que su singularidad no justifica el precio del solar.
Diario El Progreso 08/07/05
La noticia se presenta de manera diferente en La Voz de Galicia. Menos dramática y obviando la destrucción total del yacimiento:
Noticia en La Voz de Galicia
08/07/05
Empiezan los trabajos para desmontar los restos romanos de la calle Ribadeo. La excavación había mostrado la planta de Lucus Augusti altoimperial
La Xunta no considera viable la conservación in situ de los vestigios urbanos localizados
El Ayuntamiento tendría que asumir las indemnizaciones si se mantuviesen las estructuras halladas
Los restos de las estructuras de la ciudad romana hallados en el solar 1-3 de la calle Ribadeo no serán conservados in situ. La resolución de la Xunta sobre esta excavación arqueológica autoriza el desmonte de los vestigios hallados, lo que, en la práctica, posibilita la ejecución del proyecto privado de edificación de viviendas unifamiliares. En esta finca se apreciaba claramente la trama urbana, con sus calles, casas e incluso con los pozos de algunos edificios.
Por su situación y por la facilidad con la que se apreciaba la estructura urbana, desde algunos sectores sociales se demandó en distintos momentos a lo largo de los últimos meses la conservación in situ de los restos. Para ello, el Ayuntamiento tendría que asumir el coste de la indemnización a los propietarios del terreno. De lo que ha trascendido de la citada resolución, una vez consultadas fuentes de Cultura y del Ayuntamiento, se infiere que establece que no existe proporción entre el coste y la trascendencia de la exposición in situ de los restos.
En el citado solar han comenzado los trabajos previos al desmontaje de los vestigios arqueológicos. Esta tarea se llevará a cabo bajo la supervisión de los arqueólogos.
Además de las estructuras urbanas, se localizaron pozos de agua y de extracción de arcilla. Entre otras piezas, aparecieron dos aras, una de ellas con una inscripción. Igualmente fue hallado un epígrafe que permitió conocer el nombre del dueño de una de las casas: Abilius Reburrus.
Entre los fragmentos de cerámica localizados destaca el asa decorada de una lucerna, que representa una matrona romana. Igualmente, apareció un molde de lucerna, uno de los primeros que se localizó en Galicia.
Con todo, lo más notable del resultado de esta excavación fue la trama urbana, en la que se pudieron apreciar distintos niveles. En su momento, los arqueólogos destacaron la existencia de restos de animales que sirvieron de alimento, así como de hojas, ramas y troncos de árbol.
En este solar aparecieron también abundantes vestigios de lareiras.
A la vista la estructura de una ínsula urbana
Los restos romanos que aparecen en los primeros momentos de la excavación del solar números 1-3 de la calle Ribadeo permiten recomponer con considerable fiabilidad la estructura de la ínsula urbana que se extendía entre Rodríguez Mourelo y el Carril dos Loureiros. La información sobre calles y edificios que aporta esta zona es ya notable y parece ofrecer estupendas condiciones para un parque arqueológico.
La excavación la lleva a cabo la empresa Arqueoconsulting, bajo la dirección de Beatriz Pereiras. Los trabajos realizados han permitido constatar de nuevo que la ciudad romana altoimperial se extendía desde lo que hoy es el parque Rosalía de Castro hacia la plaza de Santo Domingo, en la época previa a la construcción de la Muralla, entre los siglos I y III. Hasta ahora sólo ha sido retirada la capa de tierra vegetal y parte de los escombros, tanto de época romana como posteriores. La excavación propiamente dicha se llevará a cabo en el mes en curso.
Los arqueólogos califican de sorprendentes los resultados logrados hasta ahora. Localizaron vestigios de tres edificios, entorno a dos calles perpendiculares. Los restos de las edificaciones están muy deteriorados; probablemente fueron expoliados para la construcción de la Muralla.
En esta excavación se aprecia perfectamente cómo era la planta de la ciudad romana en esta zona. Uno de los edificios, el más próximo al parque, debió de ser un inmueble de características muy notables, que fue modificado a finales del siglo II de modo que se invadió parte del espacio porticado. Aparecieron restos de tres grandes pilastras y vestigios de una cuarta, que indican la existencia de un espacio, pegado a la calzada, para acera, y una banda porticada, de cinco metros.
En lo que queda del edificio se aprecia claramente un pozo, con su brocal, con las marcas de la erosión provocada por las cuerdas utilizadas para subir y bajar los cubos; también son visibles las marcas de los dos o tres primeros peldaños de acceso a las plantas altas.
Los especialistas destacan la factura de los restos
Al otro de la calle romana, los restos de otros inmueble permiten diferenciar varias salas alineadas respecto al otro eje viario.
Los arqueólogos creen que fueron espacios dedicados a la venta de productos y actividades artesanales.
En esta parte aparecen muestras del siglo XVIII, como pozos de agua. Aún se aprecian restos de un tercer edificio, que parece ser del siglo III.
Los ejes viarios indicados, muy alterados en sus niveles superiores, están perfectamente definidos por los muros que los delimitan, así como por la existencia de contrafuertes y pilastras.
Los arqueólogos localizaron abundantes piezas de cerámica galaico romana del primer cuarto del siglo I. Los especialistas destacan que estos restos, por su factura y belleza, constituyen un aporte de notable importancia al ya rico patrimonio arqueológico de la ciudad.
Entre los hallazgos figuran dos aras, una de ellas con una inscripción que todavía no ha sido definitivamente intepretada.
Con todo, y aún en los primeros momentos de la excavación, uno de los aspectos más interesantes de la investigación en el solar 1-3 de la calle Ribadeo es la claridad con la que se aprecia la trama de la ciudad romana.
Con las indicaciones adecuadas, es posible, en un breve paseo, sin necesidad de un gran esfuerzo imaginativo, situarse en la ciudad romana, tanto en sus calles como en sus edificios.
La directora de la excavación, Beatriz Pereiras, de Arqueoconsulting, destaca la gran cantidad de lareiras de las que se encuentran vestigios en esta excavación y los numerosos molinos manuales de grano; hasta tres superpuestos han llegado a localizar los arqueólogos. En estos primeros momentos de la excavación aparecen gran cantidad de piezas de bronce (agujas y elementos de ajuar doméstico).
Entre los fragmentos de cerámica, destaca uno que los expertos consideran excepcional en Galicia: un asa decorada de una lucerna, que representa una matrona romana. También se encontró un molde de lucerna, el primero hallado en Galicia, que Francisco Hervés relaciona con las tumbas de incineración de la plaza de Ferrol.
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Un proceso de destrucción que parece calcado -para que veas que las insensateces no ocurren solo en Galicia- es el del castro de Cellagú:
Allí hubo un poblado indígena de fundación prerromana (siglo V a. de C.) que tuvo una posterior ocupación romana a partir de mediados del siglo I. Las primeras excavaciones llevadas a cabo en el complejo en 1994 evidenciaron la existencia de complejas fortificaciones de época prerromana con una muralla de módulos.
En época romana se reutilizaron estas defensas encajándoles un torreón circular de unos siete metros de diámetro, provisto de escalera de caracol externa, y un compartimento enlosado que fue interpretado como posible cuerpo de guardia. También existía una segunda muralla con una nueva puerta de acceso .
Durante las excavaciones salieron a la luz restos de actividad metalúrgica, identificándose talleres de fundición, a los que hay que añadir la presencia de cerámicas de cocina y vajillas de lujo, así como un buen número de objetos metálicos.
Entre los restos metalicos encontrados hay fíbulas de caballito y otros objetos de tipología celtibérica.
Los arqueólogos relacionaron siempre el castro de Cellagú (11.000 metros cuadrados) con otros yacimientos cercanos, que en algunos casos se divisan desde el mismo castro, y hacen referencia a las minas del Aramo, de las que extraerían el mineral destinado a la transformación. Las excavaciones también constataron la existencia de otras villas romanas, vías y puentes que se levantaban en sus inmediaciones y que se documentan desde época altomedieval. Señalan que todo ello dibuja un contexto único que debió coincidir con los albores y el nacimiento de la ciudad de Oviedo.
Hasta aquí todo perfecto, pero el problema surge cuando la cementera Readymix Asland tiene la necesidad de ampliar la cantera que linda con el castro; una noche de 1997 unos desconocidos entran con una excavadora y se llevan por delante todo lo que pillan. Destruyen el castro. Ningún culpable. Políticos que no ven la gravedad de la desaparición de "un montón de piedras" (palabras textuales del diputado Antón Saavedra). Más despropósitos y olvido durante años.
Por fín la gran solución: Se dejará campo libre a la cantera, el castro -o lo poco que queda de el- será desmontado y trasladado a otro lugar para construir un bonito parque temático.
http://www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pIdNoticia=279294&pIdSeccion=31&pNumEjemplar=877
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